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¿Por qué Liam Neeson tiene la nariz torcida? 9 cosas que no sabías del actor de 'Venganza'

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Imagen de Liam Neeson, protagonista de la película 'Venganza'
Liam Neeson, protagonista de la película 'Venganza'

Le hemos visto millones de veces en la gran pantalla, conocemos algunas de sus míticas películas al dedillo. Liam Neeson es uno de los actores más populares en Hollywood por su extensa y prolífera carrera cinematográfica. Protagonista de Venganza, Love Actually Chloe, no hay género que se le resista, aunque el papel de héroe de acción es el que más ha explotado. Sin embargo, ¿cuánto sabemos acerca de su vida fuera de cámaras? Te contamos 9 cosas que no sabías acerca de la estrella de Hollywood.

1. ¿Por qué tiene la nariz torcida?

Antes de adentrarse en el mundo de la interpretación, Liam Neeson probó suerte con el boxeo, un deporte que le gustó y se le daba muy bien. Llegó incluso a competir, fue tres veces campeón juvenil de Irlanda del Norte y dos veces subcampeón. Sin embargo, una conmoción cerebral durante un combate le hizo colgar los guantes. Fue entonces cuando decidió que el boxeo no era lo suyo. Para el recuerdo, le quedó esa nariz torcida.

2. Su esposa murió a los 45 años

Liam Neeson se casó con la actriz británica Natasha Richardson en 1994, con quien tuvo dos hijos. Estaba muy enamorados, pero en 2009 un tráfico accidente acabó con la vida de Natasha a los 45 años. Se encontraba de vacaciones en Canadá, en Mont-Tremblant,  esquiando en una pista para principiantes acompañada por un instructor. La actriz se cayó y se golpeó la cabeza, aunque no le dio importancia. Él estaba rodando en Toronto, a unos 600 km de allí. Su estado de salud empezó a empeorar y la llevaron al hospital en Montreal. Liam Neeson viajó a su lado, pero ya no se podía hacer nada. Natasha Richardson estaba en muerte cerebral. De acuerdo con su pacto, el actor firmó los papeles para que la desconectaran y así donar sus órganos.

Liam Neeson y Natasha Richardson

Liam Neeson y su mujer, Natasha Richardson GTRES

3. Depresión y alcoholismo

La inesperada muerte de su esposa Natasha Richardson fue un duro golpe para Liam Neeson, que acabó volviéndose alcohólico en medio de una depresión que le duró años. Sus dos hijos, Micheál y Daniel, fueron su salvavidas. Gracias a ellos el actor logró recuperarse.

4. No quiso ser James Bond

El nombre de Liam Neeson sonó con fuerza en la década de los 90 como posible candidato a meterse en el papel de James Bond. Una gran oportunidad con la que muchos actores sueñan en Hollywood. Sin embargo, el actor acabó descartando la idea, todo por su mujer. "Mi querida esposa me dijo, cuando estábamos haciendo una película juntos en Carolina del Sur: 'Cariño, si te ofrecen James Bond y decides interpretarlo, no te vas a casar conmigo'. Cada vez que teníamos discusiones, me acercaba a ella y cantaba el tema de Bond", contaba el propio Liam Neeson en una entrevista para el programa The Late Late Show with James Corden. Finalmente, el elegido fue Pierce Brosnan.

5. El accidente en moto que casi le cuesta la vida

En el año 2000 Liam Neeson sufrió un accidente cuando viajaba con su moto. El actor se cruzó con un ciervo y casi pierde la vida. Los médicos pensaron en la posibilidad de que se quedara en silla de ruedas. Afortunadamente, solo se rompió la pelvis y, a pesar de la gravedad de las heridas, logró salir con vida.

6. Sufre acrofobia

Aunque parezca mentira viendo cómo se defiende en las películas de acción en las que participa, Liam Neeson sufre acrofobia, es decir, miedo incontrolable a las alturas. Al actor le aterra hasta la ida de subirse encima de una silla para cambiar una bombilla. ¿Quién lo diría?

Días de Cine: La memoria de un asesino.

7. Anthony Hopkins, su ídolo

Anthony Hopkins es uno de los referentes de Liam Neeson. El actor lo idolatra hasta el punto de regalarle un papel. Neeson era uno de los candidatos a optar al papel de Van Helsing en la película Drácula, de Bram Stoker. Al enterarse de que Anthony Hopkins también estaba entre los actores finalistas, decidió retirarse de la competición y cederle el personaje.