Lavanda: aprende a utilizarla para casi todo
- Su color, su aroma y sus propiedades la convierten en una de las plantas más utilizadas en el hogar.
- Remedios naturales para cuidar la salud
La lavanda es una de las plantas aromáticas más versátiles que existen y su agradable aroma invita a la relajación y el descanso, pero sus verdaderas propiedades van mucho más allá y es una de las hierbas más bonitas y útiles que podemos plantar.
Pero ¿para qué se utiliza la lavanda? ¿Cuál es su verdadero uso? Imposible enumerar sólo una utilidad. Es un básico en los botiquines naturales desde tiempos antiguos, y a día de hoy la podemos encontrar en forma de aceites esenciales o cápsulas que nos van a permitir cuidar nuestra salud y perfumar la casa.
En realidad, existen 39 especies diferentes de planta de lavanda, y es conocida por sus colores suaves, que incluso podemos encontrar variedades en rosa, blanco e incluso verde. Aunque su color por excelencia es ese peculiar azul para unos, morado para otros, que le ha llevado a tener su propia denominación de color Pantone Lavanda, que corresponde exactamente al tono de lavándula angustifolia, que es la más cultivada.
Lavanda en el hogar
Podemos utilizarla de muchas maneras. La más conocida es utilizar unas gotitas de aceite esencial de lavanda mezclado con agua en difusor de aromas para lograr un aroma agradable y fresco. Hay quien utiliza unas gotitas de aceite esencial directamente en la lavadora a la hora de hacer la colada.
Las espigas de esta planta pueden servir para decorar cualquier rincón de la casa, tanto en solitario como acompañadas de otras flores.
También se pueden preparar saquitos para los armarios y cajones. Para ello se debe “desflorar” las flores de lavanda seca y se envuelven en una tela fina que permita salir al olor. Y es un perfecto repelente de insectos igual que la citronela.
Aromatizar ricas recetas de cocina
Igual que su olor es irresistible, el sutil toque de sabor que incorpora en la cocina hace que cada vez sea más utilizada en la cocina. Primero debemos asegurarnos que sea de producción ecológica y no se haya utilizado fungicidas en su cultivo.
Nos puede servir para perfumar bizcochos y magdalenas, que además de su agradable sabor, el resultado será cautivador. Otro refrescante uso es hacer limonada con lavanda. Y cada vez son más los cocineros innovadores que se atreven a incorporarla en sus platos.
La manera de utilizarla es emulsionando unas flores en líquido, agua o leche, y dejar reposar para posteriormente colarlo y poder utilizarlo en la receta.
Remedio perfecto para cuidar la salud
A esta planta se le atribuyen beneficios antiinflamatorios, sedantes, digestivos, antibacteriana, diurética, antiséptica y cicatrizantes. Es decir, vale para casi todo.
Podemos utilizarla para ayudar a tener un mejor descanso o calmar los nervios. También ayuda con la expulsión de gases y facilitar las digestiones, sobre todo si la mezclamos con melisa, hierbaluisa y boldo.
Producto de higiene y cuidado personal
Los romanos ya la utilizaban en sus baños enamorados de su fragancia y de sus propiedades antisépticas. Su propio nombre lavándula es un derivado de lavre que significa lavar. Aplicar unas gotitas en la bañera nos hará disfrutar de un baño muy relajante.
Los jabones de lavanda son muy populares por sus propiedades astringentes para la piel. También se utiliza para fortalecer al cabello aplicando unas gotas en el champú. Además, es un tónico perfecto para limpiar y refrescar la piel del rostro.
Es frecuente también utilizarla para remediar el mal olor de pies por exceso de sudoración… es una planta que sirve para casi todo.
Fuente de inspiración al mundo de la moda, el arte o la literatura
Este apreciado bien morado inspira al mundo de la moda, la belleza, el arte o la literatura. La academia del perfume, defiende la influencia de esta planta aromática en todos los campos creativos. La escritora Espido Freire lo relata con una sensibilidad especial: “Uno de los grandes retos de la literatura, y de todas las artes en realidad, radica en transmitir aquello que vemos o sentimos, a alguien que se encuentra en otro lugar. Esto requiere de la metáfora, de la imagen, de congelar y evocar ese instante. En este caso. Ver un mar morado de lavanda y cómo se ha contrastado con los campos dorados que todavía hacen más intenso su color”.
El Museo del Prado ha realizado una exposición que era buscar los olores que había en un cuadro. Una muestra que ha recordado que históricamente, en el S XVI y XVII había una cultura olfativa mucho más presente en la vida cotidiana de lo que lo está ahora.
La historia nos ha demostrado en más de una ocasión sus innumerables usos. En Inglaterra durante el s. XVI la utilizaban para perfumar la ropa ya que no tenían mucha costumbre de bañarse. También esa muy valorada para protegerse de las chinches. Y cuando la peste negra azotó Londres usaban el aceite de lavanda mezclado con alcohol para mitigar el olor.
Una planta especial que ha convertido el municipio castellano de Brihuega en la Provenza española. Un lugar que ha revolucionado el turismo y la industria de la perfumería en nuestro país abasteciendo de este producto tanto a la industria del perfume en nuestro país, como exportándolo al extranjero desde nuestros campos castellanos… y que es visita obligada para poder disfrutar sus campos teñidos de morado.