Película '1917': la verdad sobre el brutal plano secuencia y más curiosidades, como el 'mechero-gate'
- Sam Mendes dirige a estrellas como Andrew Scott, Benedict Cumberbatch, Colin Firth
- En este enlace puedes ver 1917, ya disponible en RTVE Play
No hace falta mirar la larga lista de premios que obtuvo 1917 para darse cuenta de que se trata de una obra maestra del cine bélico. Tras dirigir dos entregas de la saga James Bond, Sam Mendes se lanzó a su siguiente proyecto, en el que debutó como guionista. Lo hizo con una historia muy personal, ambientada en la Primera Guerra Mundial. Por si fuera poco su argumento, otro aspecto de la película llamó la atención de todo el mundo: 1917 está rodada en plano secuencia. Pero ¿Cómo han conseguido que una cinta de dos horas tan angustiosa como esta sea compatible con este recurso?
El plano secuencia de 1917 tiene cortes
El plano secuencia de la película tiene truco: como ya hizo Alfred Hitchcock en La soga. Sam Mendes y su equipo (con el aclamado Roger Deakins como director de fotografía, quien se llevó su segundo Oscar con este trabajo) optaron por realizar cortes a lo largo de sus dos horas de duración. Estas interrupciones están hábilmente escondidas, dando la apariencia de un plano secuencia en el que, en realidad, el plano más largo dura alrededor de siete minutos, según contó Deakins a The New York Times.
No por ello, sin embargo, resulta una tarea fácil. El rodaje de 1917 requirió de un proceso de preparación muy largo y cuidado, por no hablar de que necesitaban rodar cuando el cielo estuviese nublado para huir del sol y así lograr mantener la continuidad. "Una película es como hacer algo capa a capa. Y esperas accidentes felices: estamos hablando de tomas de 10 minutos, donde creas un entorno en los que lo actores pueden vivir en ese espacio y olvidarse de las cámaras. Y cuando haces tomas tan largas suceden cosas divertidas con la luz, el clima, una línea de diálogo errónea, alguien se cae. Y todo parece más vivo y real", explicó Sam Mendes a RTVE.es con motivo de su estreno. En total, la película tiene 60 escenas distintas, otro dato curioso.
La influencia de Alfred Mendes, abuelo del director
Los soldados Schofield y Blake nunca existieron, pero sí lo hizo Alfred H. Mendes. El abuelo del director de 1917 luchó durante la Primera Guerra Mundial, una experiencia que sirvió a su nieto como inspiración para la película. "La idea se basó libremente en una historia que me contó mi abuelo. La película está dedicada a él", explicó a Deadline Sam Mendes, quien también firma el guion junto a Krysty Wilson-Cairns.
"Era muy joven, pequeño y muy rápido. Se le asignó el trabajo de llevar mensajes en el frente occidental. No entraré en detalles específicos sobre qué cosas en la película fueron influenciadas específicamente por lo que me dijo, pero hay varias", aseguró entonces. Aunque Sam Mendes puntualizó que los protagonistas de 1917 no eran su abuelo, su historia sí está presente en cierto modo: "Pero el espíritu de lo que me dijo y la idea central de un hombre que lleva un mensaje no me dejaba. Simplemente se aferró allí de alguna manera, durante los últimos 50 años".
El 'mechero-gate'
Rodar una película en plano secuencia (o, mejor dicho, en falso plano secuencia) tiene muchas dificultades, y si no que se lo digan al equipo de 1917. Hubo una escena en concreto que dio muchos problemas y todo por culpa de un mechero defectuoso. Sam Mendes se refirió a ello como "mechero-gate" en una entrevista con la BBC. Andrew Scott, que ha arrasado con series como Ripley y Fleabag (en su segunda temporada) y películas como Desconocidos, junto a Paul Mescal, aparece brevemente en 1917, donde tenía que encender un cigarrillo. "Andrew, en su única escena, cometió más errores que nadie", llegó a decir en broma Sam Mendes. Son los problemas del plano secuencia: "Puedes tener siete minutos de magia, y luego, si alguien tropieza, o un encendedor no funciona, o si un actor olvida media línea, significa que no se puede usar nada y tienes que empezar de nuevo".
La carrera más emocionante
Hay una escena impresionante al final de la película en la que, sin entrar en spoilers, se puede ver a George MacKay correr por el campo de batalla, chocándose con varios soldados. Estos tropiezos no estaban previstos en el guion, pero acabaron en el corte final. Según explicaron en The New York Times el director y el protagonista, la toma que se puede ver es la segunda que rodaron. Aunque el actor se chocó dos de los 500 extras que participaban en la escena, él siguió corriendo.
Doble conexión con Juego de Tronos
Puede que la cara del soldado Blake, protagonista de 1917, te resulte similar. Se trata de Dean-Charles Chapman, que así por nombre no dice mucho, pero la cosa cambia si le llamamos por el que tuvo en Juego de tronos: Tommen Baratheon. Porque sí, el protagonista de 1917 fue durante varias temporadas el Rey de los Siete Reinos. Por si fuera poco, en 1917 también participa otro 'monarca' de la serie: Robb Stark, el Rey en el Norte… Es decir, Richard Madden. No es uno de los personajes principales, lo mismo que les ocurre a Colin Firth, Benedict Cumberbatch o Mark Strong. Esa responsabilidad recae sobre Dean-Charles Chapman y George MacKay.
La película 1917 ganó el Batfa y el Globo de Oro, pero el Oscar se le escapó y fue para Parásitos. La película de Sam Mendes entra ya al catálogo de RTVE Play, al que llegan nuevos títulos como Emma, Inconscientes, La flaqueza del bolchevique, Malas temporadas, Entre la vida y la muerte, En solitario, La familia Bélier...