Un paseo por los acantilados de Dover en el estrecho entre Reino Unido y Francia
- Los acantilados blancos de Dover bordean la costa británica y están a solo 34 kilómetros del puerto francés de Calais
- Los precipicios alcanzan hasta 105 metros de altura
- La ciudad, situada en el condado de Kent, también es conocida por su castillo
Recorrer la costa de Dover, en el condado inglés de Kent, por encima de sus acantilados es simplemente alucinante. Los precipicios alcanzan hasta 105 metros de altura y su color blanco, ya que están compuestos por la roca creta, se acentúa con el contraste del mar y el verde de la hierba de la superficie.
Los acantilados están en frente del estrecho que separa Reino Unido y Francia. Dover es la ciudad que más cerca se encuentra de Europa continental ¡Está a solo 34 kilómetros del puerto francés de Calais! Si el día esta despejado, quizás puedas ver territorio francés. Las temperaturas en Inglaterra suelen ser frías, el clima lluvioso y en esa zona hay bastante viento por lo que si vas, tenlo en cuenta para abrigarte.
Los acantilados se extienden 16 km a lo largo de la costa pero si no quieres caminar tanto, te aconsejamos recorrer 3 kilómetros de ida por el sendero que va desde el Visitor Centre Langdon Cliffs, donde hay una cafetería y una tienda de souvenirs, al South Foreland Lighthouse en Saint Margaret's Bay. Podrás caminar por los caminos marcados que recorren los acantilados pero cuidado porque estos se continúan erosionando y pueden caer trozos a la orilla. Así que procura permanecer a más de cinco metros del borde del abismo.
El Castillo de Dover
Los acantilados blancos a traen a miles de turistas cada años pero Dover también es famosa por tener el mayor puerto del Canal de la Mancha del país. Además, la ciudad inglesa también es conocida por su castillo, construido en el siglo XII durante el reinado de Enrique II. Desde The Visitor Centre Langdom Cliffs puedes ir al castillo caminando por un sendero durante unos 35 minutos. Eso sí, es cuesta arriba.
Dover está en un punto geográfico estratégico, era un lugar de guardia históricamente amenazada por invasiones de sus enemigos. Así que en el siglo XII también se construyeron túneles subterráneos detrás de los acantilados y están conectados al puerto para sorprender a las tropas atacantes. Años más tarde se ampliaron hasta el castillo. Puedes recorrer parte de esos túneles, que también fueron utilizados durante la Segunda Guerra Mundial.
Como ves, si viajas a Londres o quieres hacer una ruta por Inglaterra, escaparte a Dover un día es un MUST.