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MasterChef 11

MasterChef 11 | Fray Marcos: "La sociedad actual ha olvidado la espiritualidad"

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Fray Marcos comienza a brillar en MasterChef

Fray Marcos se convirtió en el primer fraile y sacerdote en entrar a MasterChef España. Si algo le caracteriza es la naturalidad con la que habla y comparte sus creencias, tratando de naturalizar aquello que a él le hace feliz. En programas anteriores le hemos escuchado explicar cómo vive su religiosidad. Pero en este noveno programa ha querido reivindicar la espiritualidad de la sociedad. Y lo ha hecho con un plato al que ha llamado "Aquí estoy, Señor".

Sin duda Fray Marcos ha sido protagonista absoluto del primer reto de la noche. Y no solo por conseguir el pin de la inmunidad. El sacerdote también ha querido lanzar un mensaje muy personal: "Conozco muchos jóvenes que a veces tienen la inquietud de ser querer ser sacerdotes y llevar una vida consagrada. Pero esta sociedad ha olvidado la dimensión espiritual y religiosa que cada uno tiene porque todo es material y corporal. Dios pasa a ser un gran mendigo y responderle 'Aquí estoy señor' a un dios que es el gran mendigo requiere de riesgo".

El pin de la inmunidad y un emotivo premio

Tras las palabras de Fray Marcos, Pepe Rodríguez le preguntó si estaba nervioso porque no estaba seguro de su plato. Pero el venezolano disipó cualquier duda: "No, estoy segurísimo de mi plato. De aquí salgo a trabajar a un restaurante marroquí". Y esa seguridad en sí mismo tenía un fundamento. Su receta de tajine de pollo con cous cous recibió un mar de buenas valoraciones. Tras probarlo, Jordi aseguró que tenía un toque tropical y que estaba perfectamente "especiado y trabajado". Pepe destacó más cosas aún: "es un guiso maravilloso, picante, gustoso y rico". Samantha cerró el veredicto mientras repetía cucharada: "Está buenísimo".

La alegría de Fray Marcos al recibir el pin de la inmunidad era desbordante. Pero había una cosa que le hacía, incluso, más ilusión. Junto a pin, el sacerdote ganó un viaje para dos personas a La Palma. Y confirmó quién sería su acompañante. "Es un sueño poder llevar a mi madre de viaje. En su nombre, muchas gracias. Se lo merece todo por el trabajo que hace en ese país que está tan mal. Es una mujer que lo merece todo. Ha salido adelante con sus hijos y sus nietos". Y como no podía ser de otra manera, cerró su agradecimiento con unas palabras a Dios: "Bendito sea Dios, por este premio y or el trabajo que se hace con el corazón en la mano".