Bob Dylan: 63 años de carrera, un Nobel y música para la eternidad
- La discografía del cantautor americano consta de 39 álbumes de estudio, 10 en directo, 14 recopilatorios y 70 sencillos
- Con sus letras se ha convertido en un icono del movimiento protesta
- Es el único músico que ha recibido un premio Nóbel de Literatura
Bob Dylan es un artista extraordinario, “un auténtico fuera de serie” y que aún tiene una influencia decisiva en mundo de la música. Con sus letras “ha puesto el dedo en la llaga infinidad de veces” y su estilo musical que ha dado grandes saltos a lo largo de su carrera. Sin lugar a dudas es una de las figuras más influyentes en la historia de la música popular.
Los inicios del Chico de Duluth
Bob Dylan comenzó su andadura musical tras abandonar la Universidad de Minnesota en 1960. “Asimiló una mezcla de influencias musicales y literarias que iban desde el rock and roll del Little Richard y Elvis Presley al toque blues de Woody Guthrie, el melancólico lirismo de Hank Williams y el grito aullido irreverente de los poetas beat”.
Natural de la ciudad de Duluth, Minneapolis, abandona la ciudad y parte hacia New York en busca de oportunidades. Adoptando la “imagen del trovador del folk” recorre los pequeños clubs de folk del Greenwich Village con su propio repertorio.
Tras participar en los álbumes de Harry Belafonte y Carolyn Hester tocando la armónica publica su primer disco titulado Bob Dylan, en 1962. ”Un disco debut excepcional donde plasmó con claridad sus más recientes influencias con canciones inspiradas o prestadas por compañeros folks y el blues de Blind Lemon Jefferson”, argumentaban en Pioneros.
A finales de ese mismo año, Dylan grabó el sencillo “Mixed up confusion”. Un tema en la “línea del rock eléctrico” que fue rápidamente retirado de la vente por temor a “crear un conflicto con su imagen de joven mesías salvador del folk”.
De referencia del folk a icono del movimiento de protesta
Con sus canciones se convirtió en el “profeta iracundo” que denunciaba los males del mundo. Con su voz y sus letras condenó la guerra, las miserias sociales poniendo música a un sentimiento colectivo. “Conectaba diciendo cosas serias y además sonaba bien. Para mucha gente fue un descubrimiento, sobre todo para los músicos”. Relataban en La madeja. Asimismo, fue aclamado por sus contemporáneos como activista por los derechos civiles de los afroamericanos.
“Hurricane” es un sencillo dedicado a una canción dedicada a Rubin Carter, que pasó casi 20 años en la cárcel por un crimen que no cometió. En 1966, Carter fue arrestado y acusado del asesinato de tres personas en Nueva Jersey. “A pesar de pasar el detector de mentiras y de que ninguno de los testigos lo reconociese como autor, ni a él ni a sus acompañantes”. Dylan impactado por la historia, lo visitó en la cárcel, y tras hacerlo compuso este tema. Después de su publicación se consiguió un segundo juicio en 1976, un proceso que “financió en parte con los derechos de la canción”.
Un tema que es uno de los principales éxitos del estadounidense y que “tuvo que modificar su letra antes de grabarla por recomendación de los abogados de la discográfica, ya que vertía acusaciones hacia terceros no demostradas y aquello podía derivar en demandas millonarias”, explicaban en Rebobinando.
“A Hard Rain’s A‐Gonna Fall” es uno de los clásicos más simbólicos de Bob Dylan. “Un tema onírico y apocalíptico que habla sobre el infierno en la tierra, escrito en plena Guerra Fría y poco antes de la crisis de los misiles”.
“The Times They Are A-Changin” es una de las canciones protesta más emblemáticas de todos los tiempos. Es una de las bandas sonoras de los setenta y de sus contiendas, de las protestas contra la guerra de Vietnan y la lucha por la igualdad racial. “Su buen amigo Tony Glover leyó aquel texto y su primera reacción fue preguntar al cantautor sobre qué era esa mierda. Al parecer, Dylan le respondió que eran esas cosas que la gente quería escuchar. Años después afirmó que aquella canción era más un sentimiento que una declaración”, afirmaban en Sin rodeos.
"Murder most foul" dura 16 minutos y “está plagada de referencias, de imágenes que hablan de la cultura popular y sobre todo, del asesinato de John Fitzgerald Kennedy en noviembre del año 1963”. Es la primera canción inédita desde 2012, en una “especie de letanía de letra” en la que Dylan va recitando sus versos. El de Duluth afirma en un comunicado que este hit era un regalo a sus seguidores por su apoyo y lealtad a lo largo de los años.
Cambio de rumbo en su carrera musical y conversión al cristianismo
A comienzos de la década de los 80, la carrera de Bob Dylan tomó un nuevo rumbo puesto que “El genio de Minessota quería romper de algún modo con la impresión pública que habían provocado sus dos últimos elepés de la década de los 70”. Un periodo creativo que plasmó en los discos Shot of Love, Infidels o Empire Burlesque. Una época en la que “perdió ese tono envagélico” y “con un dominio vocal que nos pilla casi por sorpresa, por su tono apasionado”.
¿Puede un premio literario reconocer la labor de un músico?
El 13 de octubre de 2016, la Academia Sueca otorgó el Premio Nobel por “haber creado una nueva expresión poética dentro de la gran tradición de la canción estadounidense”. Un galardón que hasta entonces había respetado “religiosamente los limites de la novela, la poesía o el ensayo”, convirtiéndose así en el primer músico hasta la fecha en obtener dicho reconocimiento. Esta distinción abrió el debate y generó mucha controversia. Sus letras llenas de mensajes como “Blowin' in the Wind”, 'I Feel A Change Comin' On', “Union Sundown” son dignas merecedoras del eterno galardón. “Pero si hablamos de la relación entre Dylan y la literatura, no hay nada más revelador que su tema más icónico, “Like a Rolling Stone”, exponían en Cinco Pistas.
“Si por algo es celebrado Bob Dylan es por ser un cronista de su tiempo”. Quizás por eso otro de los galardones que ha obtenido el cantautor es el premio Pulizter en 2008.De nuevo, el primer músico de rock en conseguirlo.