Humor, crítica e ingenio: una exposición en Barcelona reúne a jóvenes autoras de cómic
Constelación gráfica, en el CCCB hasta el próximo 14 de mayo, presenta a nueve autoras que rompen los esquemas del cómic tradicional
- Página Dos charla con dos de las artistas de la exposición, Nadia Hafid y Roberta Vázquez
- La muestra, comisariada por la editora Montserrat Terrones, apuesta por exponer el cómic de un modo innovador y participativo
Si hace unas décadas se logró por fin que los críticos, el público y los medios se tomaran la novela gráfica en serio, el próximo paso es reivindicar nuevos lenguajes y estilos. Ese es el objetivo de Constelación gráfica, una muestra del Centre de Cultura Contemporània de Barcelona, comisariada por la editora Montserrat Terrones, que podrá visitarse hasta el próximo 14 de mayo. Jordi Costa, director de exposiciones del centro: «Estas autoras tienen en común su comienzo en la autoedición, su fidelidad al formato fanzine y una voz narrativa única.»
En el CCCB podemos ver el trabajo de nueve artistas: Bárbara Alca, Marta Cartu, Genie Espinosa, Ana Galvañ, Conxita Herrero, María Medem, Miriampersand, Nadia Hafid y Roberta Vázquez. Estas dos últimas se citaron con el equipo de Página Dos para hablar de este oficio tan adictivo como desesperante. Sus obras, como las de sus compañeras, hablan de la realidad milenial, la precariedad, la desaparición de la estabilidad, la relación con la tecnología, la sororidad o las relaciones en Internet.
Esas nueve autoras experimentan con estilos y lenguajes, rompen los esquemas del cómic y comparten una mirada crítica y cargada de humor hacia el mundo. Tienen homónimas en otros países: Marjane Satrapi, Alison Bechdel, Rutu Modan, Dori Seda, Mariko Tamaki, Zeina Abirached, Aline Kominsky-Crumb o Aisha Franz abrieron el camino a una profesión complicada, inestable e incomprendida. Cada una de ellas, a través de la experimentación estilística y narrativa, ha puesto en cuestión formas canónicas del cómic.
Constelación gráfica también da a conocer pequeñas editoriales, imprentas y demás tentáculos de la autoedición, además de otros soportes artísticos como la cerámica, los tapices, las instalaciones y las animaciones. El espacio La comiquera es un lugar de acceso libre donde los visitantes pueden dibujar, participar en talleres con las autoras de la muestra, consultar libros y fanzines, jugar en familia o hacer un descanso antes de seguir con la visita.