Cinco curiosidades sobre los dulces que quizás no conocías

• Los gatos no tienen la capacidad de percibir el sabor dulce
• El azúcar modifica el sistema de recompensa de nuestro cerebro
• Ya puedes ver el programa de 'Órbita Laika': Golosos en La 2

Órbita Laika - T8 - Programa 11: Golosos

¿Por qué algunas personas tienen mayor predilección por el dulce que otras? ¿Qué fenómenos hacen posible la fabricación del algodón de azúcar o el chocolate? El mundo de los dulces esconde tras de sí mucha más ciencia de la que puedes pensar. Esta noche, ‘Órbita Laika’ dedica su penúltimo programa de la temporada a su público más goloso. Para ir abriendo boca, te contamos cinco curiosidades sobre el azúcar y los dulces. ¡Bon appétit!

De la gastrofísica al olor del chocolate

1. El azúcar modifica el sistema de recompensa de nuestro cerebro, favoreciendo la liberación de dopamina. Este neurotransmisor está asociado a la sensación de placer y bienestar, pero también cumple otras funciones vitales para el organismo, como intervenir en la actividad motora, el sueño y la memoria.

2. Existen muchos factores implicados en nuestra inclinación por el dulce, e incluso en nuestra percepción de los sabores. El término “gastrofísica”, acuñado por el catedrático de Psicología Experimental de la Universidad de Oxford Charles Spence, hace referencia al estudio científico de los factores que influyen en nuestra experiencia al saborear comida y bebida.

3. La vista y el oído no son los únicos sentidos que se deterioran con el paso de los años: también lo hace el gusto. Esto obedece, en gran medida, a la disminución de las papilas gustativas. Aunque también se debe a otros motivos, como una menor producción de saliva, o la pérdida del olfato.

4. Los gatos no tienen la capacidad de percibir el sabor dulce. Esto se debe a una mutación genética que inhabilita los receptores dulces de sus papilas gustativas. Los gatos carecen de unos aminoácidos esenciales en una de las dos proteínas que conforman estos receptores, impidiendo que puedan detectar el azúcar.

5. El consumo de chocolate podría actuar como analgésico natural, dado que activa una parte del cerebro que alivia el dolor, según un estudio de la Universidad de Chicago realizado sobre ratas. Además, el olor del chocolate produce un aumento de las ondas cerebrales theta, que inducen a la relajación.

Si quieres saber más sobre la ciencia de los dulces, ¡no te pierdas el programa que le dedica 'Órbita Laika' en RTVE Play!