Para los amantes del chocolate esta tarta de tres chocolates es oro puro. Por su pinta y forma puede parecer difícil de elaborar, pero tranquilo, porque en Ahora o Nunca hemos descubierto una receta para todos los públicos: buena, bonita y ¡deliciosa!
Esta tarta, perteneciente a ese grupo de tartas frías y sin horno, destaca por su cremosidad, su sabor y su suavidad, por eso es todo un clásico de la repostería. Este postre de origen italiano, se popularizó internacionalmente a finales del siglo XIX y, aunque se desconoce el autor, debemos darle las gracias por su gran idea de sobreponer los chocolates uno a uno según su grado de intensidad. ¿Resultado? Explosión de sabor.
Así se prepara la tarta de 3 chocolates
Tarta de tres chocolates Tarta de tres chocolates
postres
Ingredientes
Preparación
Chocolate negro 72%
Chocolate con leche
Chocolate blanco
Galletas (sin gluten para los celiacos)
Mantequilla
Cuajada
Nata para montar
Leche
Cacao en polvo
Azúcar
Primero hacemos la base de galleta con mantequilla. Para ello, picamos las galletas, derretimos la mantequilla y lo juntamos todo bien para hacer una base compacta para la tarta.
Ponemos un molde circular (sin base) sobre un papel vegetal o antiadherente y metemos la mezcla de galletas que vamos aplastando con ayuda de una cuchara para cubrir todo el molde.
Una vez lista nuestra base toca empezar con el chocolate. La primera capa será de chocolate negro 72%. Para derretirlo ponemos una olla al fuego, ponemos leche a calentar, incorporamos el chocolate, una cucharada de cacao en polvo para potenciar más el sabor, la cuajada, el chocolate 72% y la nata para montar. Removemos todo bien hasta que se derrita y lo echamos sobre la base de galleta.
Vamos con la segunda capa, la de chocolate con leche. Los pasos son los mismos que la anterior, pero tenemos que esperar hasta que la primera capa cuaje (esto es muy importante para que queden bien diferenciadas las capas y no se mezclen). Un pequeño truco es pasar un palillo de madera entre capa y capa haciendo pequeñas líneas o caminos, así nos aseguramos que las capas queden compactas.
Y por último toca incorporar la capa de chocolate blanco, el último piso. La mezcla se hace como las capas anteriores.
Dejamos enfriar nuestra tarta (mínimo 6 horas en la nevera) y como colofón se puede rallar chocolate negro por encima.