Rayos y truenos en el nuevo libro sobre el cielo del periodista Antonio Martínez Ron
Noticia Página Dos
- Algo nuevo en los cielos (Crítica) narra el gran viaje de la humanidad por los océanos del aire
- Página Dos se cita con este divulgador científico para hablar de su fascinación por los fenómenos de la estratosfera
- Hablamos de meteorología, astronomía, ingeniería aeronáutica y otras disciplinas que miran al cielo
El mar, la tierra y el aire. El ser humano ha querido viajar a los confines de su mundo y dibujar los límites del que llama su hogar. La fascinación por la estratosfera es tan vieja como la humanidad. Dijo Thoreau: «Aunque no haya nada nuevo sobre la tierra, siempre hay algo nuevo en los cielos. Cada día que pasa abre una nueva página para nosotros. El viento cambia constantemente la tipografía de esa página azul, y la persona inquisitiva, en cualquier momento, puede encontrar allí una nueva verdad.»
Algo nuevo en los cielos (Crítica) es el libro que acaba de publicar el periodista científico Antonio Martínez Ron, un mutipremiado divulgador que también ha colaborado con La 2 y RNE. En 2012 dirigió el documental El mal del cerebro, en el que revisaba las principales investigaciones sobre el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas del cerebro y la mejora del rendimiento mental.
En este nuevo libro Martínez Ron mira hacia arriba y recorre la historia del conocimiento del cielo, una narración trepidante sobre cómo se descifraron los secretos de la atmósfera mientras la humanidad ganaba perspectiva sobre su lugar en el universo. Este empuje por saber vino dado por algo tan humano como la curiosidad y la fascinación por las estrellas, los atardeceres, las nubes, las tormentas, el arcoiris y todos esos misterios que sobrecogían a nuestros ancestros. «El cielo ha sido fuente de alegrías y de desdichas, proveedor de lluvias y sol para las cosechas, y también el origen de la furia del rayo, los huracanes y el granizo. Durante buena parte de nuestra historia también fue el tablón de anuncios de los dioses, omnipresente en todas las mitologías y relatos sobre la creación de los humanos.»
La poesía de la astronomía
En las páginas de Algo nuevo en los cielos se responde a preguntas cómo el porqué de la lluvia, qué contiene el aire que respiramos, quiénes fueron los pioneros del cielo, dónde comienza el espacio. Antonio Martínez Ron arranca la narración desde el jardín de su casa y termina en la estratosfera, después de enviar un globo sonda hasta una altura de 27.000 metros sobre el mismo punto en que comenzó a tejer su historia. «Hablé con meteorólogos, pilotos, poetas y cazadores de tormentas», anuncia en el primer capítulo. «Y comprendí que aquel viaje vertical, que empezaba en las montañas y seguía en globo, en aviones y cohetes, es una de las aventuras más fascinantes que jamás ha protagonizado el ser humano.»
Óscar López pasea con el periodista mientras le pregunta cómo definiría este ensayo que mezcla disciplinas tan distintas como la historia, la meteorología o la aeronáutica. «Creo que es un libro de aventuras. La gesta de una exploración vertical es una historia de la que no hablamos tanto, nos hemos olvidado de ese sueño.» En esas reflexiones aparece un elemento inesperado: la poesía. «Cuando he estudiado las crónicas y diarios de aquellos primeros descubridores no he tenido que tocar una coma, es fascinante la emoción con que se expresan.»