Un viaje en compañía de vampiros legendarios, literarios y cinematográficos

• Este año coinciden varias efemérides vampíricas: los 125 años de la novela Drácula, de Bram Stoker, el centenario de la película de Murnau Nosferatu. Una sinfonía del horror y las tres décadas de Drácula de Bram Stoker de Ford Coppola
• Recorremos los escenarios de leyendas, libros y películas protagonizados por estos seres de la noche

Castillo de Bran, en Brasov, Rumania.

Se celebra Halloween, así que en El gallo que no cesa hemos viajado siguiendo las huellas de los vampiros, esos seres retornados que se alimentan de la sangre o de la energía de los vivos y que protagonizan películas, libros, leyendas e incluso obras de arte y en nuestro caso viajes.

Además, este año coinciden varias efemérides vampíricas: los 125 años de la novela Drácula, de Bram Stoker, el centenario de la película de Murnau Nosferatu. Una sinfonía del horror y las tres décadas de la película Drácula de Bram Stoker de Francis Ford Coppola.

El gallo que no cesa - Tierra sin límites: Viajes terroríficos en busca de vampiros - Escuchar ahora

En busca del origen del vampiro

El mito del vampiro comienza siglos y siglos atrás y tiene muchas dimensiones. Javier Arries, autor de libros como Vampiros, bestiario de ultratumba y Espíritus y seres de la mitología nórdica, indaga en su origen y afirma que “el mito del personaje que vuelve es universal y muy antiguo, no hay origen concreto”.

La ciencia y la medicina han buceado también en la creación del mito y Claudia López Frías, profesora de la Universidad Complutense de Madrid y autora de la tesis La evolución del arquetipo del vampiro a través de las principales figuras cinematográficas y su correlación con ciertos cambios sociales especifica que “la porfiria es una de las enfermedades que puede estar asociada al vampirismo y también la rabia”.

Y otro de los elementos que está en la semilla de los vampiros es el miedo, “miedo a otras personas que no sean conocidas, a otras culturas”, añade López Frías.

El caso es que por todo el mundo y en diferentes épocas han aparecido leyendas que hablan de estos seres retornados. El libro de Javier Arries está lleno de mujeres y hombres que vuelven del otro lado para ejemplificar el mal, entre ellos Lamashtu, en la Antigua Mesopotamia, “una especie de diosa demonio que se dedicaba a engañar a las madres que habían tenido hijos, a decir que ella había perdido a los suyos; las madres se los dejaban por compasión, por piedad y Lamashtu lo que hacía era huir con el niño para devorar su sangre”, explica el escritor.

Un poco más al este, en China, los Jiang Si son los encargados de sembrar el terror, “estos no chupan sangre, sino lo que hacen es robarte el aliento vital”.

Desde Europa, la tradición saltó a América. En Rhode Island existen varias tumbas de personas que vivieron en el siglo XIX y que fueron confundidas con vampiros, “generalmente jóvenes que morían de tuberculosis o alguna enfermedad respiratoria, se les achacaba luego la muerte de sus parientes más cercanos que iban cayendo por la epidemia, se quemaba su corazón y se daban sus cenizas a beber a los enfermos”, explica Arries.

El 125 aniversario de Drácula de Bram Stoker

Cruzamos de nuevo el Atlántico. En el siglo XIX, Bram Stoker escribió Drácula, uno de los libros góticos de vampiros más famosos. Se celebran 125 años de su publicación y si viajamos a Dublín, podemos hacer una ruta por los lugares que fueron importantes en la vida y en la obra del escritor. Cecilia Ferrari, guía nacional de Turismo de Irlanda, enumera algunas de estas localizaciones: “Nació en las afueras de Dublín y luego estudió en Trinity College y trabajó en el castillo de Dublín”.

Castillo de Dublín.

Castillo de Dublín. GETTY

Para escribir Drácula, Stroker bebe de su ciudad, del contexto social de su época, de los cuentos que le leía su madre de pequeño, de otros libros sobre vampiros, de leyendas… y también, aunque nunca viajó a Rumanía, encuentra la inspiración en Transilvania.

El castillo de Bran se asocia con el castillo de Drácula, un monumento que describe Alexandru Priscu, su responsable de marketing: “Es una fortaleza militar del siglo XIV construida sobre una roca. Fue una construcción defensiva durante al menos 500 años que servía durante la Edad Media para controlar la frontera entre Transilvania y Valaquia. Hace un siglo más o menos, su destino cambió; fue donado a la familia real de Rumanía, a la reina María, que lo convirtió en residencia de verano”.

Antes del cambio se parecía más a ese castillo que inspiró a Bram Stoker. "Stoker tuvo acceso a algunos bocetos del castillo y a una descripción muy detallada que le hizo un diplomático del Reino Unido asignado a Europa del Este. Le gustó su imagen y lo eligió como el hogar del vampiro, por eso a nuestros visitantes les decimos que están en el lugar correcto”.

Y hay más conexiones entre Drácula y Rumanía, también por el personaje. "Stoker dijo que Drácula era un conde de Transilvania y la gente lo asocia con Vlad El Empalador, un personaje histórico muy cruel que vivió en el siglo XV. Las conexiones entre Vlad y el castillo son escasas. Tan solo pasó unas cuantas noches en su interior como prisionero”.

Los vampiros en el cine y los escenarios de las películas

El Drácula de Bram Stoker ha inspirado a su vez muchas películas, la primera, hace cien años, fue Nosferatu. Una sinfonía del horror, de Murnau. Claudia López Frías habla del contexto: “Es una especie de adaptación de Drácula (...). Simplemente se decidió cambiar los nombres de los protagonistas y así pensaron, erróneamente, que se iban a ahorrar los derechos de autor”.

Gran parte de las localizaciones que se utilizaron se destruyeron durante la Segunda Guerra Mundial, pero otras se pueden visitar, por ejemplo el castillo del Conde Orlok, en Eslovaquia, o algunos lugares de la ciudad alemana de Lübeck. “Hay partes, calles y edificios, que están exactamente igual, por ejemplo los depósitos de sal de la ciudad, de estilo gótico báltico”.

Castillo de Orava, Eslovaquia.

Castillo de Orava, Eslovaquia. GETTY

Más allá de los escenarios, esta película expresionista es muy interesante si se analiza en su contexto. ”Nosferatu está en un periodo de entreguerras avisando de 'ojo viene una peste a Europa' justo antes de la llegada del nazismo”.

Los vampiros del cine han cambiado mucho en el último siglo. Es otro de los temas que trata Claudia en su tesis, la evolución del arquetipo en el séptimo arte. No hay más que ver las diferencias entre Nosferatu y los protagonistas de Crepúsculo. La saga también nos ofrece escenarios icónicos, muy atractivos para los viajeros “El pueblo donde vive la protagonista, Forks, es un pueblo real que se llama Vernonia y ha habido multitud de turistas que han ido”.

Algunos pueblos españoles también han servido en ocasiones de escenario para las películas de vampiros, por ejemplo Patones de Arriba, "donde está grabada Orgía nocturna de los vampiros".

Y otra película, en este caso protagonizada por mujeres, utiliza las playas del Mediterráneo: Vampiras lesbos, de Jesús Franco, una producción germano-española que se considera de culto. ”Es la misma historia que Drácula pero hecha con mujeres (...) Está grabada en España, en Alicante, en la Manga del mar Menor”, explica López.

Desde España al mundo, en todas partes encontramos estás figuras que han causado terror y fascinación a lo largo de la historia y sus escenarios.