El 9 de marzo de 2001, hace 22 años, se suspendía la mili
- El servicio militar obligatorio desapareció en España tras más de dos siglos de existencia
- Los atentados del 11 de septiembre, protagonistas de aquel año
- Phoolan Devi, un personaje controvertido y polémico, falleció en 2001
Durante décadas, la mili, como se conocía popularmente al servicio militar obligatorio en España, tocaba puntualmente a la puerta de las familias con hijos varones. Miles de hombres jóvenes eran llamados a filas para pasar unos meses fuera de su pueblo, su ciudad o su provincia, hacer la instrucción en el CIR correspondiente y después, dirigirse al destino en el que pasarían los meses estipulados para servir a la patria.
Según la Ley Orgánica 13/1991 de 20 de diciembre, la mili era una manera de “asegurar la operatividad de los ejércitos (...) y prestar un servicio de solidaridad al conjunto de la sociedad”, y es cierto que cumplir el servicio militar facilitaba cierta formación a quien no la tenía, e incluso, proporcionaba las destrezas básicas de un oficio. Sin embargo, muchos consideraban la mili como una pérdida de tiempo, culpable de suspender temporalmente estudios, profesiones, responsabilidades familiares y relaciones de pareja.
El 9 de marzo de 2001, hace ahora 22 años, el gobierno de Aznar anunció el final de la mili. Al menos, tal y como se conocía hasta entonces, porque el servicio militar no se suprimía, simplemente se suspendía, dando paso a un ejército profesionalizado y de ingreso voluntario. Es decir, cumplir con la patria se convertía desde esa fecha en una forma de vida libremente elegida y no en el ‘rito de paso’ que había sido hasta entonces. Por ello, para celebrar este aniversario, contamos con la presencia de Melquíades Prieto, profesor de literatura y autor del libro “Yo hice la mili. De peluso a bisabuelo”, editado por Edaf.
Con él, recordamos detalles y anécdotas que están en la memoria de todos, como el ajuar militar, las novatadas, la jura de bandera, las rutinas diarias, los permisos, la disciplina de los arrestos o la llegada al cuartel. A este respecto, Melquíades bromea recordando que “los primeros momentos eran duros, porque no conocías quién te había tocado al lado. Todo iba por apellidos y podías coincidir con alguien de una provincia lejana a la tuya, que tenía otro acento. Que, incluso, te miraba raro”.
Melquíades, que en su día ejerció de sargento, accedió a la mili a través de la IMEC, la alternativa que permitía compaginar la mili con los estudios universitarios, en unos años determinantes para nuestro país. Su paso por el servicio militar se alargó hasta los veintidós meses, y recuerda: “me licencié el mismo Sábado Santo Rojo en que el PCE fue legalizado. Y eso que dos meses antes de hacer las prácticas, todavía estaba Franco”.
Preguntado por la posibilidad de reactivar el servicio militar obligatorio, un debate abierto en algunos países europeos dado el clima bélico actual, Melquíades Prieto, considera que en caso de reinstaurar la mili, “desde una perspectiva estrictamente militar, quizá interesaría proporcionar una instrucción muy básica, de apenas unos pocos meses. Pero no más”.
En definitiva, en esta edición de Memoria de Delfín rememoramos una fuente inagotable de ‘batallitas’, que también ha tenido amplio reflejo en la literatura, la ficción y el cómic y que supuso el tránsito hacia la madurez para muchas generaciones de españoles.
Pero 2001 es un año especialmente recordado por el terrible atentado contra las Torres Gemelas. Con Mara Peterssen recordamos el drama y la tensión que supuso aquel excepcional ataque y además, recorremos los hechos más destacados de ese año, como la respectiva llegada al poder de George W. Bush, Tony Blair y Ariel Sharon. Ese año nos dejaron el beatle George Harrison, Miguel Gila y Paco Rabal; y la película “Los otros”, de Alejandro Amenábar, obtuvo ocho premios Goya. Además, 2001 fue el año del Caso Gescartera, un escándalo financiero responsable de la desaparición de 20.000 millones de pesetas.
El mismo año que dijimos adiós a la mili, Emilio Botín se convirtió en administrador único del Banco Santander Central Hispano. Lucía Sancho repasa la vida personal y profesional del cántabro que revolucionó la banca española con sus políticas de alta competitividad y sus fusiones y adquisiciones nacionales e internacionales. Botín, miembro de una estirpe de banqueros, es también recordado por su mecenazgo y por el impulso cultural que dio a su tierra, Cantabria.
Con Marta Belenguer revisitamos una película a medio camino entre el documental, la telerrealidad y la ficción más cómica y surrealista: “El Gran Marciano”. Aquel año 2001, el director Antonio Hernández rodó un supuesto engaño para los concursantes de la primera edición de Gran Hermano, que después fue exhibido en salas de cine, aprovechando el tirón del famoso programa. Nuestra colaboradora, que participó en el experimento, nos relata su experiencia y repasa con nosotros la filmografía del director.
La ‘historia mínima’ de David Zurdo esta semana tiene nombre de mujer: Phoolan Devi. Un personaje controvertido y polémico cuya existencia estuvo plagada de malos tratos, huidas y acusaciones delictivas. Casada a los 11 años con un hombre que le triplicaba la edad y maltrataba, pasó de ser la víctima a convertirse en verdugo al acabar años después con la vida de su marido. Se erigió en defensora de las castas bajas y llegó a ser considerada la reencarnación de la diosa Kali, símbolo de la destrucción, la guerra y la muerte. Murió asesinada en 2001.
Ese mismo año, la menor de los hermanos Jackson, Janet Jackson, rompió récords con su canción “All for you”. Aún no se había puesto a la venta cuando obtuvo la consideración de mejor debut radiofónico de la historia de un single en las emisoras americanas. Además, aquel 2001 la artista se mantuvo en el TOP 1 de la lista Billboard durante siete semanas consecutivas. La historia de aquella canción y de su intérprete nos la relata en detalle JPelirrojo.