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Desmontando los falsos mitos sobre el alcohol

  • El 15 de noviembre se celebra el Día Mundial sin Alcohol para concienciar a la población del daño que produce su consumo
  • Según la OMS, tres millones de personas fallecen debido al consumo de alcohol

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El 15 de noviembre se celebra el Día mundial sin alcohol
El 15 de noviembre se celebra el Día mundial sin alcohol

Cada año se producen un total de tres millones de muertes en el mundo debido al consumo de alcohol. Ante esta situación, la Organización Mundial de la Salud decidió implantar el 15 de noviembre el Día Mundial sin Alcohol, una efeméride que tiene como objetivo sensibilizar a la población del daño físico y psicológico que genera el consumo de esta sustancia nociva. Además de concienciar en la necesidad de implantar medidas para reducir su ingesta.

El alcohol quita el frío, ¿mito o realidad?

Tras la ingesta del alcohol se produce una momentánea sensación de calor, por lo que la gente tiene la convicción de con su consumo se consigue combatir el frío. Sin embargo, es falso. “La realidad de esta sensación es un efecto fugaz causado por un aumento de la circulación de la sangre por la piel. Pero este incremento de la circulación desaparece cuando cesa la dilatación de los vasos sanguíneos”. Por lo que la realidad es distinta, se produce una pérdida de temperatura.

A esta fugaz y falsa sensación de calor, hay que añadirle otro efecto peligroso. “Los estados de ebriedad provocan depresión del psiquismo, lo que termina propiciando una tendencia al sueño en determinadas situaciones. Esta circunstancia contribuye a prolongar la exposición al frío y eso ocasiona consecuencias nefastas”.

Su consumo no te hace más sociable

Se tiene la concepción de que el alcohol es un estimulante cuando en realidad es “un depresor del sistema nervioso”. Un error sustentado en que tras su ingesta se pierde la vergüenza y se habla con menos timidez, parece que alivia los miedos y permite realizar cosas que en un estado de sobriedad. “Lo que está ocurriendo es que se deprime la capacidad de autocontrol y con menos autocontrol emergen aquellas cosas que a veces no es recomendable exteriorizar de forma inadecuada. La persona no está más estimulada, sino menos autocontrolada”.

Es importante ir al baño para eliminar el alcohol, ¿Verdadero o falso?

Esto es falso. ¿Por qué? “Solo un 5% del alcohol se elimina por la orina, por el sudor y por el aliento. Entonces, por mucho que vayamos al baño, sigue estando el trabajo en el hígado no en los riñones”. El alcohol aumenta la diuresis, esto da respuesta al por qué aumenta las ganas de ir al baño cuando se ingesta esta sustancia. Sin embargo, no eliminamos alcohol expulsamos agua.

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Beber no calma el dolor crónico

Las personas que padecen dolor crónico en ocasiones utilizan el alcohol para ayudarse a manejar el dolor. Sin embargo, existen muchas razones por la que esta no es una buena solución para combatir la molestia. “Primero el alcohol y los analgésicos no se deben de mezclar, porque beber mientras está tomando analgésicos podría aumentar el riesgo de presentar problemas hepáticos, sangrados de estómago u otros problemas. Y hacerlo, pues, incrementa el riesgo de problemas con el alcohol”.

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Asimismo, su consumo genera una dependencia, pues las personas necesitan beber más que una cantidad moderada para aliviar ese dolor. “Por otra parte, el consumo crónico de alcohol puede aumentar el dolor. Y si se tiene síntomas del síndrome de abstinencia del alcohol, pues puede ser más sensible a ese dolor”.

¿Qué ocurre si mezclas diferentes tipos de alcohol?

La gente tiene la certeza de que mezclar distintos tipos de alcohol provoca que este te afecte más. Sin embargo, no es así, lo que realmente afecta es la cantidad total consumida. “Siempre que el alcohol sea lógicamente de calidad, no hay diferencia entre tomar diferentes bebidas. Lo que sí es cierto es que, si metemos cinco o seis cosas diferentes en el estómago, sobre todo si es mucha cantidad, eso nos puede sentar mal. Pero lo que sienta, lo que sienta mal específicamente es el alcohol. Y esto da igual que venga en una bebida o en otra porque las moléculas de alcohol es la misma”. Por lo que la moderación es fundamental para disfrutar de este tipo de bebidas.