El Coach Nutricional nos explica cómo recuperarnos de los excesos de verano
- En verano nuestro estilo de vida cambia y esto puede afectar negativamente a nuestra composición corporal
- Lo fundamental para recuperarnos es hacer las cosas con cabeza, no con prisa
- Roberto no duda: la mejor herramienta es siempre acudir a un profesional
A lo largo de estas semanas hayamos charlado un par de veces con Roberto Vidal para que el nutricionista nos diese sus mejores consejos para no perder la composición corporal a lo largo del verano y tomar las decisiones más saludables cuando estamos de terraceo, pero la época estival es para disfrutarla y puede que a muchos de nosotros las buenas intenciones se nos quedasen por el camino entre tanta paellita y helado. En el último directo el Coach Nutricional nos explicó qué hacer para recuperarnos si el verano nos ha pasado factura.
¿Qué hábitos alteran nuestro cuerpo en verano?
El nutricionista es consciente de que es más que habitual que nuestro estilo de vida cambie en verano: “El consumo de productos veraniegos, como granizados, helados o refrescos, sumado a el cambio de horarios y la reducción de la actividad, nos genera un superávit de calorías que puede resultar en una acumulación de tejido graso, es decir, un empeoramiento de la composición corporal”.
Es frecuente que durante los meses más calurosos nuestra actividad disminuya radicalmente: “Solemos suprimir nuestras rutinas deportivas en verano, sea porque el gimnasio cierra o por el cambio de horarios. Cuesta mantener la actividad física en verano. Lo ideal sería hacer una prevención para no empeorar la composición: mantener un buen hábito alimentario e incrementar la actividad física”. Aunque Roberto es consciente de que no es más fácil decirlo que hacerlo: “El calor tampoco ayuda a hacer mucha actividad: a partir de las seis de la tarde uno no se derrite en la calle y por la mañana no nos apetece madrugar en vacaciones”.
¿Cuánto tardaré en recuperar mi cuerpo pre-verano?
Las prisas son malas, nos dice Vidal: “Para compensar, queremos volver a una composición corporal de forma muy rápida, a pesar de que sea un exceso de 2-3 meses, compensarlo en 2-3 semanas. Esto no es factible y nos lleva a una mala alimentación y a proyectar un sobreesfuerzo que puede resultar frustrante”. Lo ideal, según nos explica el nutricionista es “mantener nuestra composición corporal de manera efectiva es una constante a lo largo de meses, y con un plan a largo plazo. Debemos evitar las dietas súper estrictas y buscar la variedad. La alimentación debe cubrir todos los aportes y a la vez reducir tejido graso de forma saludable”.
Es crucial buscar soluciones que no perjudiquen nuestra salud física ni emocional: “De nada sirve bajar unos kilos de peso y estar destrozado anímicamente. El proceso debe ser disfrutable. Es un recorrido que se debe disfrutar en cada paso”. Las dietas de choque son siempre un error: “La gente suele hacer dietas populares (la piña, la alcachofa, etc.) para perder peso de una forma muy rápida, pero con un precio elevado: no solamente pierdes grasa, sino también glucógeno y agua. El impacto que tenga en el tejido muscular, en tu salud, en tus hormonas, va a ser contraproducente a largo plazo. Llegará un momento que será muy difícil mantener la constante de déficit y lo mandarás todo a freír espárragos”.
La importancia de un profesional
“Si no tienes las capacidades de mejorar tu alimentación tú solo pide ayuda de un dietista nutricionista con formación para que te guíe por el buen camino y que te eduque para aprender a alimentarse y a tener autonomía”, insiste Roberto, además de recalcar la importancia de cuidar también de la faceta emocional, “No hay que descartar la ayuda psicológica cuando queremos emprender un proceso de mejora de la composición corporal”, si crees que los motivos por los que tu relación con la comida no son saludables son psicológicos, pedir ayuda a un terapeuta es crucial.
Mira el directo completo aquí:
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