Inés Sastre critica ferozmente el abuso del Photoshop en la moda: Estas son sus palabras
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Sin filtros ni retoques, así eran las fotografías de moda que publicaban las revistas y las campañas de publicidad en los años 90. Lo cuenta Inés Sastre en La Matemática del Espejo: “Antes tenías tus luces, y si tenías una cosa en la piel o lo que sea, te cambiaban las luces. Pero no había nada de Photoshop”. Palabras que hoy no se escuchan en la profesión, porque son historia. Ahora la fotografía de moda no se entiende sin los retoques digitales, algo que a ella no parece hacerle mucha gracia. Inés Sastre critica el uso excesivo que, a veces, se hace a la hora de editar las imágenes para buscar una falsa perfección. “A veces la gente exagera. Puedes ser tú o la tía de John Collins”, dice con mucho sentido del humor, aunque se aprecia que detrás hay una feroz crítica al abuso del retoque digital. “De repente dices: 'Pero, ¿qué me han hecho en la cara!?' A veces no me he sentido cómoda y he pensado: '¡Bueno, da igual, es una foto más, no pasa nada!'. Pero es cierto que se os ha ido un poquito la mano”, sentencia. Eso sí, la supermodelo y actriz española, que ha vivido la transición y todo tipo de cambios en la moda, cree que, como todo, si se usa en su justa medida no tiene por qué ser negativo: “Yo creo que hacer un poquito de Photoshop o algún retoque está bien, pero sin que aquello se convierta en otra persona”.
Inés Sastre critica el uso excesivo del Photoshop
Para Inés Sastre, supermodelos tan icónicas como Naomi Campbell, Claudia Schiffer o Carla Bruni eran jóvenes y realmente bellas al natural. Tanto, que sus fotografías no necesitaban retoques: “Eran realmente espectaculares, porque ahora hay Photoshop, pero esas eran guapas de verdad”. Hoy han cambiado los cánones de belleza y la moda abraza la diversidad y lo diferente. También en España. Si antes conquistaron París modelos como Nieves Álvarez, Eugenia Silva y Helena Barquilla, ahora destacan Nuria Rothschild y África García. Las nuevas tops españolas no tienen tanta popularidad, pero tienen una excelente carrera y una gran proyección internacional. “Son estupendas, se las conoce poco, desgraciadamente, pero son niñas que trabajan súper bien”. Eso sí, cree que en algunos casos prima la fama y no la profesionalidad. “Ahora todo el mundo cree que puede ser modelo por ser hija de un conocido, por lo que sea. Yo creo que es un trabajo y vas aprendiendo cómo se hace y cómo se posa”.
“Yo fui una de las primeras influencers sin saberlo”
La actriz y top model también ha hablado sobre el uso de las redes sociales. Confiesa que le dan “un poco de miedo”, pues cree que son bastante poco controlables: “Antes tenías tus revistas, entonces la gente miraba, ahora todo es más veloz”. Ahora todo ha cambiado y todo está condicionado por las redes sociales. Son muchas las modelos que se quejan de que se contrate a una compañera o no basándose en el númerro de seguidores, como hizo Blanca Padilla. Del término 'supermodelos' se pasó a 'influencers', aunque Inés Sastre cree que ellas ya lo fueron, eso sí, sin darse cuenta. “Lo éramos en cierto modo”. Y hablando de redes sociales. Ella ha sucumbido al poder de Instagram, aunque sin obsesionarse: “Publico más o menos lo que voy haciendo, o fotos antiguas las mezclo con fotos actuales”. Inés prefiere tener un perfil más personal y alejarse así de la imagen de los instagramers: “No es muy profesional, pero es que tampoco no es mi trabajo”.