Ana Obregón vuelve a ser madre, ahora por gestación por sustitución: esta es su nueva hija
- Su hijo Aless murió en mayo de 2020, y ahora ella es madre de una niña a la que ha llamado Ana
- La noticia de su nueva maternidad está revolucionando las redes sociales: este es el motivo
- Las claves de la gestación subrogada: ¿qué es? ¿Cómo está regulada en España?
"Esta semana en exclusiva en ¡HOLA!: Ana Obregón, madre de una niña por gestación subrogada en Miami. Sus emocionantes imágenes de la felicidad al salir del hospital con su bebé". Con estas palabras la revista ¡HOLA! se marca un tanto, por dos motivos: tiene la exclusiva del año y devuelve a Ana Obregón a la actualidad. La presentadora y actriz es uno de los rostros más populares y queridos de la televisión y la prensa social, por eso sus dramas personales han impactado tanto entre sus fans y seguidores: primero la muerte de su hijo Aless, luego la muerte de su madre y después la muerte de su padre.
¿Por qué ha querido volver a ser madre?
Ana, de cara a la galería, parecía que no levantaba cabeza, pero... ha estado planeando su nueva vida. La revista ¡HOLA! lanza en exclusiva la noticia del año: Ana Obregón es madre, de nuevo, y ya tiene a su bebé en los brazos. Tiene 68 años recién cumplidos, y energía y amor para lograr lo que se proponga. Pero, ¿esta criatura podrá sanar la herida que tiene su corazón por la muerte de su hijo? ¿Este bebé es deseado o necesitado? Son muchas las interrogantes que surgen con esta noticia y que inundan las redes sociales.
Aless, como cariñosamente llamaba (y llama) Ana Obregón a su hijo, murió en mayo de 2020. Han pasado casi tres años y ella nos ha ido contando, con pasión y amargura, todos sus estados de ánimo. La muerte de su hijo fue el golpe más duro de su vida, pero no el único. En 2021 tuvo que despedirse de su madre y meses más tarde, en 2022, de su padre, su pilar, el otro gran hombre de su vida.
Gestación por sustitución
La muerte ha rondado a Ana durante toda su vida. Desde muy joven se ha enfrentado a las dolorosas despedidas, desde Fernando Martín, su novio, a sus familiares más queridos. Por eso ahora ha querido plantarle cara a la vida, al destino y a la desazón, y se ha comprometido con la maternidad. Todos los medios destacan la noticia, aunque no todos hacen la misma lectura. El tema ha saltado ya de la prensa rosa y social al debate político y hoy es el tema central de todo tipo de tertulias.
La gestación por sustitución, proscrita de nuestro ordenamiento jurídico al considerar nulo de pleno derecho el contrato por el que se convenga la gestación, con o sin precio, a cargo de una mujer que renuncia a la filiación materna a favor del contratante o de un tercero, se conecta con situaciones de explotación reproductiva de las mujeres en contextos de globalización, donde cada vez más mujeres de países pobres actúan como madres gestantes para mujeres y hombres de países más ricos.
El debate está en la calle
Las redes sociales arden y son muchos los que critican esta decisión: unos lo ven mal por la edad y otros por decidir ser madre por gestación por sustitución, que es el término que recomienda utilizar el Observatorio de Igualdad de RTVE. La revista Semana dice que ella está en Miami, con su bebé, y anuncia que se llamará Ana. Su estancia allí se prolongará el tiempo necesario para registrar a la niña y conseguir la documentación.
Las fotografías de su estancia en Miami ya empiezan a verse en redes sociales y una de ellas está generando polémica y críticas negativas. En ella se ve a la actriz y presentadora salir del hospital con su niña en los brazos, pero lo hace en silla de ruedas. Es lo que manda el protocolo sanitario, aunque se está especulando sobre todo tipo de teorías: la imagen resulta, al menos, chocante.
El renacer como madre
El dolor ha dado paso a la esperanza, el drama ha dado paso a la felicidad, la soledad ha dado paso a la compañía. Ana ha encontrado una salida al túnel oscuro, triste y desolador en el que estaba. Esta niña le devuelve las ganas de vivir, las ganas de seguir adelante, las fuerzas que necesitaba para no desfallecer, para no caer. La enfermedad de Áless es el bálsamo para sus heridas, para renacer como madre, como mujer y como profesional. Hoy aumenta la familia de Ana Obregón, algo que nadie se esperaba. Solo ella sabía lo que iba a pasar.