La verdadera historia de Moby Dick: un barco hundido, canibalismo y una ballena mítica
- El hundimiento del barco ballenero Essex, atacado por un cachalote, inspiró la obra maestra de Herman Melville
- Su historia llegó al cine con En el corazón del mar, con actores como Tom Holland: ¿sabías que debutó en una película española?
Tres meses estuvo a la deriva el ballenero Essex tras ser atacado y hundido por un enorme cachalote de 26 metros. Ocurrió en 1820 en el océano Pacífico. No todos los tripulantes del barco, que había salido de Nantucket (Massachussets), sobrevivieron. Su historia inspiró a Herman Melville para escribir Moby Dick, una novela que pasaría a la posteridad y en la que también influyó una mítica ballena blanca llamada Mocha Dick. La aventura del capitán Ahab ha llegado al cine en varias ocasiones, mientras que la del Essex ha sido recuperada en El corazón del mar, una emocionante película que cuenta con un reparto de lujo en el que se encuentra Tom Holland.
La durísima historia del Essex
El barco Essex se hundió tras el ataque del cachalote y la tripulación decidió huir a bordo de tres barcas balleneras. Un mes después consiguieron llegar a una isla. Algunos hombres decidieron quedarse en aquel lugar, mientras que otros partieron de nuevo, no con mucha suerte. Acabaron comiendo los restos de los cadáveres e incluso se llegó a celebrar un sorteo para matar a uno de los marineros.
Les acabaron rescatando, tanto a los que quedaban vivos en aquellas barcas, como a los que habían permanecido en la isla. Solo ocho personas sobrevivieron en total. Su historia se cuenta en la película El corazón del mar, basada en el libro de no ficción de Nathaniel Philbrick, dirigida por Ron Howard y con un reparto liderado por Chris Hemsworth.
Mocha Dick, una ballena de leyenda
Leyenda y realidad se unen en la figura de Mocha Dick, una enorme ballena blanca de Chile. Por una parte, el mito de Tempulcahue en el que creía el pueblo Lafkenche: "cuatro mujeres -machis o brujas- guardianas de las almas de los grandes caciques y guerreros" que llevaban a una isla ahora conocida como Mocha, como explicaba Francisco Ortega, guionista del cómic Mocha Dick. Una de las mujeres, la más vieja, podría convertirse en una ballena blanca.
Más tarde, en el siglo XIX, los avistamientos de balleneros norteamericanos se asemejaban a este mito. "Empezaron a hablar de un gran cachalote macho completamente albino al que avistaban cerca de la isla Mocha al cual apodaron Mocha Dick", asegura Ortega, una historia que recogió Jeremiah Reynolds en la revista neoyorkina Knickerbocker. Herman Melville publicó la novela La ballena en 1951, pero no tuvo éxito. "Cuando este libro aparece resulta un fracaso por lo que los editores le recomiendan cambiar el título a Mocha Dick, ya que el público lector de Boston y NY estaba familiarizado con el relato de Reynolds", dice Francisco Ortega. Melville hizo caso, pero a su manera: Mocha pasó a Moby, una mezcla de esta ballena de leyenda y el nombre de un amigo suyo que había fallecido, Tobias "Toby" Green.