El "shock" de Natalia de Molina, lo que ocurrió con su segundo Goya
- Cuando recibió su segundo "cabezón", la actriz se quedó bloqueda por la emoción
- No te la pierdas en Techo y comida (2015), ¡disponible en RTVE Play hasta el 9 de junio!
- Tiene dos Goyas, mejor actriz revelación y protagonista, claves de la gran actriz española
- El 13 de mayo estrena su próxima película La maniobra de la tortuga (2022)
Natalia de Molina solo tenía 21 años cuando cogió entre sus manos su primer Goya. Su papel en Vivir es fácil con los ojos cerrados (2013) -película que puede verse en RTVE Play-, de David Trueba, centro todas las miradas en aquella prometedora actriz revelación. En la película daba vida a Belén, una chica que decide escapar para hacer lo que desea y no lo que los demás le dicen que debe hacer. Una máxima que Molina llevó también al terreno personal.
"No quiero que nadie decida por mí", aquella frase que recuperaba de su personaje y lanzaba en su discurso de agredecimiento en los Goya la llevaría a continuar con su sueño. "Nos lo quitarán todo si quieren, pero no nuestros sueños ni nuestra capacidad de hacer los sueños realidad", así terminaba ese discurso, sin poder contener la emoción.
La actriz más joven en ganar dos Goya
Dos años después, en 2016, llegó su segundo Goya, esta vez a mejor actriz protagonista, por la película Techo y comida. No lo tenía nada fácil, ya que competía con otras grandes figuras del cine, como Penélope Cruz o Juliette Binoche. Pero, finalmente, la actriz se impuso convirtiéndose en la actriz española más joven en conseguir dos Premios Goya.
A pesar de que este era ya su segundo Goya, Natalia confiesa que "esta película fue un antes y un después". Lo ha contado así en el coloquio de Versión Española que este domingo emitía Techo y comida (2015) -disponible también en RTVE Play- y al que la actriz a acudido con el director de la película, Juan Miguel del Castillo, con quien el próximo 13 de mayo presenta La maniobra de la tortuga (2022).
Una actriz con todas las letras
Durante la charla, la actriz ha reconocido que con aquel premio pudo demostrar, por primera vez, que era "una actriz con todas las letras" y "que lo de Vivir es fácil con los ojos cerrados no había sido solo una cuestión de suerte y de fortuna", añadía.
En Techo y comida (2015), Natalia se metía en la piel de Rocío, una madre soltera y sin trabajo, que no recibe ningún tipo de ayuda ni subsidio y vive con la amenaza de perder su piso, el hogar en el que vive con su hijo de ocho años. Guiada bajo las órdenes de Miguel del Castillo en su ópera prima, Natalia tuvo que enfrentarse a intensas escenas rodadas en plano secuencia con una poderosa carga emocional.
Para la actriz aquella voluntad formal del director la dejaba contra las cuerdas. "Sientes que no hay escapatoria. A nivel interpretativo se disfruta, pero también se sufre porque sabes que la responsabilidad es mayor. Si mientes el espectador se va a dar cuenta enseguida”, confesaba Natalia en el coloquio.
"Solo quería irme a mi casa a llorar", lo que pasó tras el Goya
Su brillantez interpretativa en aquellas secuencias la elevó hasta lo más alto como actriz. Un trabajo que sería recompensado con el Goya. Lo que nadie imaginaba es que aquel galardón, el segundo que recibía, iba a dejarla en un estado de "shock" absoluto. Así lo contaba la presentadora de Versión Española, Cayetana Guillén Cuervo, en la charla con el director y la actriz: "Cuando Natalia de Molina gano el Goya, su representante hizo una fiesta privada en una de las suites. Es allí, cuando al entrar en en esa habitación, me encuentro a Natalia sentada, muy tiesa, rodeada de su familia, sin moverse. Toda la gente estaba bailando, tomándose sus copas, pero ella quieta. Estaba en shock, no se podía creer a dónde había llegado ese sueño, que era ganar el Goya a la mejor actriz protagonista y tener el Goya encima de ella".
Sobre aquel momento, Natalia reconoce que su estado la impudio disfrutar el momento. “Ha sido una cosa que, después, con el confinamiento he podido disfrutar eso que viví, porque entonces no entendía lo que había pasado, estaba asustada, yo lo que quería era irme a mi casa a llorar, estaba en shock”, comenta Natalia.
Del Castillo y De Molina, tandem de cine
Durante el coloquio de Techo y comida, actriz y director pudieron charlar también sobre el que será su próximo proyecto juntos. La película La maniobra de la tortuga (2022), participada por RTVE, que llegará a los cines el 13 da mayo y en la que ambos vuelven a adentrarse en un thriller policiaco que mezcla drama social y que aborda la violencia de género con una visión valiente y comprometida.