Vicky Luengo, el "desatado" y salvaje baile que le puede valer un Goya
- La película aborda la complicada historia de una pareja que abandona la ciudad para irse a vivir al campo
- La ópera prima de Mikel Gurrea cuenta con dos nominaciones en los Premios Goya 2023
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Suro (2022) es el primer largometraje de Mikel Gurrea que opta a dos galardones en los Premios Goya 2023. La cinta narra la historia de Helena e Iván, una pareja que abandona la gran ciudad para construir una nueva vida en los bosques de alcornoques tras heredar una finca familiar. Sin embargo, el idílico plan acaba enfrentando a ambos. En un contexto rural y machista, los roles de su relación cambia y los sumerge en una fuerte crisis. “En la película hay muchísima micropolítica. Es decir, una pareja se ve afectada por decisiones u opiniones micropolíticas que tienen que ver con el racismo y con la conciencia de clases. Me parece un guion superinteresante”, subraba Vicky Luengo en en Radio Nacional.
En palabras de Vicky Luengo, la película se podría definir como “un thriller rural, porque a ratos la película tiene muchísima tensión y te mantiene agarrado a una especie de thriller. También podría ser un western por algunos planos finales. Pero, tiene una mezcla entre diferentes géneros”.
Las historias urbanas ya no están de moda
“Hemos pasado de las historias urbanas que empezaban a estar muy vistas a buscar esa mirada que responde a la nueva realidad que yo creo que toda la sociedad está echando hacia los orígenes”, subrayaba Carlos Santos en A media mañana. Alcarràs, película que representará a España en la 95 edición de los Premios Oscar y ganadora del Oso de Oro en el Festival de Berlín y As bestas, cinta que lidera las nominaciones de los Premios Feroz son un claro ejemplo de esta nueva línea que están siguiendo los directores españoles.
Vicky Luengo asegura que está nueva tendencia que están adoptando los cineastas de trasladar sus historias al campo existe algo de casualidad. “Carla Simón seguramente lleva mucho antes de la pandemia con Alcarràs, Miguel llevaba siete años con Suro e Isabel Peña llevaban cinco o seis años con A bestas”, destaca la actriz. Asimismo, asegura que la idea de trasladar el campo a la gran pantalla surge por “querer volver al origen”.
El proceso de producción de una película puede durar entre tres y seis meses e incluso puede dilatarse más en el tiempo si se trata de una superproducción. Sin embargo, Suro se rodó en 24 días. Durante este breve período de los meses centrales del verano, donde afirma que pasaron mucho calor, un grupo de desconocidos se encerraron en una casa rural y formaron una familia. “De repente no conoces a nadie y tienes que pasar allí como 30 días juntos. Fue gracioso”, destaca la mallorquina.
Un baile magnético y salvaje
Una de las escenas más potentes de la película sucede al final de la trama. Un baile en el que Luengo atrapa todas las miradas y con el que el director parace cerrar una especie de circulo, ya que la cinta también comienza con otro baile. Pero, mientras en las primeras secuencias la escena contó con una coreografía bien planeada por el director, en la escena final de la película Gurrea quiso darle total libertad a la actriz, a la que solo puso una condición: "tu personaje no baila queriendo poner celoso a su pareja". El resultado es una danza magnética y salvaje en la que Vicky Luengo parece romperse y empoderarse al mismo tiempo. Una actuación que bien merece un premio Goya.
Vicky Luengo y Pol López juntos por primera vez en la gran pantalla
El film se sostiene sobre estos dos pilares que son ellos dando vida a esa pareja que tiene que resolver esas redecillas que surgen con el paso del tiempo. “Intentamos trabajar muchísimo todo lo que no se dice en la película. Es decir, los conflictos y lo que hay en una pareja, casi siempre en la vida, que es lo no dicho”, resalta la actriz. Pol López acompaña a Vicky Luengo, con quien ya compartió set de rodaje en el Sustito, pero no habían tenido secuencias en común. La actriz tenía una espina clavada por no haber compartido escena con él, porque es un “actor que siempre le había encantado", por eso cuando le comunicaron que iba a trabajar con él fue toda una alegría. “Fue genial. Además, nos entendimos muy bien y ahora queremos hacer una obra de teatro juntos”, afirma la artista.