Goya Toledo admite que el acento canario sigue siendo un problema en los castings
- La actriz repasa su trayectoria profesional y cómo fueron sus inicios
- Sole Giménez dejó Presuntos Implicados por el mal rollo: "Me estaba enfermando"
- Accede a todo el contenido en RTVEPlay
‘Las Tres Puertas’ llega al final de su segunda temporada y lo hace en compañía de tres invitados con trayectorias exitosas, cada uno en su campo. Una de ellos es Goya Toledo, quien se sincera con María Casado sobre cómo fueron sus inicios, su paso por Hollywood y las situaciones más complicadas de su profesión como actriz. De hecho, admite sin reparos que el tener acento canario no solo era un problema en el pasado sino que a día de hoy sigue siendo conflictivo a la hora de hacer castings.
Una carrera que se inicia muy pronto
Goya Toledo, nacida en Lanzarote, estudió Arte Dramático ya que su sueño era ser actriz. De hecho, ella ya se recuerda a sí misma de niña interpretando papeles a modo de juego: “Llevaba unas botas de mi hermana, naranjas, de tacó; me las puse y me monté una historia yo sola y pensé ‘estoy viviendo una realidad que no es la que está ahí pero yo me la estoy inventado aquí y la estoy disfrutando’. Y ahí fui consciente”.
El momento que le cambió la vida fue cuando le ofrecieron su primer papel: “Fue una historia muy bonita. Me vio el director en Lanzarote y me dijo ‘tú eres la protagonista de mi siguiente película’ y me dijo ‘Mararía’. Me hizo la pueba y me cogió”. El encuentro con Antonio Betancor, el director, fue casual mientras ella grababa un documental sobre volcanes en la calle. Y partir de ahí, comenzó su vida en Madrid y su carrera como actriz.
Los inicios no fueron fáciles pero tuvo la suerte de encontrar una familia en Madrid, la de Penélope Cruz, que la acogió como a una más. “Es una amistad muy bonita. Son 30 y tantos años de amistad, tenemos ahí una buena base”, comenta acerca de la protagonista de ‘Todo sobre mi madre’.
La cara B de la profesión
Aunque Goya Toledo es una enamorada de su trabajo, admite que no todo es de color de rosa y que una de las cosas que ha tenido que hacer es aprender a vivir con la incertidumbre. “No me he acostumbrado pero sí que tienes que empezar a saber manejar eso estados”, explica y añade que el equilibrio está en “estar siempre en contacto con la profesión. Siempre tienes cosas que leer, que ver, cursos que hacer. Y relativizar. Para mí es super importante estar preparando personajes, cosas que se mantengan, indagando. Me parece lo más bonito de esta profesión”.
Otro de los hándicaps con los que Goya se ha encontrado a lo largo de su trayectoria es su acento canario y, tal y como explica, eso sigue siendo algo que en las pruebas de actores puede jugar en contra de los artistas. “Yo iba a un casting y me decían ‘es que tu acento…”, revela y añade que ir a un casting y “saber que te iban a preguntar por tu acento era un horror”. Para la actriz sigue siendo problemático “a no ser que hagas un personaje canario”.