Judy Garland: sus grandes películas, la actriz más allá de 'El mago de Oz'

• Judy Garland fue nominada al Oscar dos veces, la primera por Ha nacido una estrella
• Coincidiendo con su centenario, Días de cine emite el clásico musical de 1954

Judy Garland, la estrella más allá de Dorothy

La era dorada de Hollywood estuvo llena de estrellas fulgurantes cuyos legados aún brillan hoy en el imaginario cinéfilo. Pero en aquel mundo lleno de glamour, champán y focos deslumbrantes tenía un lado oscuro con muchas sombras.

La historia de Judy Garland (1922-1969) está marcada por abusos sexuales, adicciones y una carrera en el mundo del espectáculo a la que fue abocada demasiado pronto, en favor de una industria audiovisual sin escrúpulos que explotó su talento hasta consumirla.

Su nombre y su imagen han quedado asociados por siempre al de Dorothy, la joven del clásico El mago de Oz, (1939). Este fue su primer papel protagonista, el personaje que la llevó por un camino de baldosas amarillas -muchas de ellas rotas- hasta convertir su rostro y aquel inolvidable 'Somewhere Over the Rainbow' en uno de los grandes iconos de la historia del cine. Sin embargo, aquella primera aparición marcaría el resto de su carrera, eclipsando todo lo demás.

Mucho más allá de la tierra de Oz

Lo cierto es que la actriz era mucho más que una granjera de Kansas con un vestido azul a cuadros, y su talento iba mucho más allá de la tierra de Oz. Su carrera incluyó musicales en Technicolor, dramas contemplativos en blanco y negro, números metamusicales y colaboraciones recurrentes con personajes como Mickey Rooney, Gene Kelly o el director Vincente Minnelli.

(Grand Rapids, Minnesota, 10 de junio de 1922-Londres, 22 de junio de 1969)

Con motivo de su centenario, Días de cine clásico emite en La 2 el mítico musical con el que Garland regresó a la gran pantalla tras cuatro años de ausencia, deslumbrando a todos con uno de sus papeles más brillantes. Una doble cita con el cinte que aprovechamos para repasar algunas de las películas con las que Garland demostró ser mucho más que la niña de los zapatos rojos.

Por mi chica y por mí (1942)

Este musical de MGM marcó el debut en la pantalla del legendario hombre de canto y baile Gene Kelly y también le dio a Garland su primer papel importante para adultos. La cinta está ambientada en las vísperas de la Primera Guerra Mundial, cuando dos artistas de vodevil, Jo Hayden (Garland) y Harry Palmer (Kelly), sueñan con llegar a Broadway y casarse.

La película también presenta a Garland y Kelly haciendo duetos y bailando en la canción principal, que se convirtió en un sencillo exitoso cuando se lanzó en 1942 y aterrizó en el Salón de la Fama de los Grammy. Garland también la incluyó en un popurrí de canciones en su legendario concierto en el Carnegie Hall de 1961.

Cita en St. Louis (1944)

Una de las favoritas personales de Garland porque fue la primera vez que se sintió hermosa en la pantalla (y se le permitió aparecer en un estado más natural, sin los discos nasales y protectores dentales exigidos anteriormente por el estudio). Dicen que Garland se enamoró y se casó con el director Vincente Minnelli porque la hizo sentir tan hermosa en esta imagen, y no es difícil ver la evidencia visual de ese sentimiento.

Aquí vemos quizá, uno de los momentos más exuberantemente y radiantes de la actriz, que dejaba por completo su imagen aniñada. Sus labios carnosos y rojos son tan complementarios que Garland los adoptó como parte de su estilo característico. La película, además, nos deja una de las canciones navideñas más populares del cine, 'Have Yourself a Merry Little Christmas', cantada por la propia Garland.

Judy Garland en 'Cita en St. Louis' (1944)

El reloj (1945)

Aunque Garland era conocida por su voz única, también era capaz de realizar una excelente actuación dramática. El relojes uno de sus mejores, y también fue su primer papel protagónico para el que no cantó. Garland interpreta a Alice, una joven neoyorquina que tiene la oportunidad de conocer a un soldado, Joe (Robert Walker), en la estación Pennsylvania. Una muy buena oportunidad de ver a Garland en un papel verdaderamente adulto, dando una actuación que le permite hincarle el diente al material dramático en lugar de una comedia musical más ligera.

Repertorio de verano (1950)

Esta es una película complicada para Garland, ya que fue su última película con MGM y el final del contrato de estudio que había definido y dado forma a su vida desde la década de 1930. La producción fue una lucha para Garland, que entonces ya estaba luchando contra su adicción a los somniferos. A menudo llegaba tarde o se atrasaba cuando llegaba el momento de filmar números musicales. La cinta ofrece además una de las secuencias musicales más relevantes de su carrera, aparte del tema de Oz, 'Get Happy'.

Ha nacido una estrella (1954)

Anunciada como el regreso de Garland, la versión de 1954 fue su primera película en cuatro años, después de separarse de MGM. Desesperada por triunfar en Hollywood, Garland coprodujo el proyecto con su entonces esposo Sid Luft. En la cinta, Garland domina la pantalla y ofrece una actuación prodigiosa. Fue nominada a su primer Oscar por la actuación, pero perdió ante Grace Kelly (The Country Girl), en la que muchos cinéfilos consideran el mayor desaire en la historia de los Premios de la Academia. Lo que sí logró fue el Globo de Oro a mejor actriz.

Judy Garland: sus grandes películas, la actriz más allá de 'El mago de Oz'

¿Vencedores o vencidos? Juicio de Nuremberg (1961)

Garland obtuvo su segunda y última nominación al Oscar por su interpretación de Irene Hoffman en esta intensa historia de un tribunal estadounidense de 1948 que juzgaba a los nazis por crímenes de guerra desde los pasillos de un tribunal en la Alemania ocupada. Es uno de los pocos papeles no musicales de Garland.

El papel de Garland es pequeño pero crucial (alrededor de 18 minutos de tiempo de pantalla), como una mujer que es llamada a testificar contra las atrocidades nazis y aterrorizada de ayudar en el caso de la fiscalía estadounidense contra los jueces alemanes. Con esta cinta, obtuvo su segunda y última nominación al Oscar con una escena apasionante en la que se derrumba en el estrado de los testigos. Para Garland, esta fue una de sus últimas actuaciones verdaderamente notables. Solo hizo tres películas después de esta.