¿Sabías que los tiburones tienen un "GPS" integrado?
- Algunos residen en zonas donde todavía no ha podido acceder el hombre
- Si un tiburón deja de nadar o moverse se asfixia, ¿por qué sucede?
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Según nos han explicado en Ahora o Nunca, el magacín presentado por Mónica López, un estudio de la Universidad del Estado de Florida ha descubierto que los tiburones utilizan el campo magnético terrestre para orientarse en el océano. Podríamos decir que, como los coches o los móviles, tienen un GPS integrado para saber siempre la dirección que seguir.
Esta capacidad que tienen algunos seres vivos de detectar la dirección y el sentido del campo magnético se conoce con el nombre de magnetorrecepción. En este caso, la Tierra funciona como un gigantesco imán y los tiburones sienten esas corrientes magnéticas que van del polo sur magnético al polo norte magnético. Les sirve para saber dónde están del planeta y también las usan para seguir rumbos fijos, cómo si tuvieran una brújula.
¿Por qué tienen desarrollada esta capacidad? Como explica la presentadora, los tiburones son muy fieles a su lugar de nacimiento y a lo largo de su vida regresan en varias veces a lugares concretos de cría o alimentación, además, sus hábitats pueden abarcar miles de kilómetros, sin contar que es uno de los animales que realiza las migraciones más largas.
Algunos tiburones residen en lugares a los que nunca ha podido acceder el ser humano
En este contexto, el tiburón ballena es una de las criaturas que más viaja, el récord son 20.142km (registrado en 2011) que recorrió una hembra (se llamaba Anne) durante 841 días. Por otro lado, los marrajos comunes alcanzan velocidades punta de más de 120 km/h, lo que les sitúa en el podio de los animales más rápidos del océano (pueden acelerar más rápido que un Porsche) y pueden nadar a una profundidad de hasta 900m. Por todo ello son animales privilegiados, ya que incluso algunos de estos escualos viven en zonas a las que los humanos aún no han podido acceder.
Si un tiburón deja de nadar se asfixia
Como explican en el espacio de La 1 de RTVE, los tiburones no pueden dejar de nadar porque se asfixian. Su mecanismo de respiración los obliga a estar en continuo movimiento para que el oxígeno del agua entre por sus branquias. Además, no tienen vejiga natatoria (una bolsa de paredes flexibles llena de gas que usan muchos peces para flotar), por ello si se quedan quietos se hunden.