¿Quiénes fueron los amigos de Raffaella Carrà en España?

• La artista italiana hizo carrera en España, país del que se enamoró nada más llegar
• Así se despidió Loles León

Loles León y Raffaella Carrà en los premios World Pride 2017 Madrid

Raffaella Carrà amaba España y nosotros amábamos a Raffaella Carrà. Hizo carrera en nuestro país, que la acogió con los brazos abiertos. Le encantaba estar aquí, ya sea por trabajo o por ocio. Los chiringuitos de Marbella y Casa Lucio, en Madrid, eran sus luagres favoritos. No le costó meterse en el bolsillo a un público totalmente embelesado por su desparpajo, el mismo que conquistó a muchos rostros conocidos del panorama nacional. La artista italiana mantuvo sus amistades en España hasta el día de su muerte, a los 78 años. Entre sus mejores amigos, estaba la actriz Loles León.

Se conocieron en el año 1992, cuando hicieron juntas el programa ¡Hola Raffaella!. Su complicidad transpasaba la pequeña pantalla y acabó convirtiéndose en una amistad duradera que no cambió por mucho que pasaran los años. Para Loles León, además de amiga, era su fuente de inspiración.

Su fallecimiento la dejó destrozada. "Siempre me has agarrado fuerte y al mismo tiempo amorosa, tierna y protectora, con esa mirada tuya tan niña tan juguetona y tu manera de ser solidaria, libre, tu risa, tu curiosidad, tu capacidad de sorprenderte y de querer estar siempre ahí, iluminando y acompañándonos a todos. Siempre te querré tanto en tu ausencia como te he querido en tu grandiosa presencia. Te quedas en mi corazón y en mis ojos, lo primero que nos identificó cuando nos miramos: el amor. Te quiero mi adorada y admirada Raffaella Carrà. Ciao bella", así se despedía la actriz en redes.

"Era como su hermana, la adoraba", asegura Rappel, quien también mantuvo una relación de amistad con Raffaella Carrà. El astrólogo no puede evitar emocionarse al hablar de la artista en Lazos de Sangre. "Tiene que estar en un sitio especial. Estoy seguro de que si en el más allá hay un espectáculo, ella es capaz de poner a bailar a San Pedro. Donde ella esté tiene que haber alegría, tiene que haber buen rollo, porque ella era un ser de luz imparable", asegura Rappel. Él era un invitado habitual a las cenas que Raffaella organizaba en su casa situada en el Eurobuilding.

Moncho Borrajo, quien también tuvo la oportunidad de trabajar a su lado en el programa ¡Hola Raffaella!, habla maravillas de ella. "Te trataba como si fueras importante, no un colaborador más", reconoce.

Su vínculo con Lola Flores y Lucía Bosé

Con Lola Flores, no solo compartía una bonita amistad, sino también escenario. Juntas eran un espectáculo, cantando y bailando al ritmo de "Ay pena, penita pena" y "Fiesta", dos clásicos de dos pedazo de artistas.

Raffaella Carrà también era gran amiga de Lucía Bosé, una de las primeras amistades que afianzó en nuestro país. "Puedo decir que Lucía Bosé dijo que, el día que llegué a Madrid -era 1975, acababa de morir Francisco Franco- al presentarme en televisión di un toque de atención a las mujeres españolas, que empezaron a creer de nuevo en sí mismas", confesó Carrà en su última entrevista para el diario italiano Corriere della Sera.