'Matar al Nani', la polémica película sobre el caso: 5 datos que no sabías
- El caso El Nani fue el primer juicio de la democracia en el que se investigó a un grupo policial
- Matar al Nani (1988), una polémica película que se estrenó antes de la sentencia, está en RTVE Play
- No te pierdas Pacto de Silencio, la serie documental de RTVE Play que recupera su historia
La desaparición de “El Nani” fue uno de los casos que más impactó en la sociedad española de finales de los 80. Todo ocurrió la noche del 12 de noviembre de 1983, cuando aquel delincuente común, llamado Santiago Corella, fue detenido por la policía, acusado del robo de una joyería en Lavapiés. Tras aquel día, el rastro de Corella desapareció para siempre. Dos años después del suceso, la familia se puso en contacto con un periodista, destapando una historia que conmocionó a todo el país, una oscura trama de corrupción policial que tuvo como consecuencia el primer juicio contra un grupo policial de la historia de España.
La película Marta al Nani (1988), recuperó aquella historia con la esencia de los mejores thrillers. Una historia dirigida por Roberto Bodegas que mostraba sin pudor el lado más oscuro de la España posfranquista de los años 80. La cinta despertó, además, cierta polémica, al estrenarse cinco meses antes de conocerse la sentencia definitiva del juicio que determinó que El Nani fue torturado hasta la muerte por un grupo de, al menos, tres policías. La condena recayó sobre Francisco Javier Fernández Álvarez, Victoriano Gutiérrez Lobo y Francisco Aguilar González. Todos ellos recibieron unas penas de más de 29 años de cárcel por detención ilegal con desaparición forzada, falsedad documental y torturas.
Coincidiendo con el estreno de la nueva serie documental de RTVE Play, Pacto de Silencio, Historia de nuestro cine recupera la película Matar al Nani, una cinta de la que detallamos algunas curiosidades:
1. Una película polémica
La investigación del caso de El Nani destapó toda una trama de corrupción policial. Una red mafiosa en la que agentes del estado planificaban los atracos para, después, quedarse con gran parte del botín. Con siete procesados aún pendientes de una sentencia, a muchos les sorprendió el estreno de la película cinco meses antes de la resolución del juicio. Una cinta en la que, aunque solo se usa el nombre real de Corella, plasma casi al dedillo todos los detalles que se desvelaron en la prensa y dejaba claro que El Nani fue asesinado y enterrado en cal viva.
Producida y escrita por Vicente Escrivá, la película de Bodegas estaba basada en los artículos sobre el caso escritos por el periodista de Diario 16 Gregorio Roldán, que firmó el guion junto a Escrivá. Después de hablar con la mujer de 'El Nani' y realizar un exhaustivo trabajo de investigación, Roldán fue descubriendo una red mafiosa procedente de la propia policía y de las cloacas de un Estado aún con modos del franquismo.
2. Desconcierto con el actor que interpretó al El Nani
Lo primero que llama la atención es el desconocido plantel de actores que la protagonizan, empezando por el intérprete que da vida a El Nani, el actor francés Frédéric Deban. Un joven demasiado apuesto que chocó al público español que, con los prejuicios de la época, no asociaban su rostro de ojos claros con el de un atracador del lumpen. Esto obligó, además, a que la película tuviese que ser doblada por completo, con un resultado no demasiado afortunado. Con todo, el actor está muy acertado en papel. También destacan otros rostros, no tan conocidos entonces, pero que despuntarían después como el de Eulalia Ramón.
3. Presupuesto desorbitado y batacazo en taquilla
La película se lanzó el año de la resolución del jucio, pero tres años después de que se iniciase el caso. Esto hizo que el interés que despertó en su momento se desvaneciese y la respuesta de la taquilla fue mucho peor de lo esperado. Todo un batacazo comercial, teniendo en cuenta el elevado presupuesto que tuvo la película (150 millones de pesetas), mucho más alto que películas de la época más destacadas como Los santos inocentes, que con más o menos la mitad del presupuesto. Lo cierto es que hubo que destinar una importante partida para poder usar los derechos de imagen de Santiago Corella, una cantidad recibida por la familia que nunca fue revelada por el productor.
4. Mal catalogada como “cine Quinqui”
Aunque se haya catalogado en este genero en más de una ocasión, lo cierto es que Matar al Nani no es cine quinqui. Es cierto que el protagonista es un atracador, pero los referentes son totalmente diferentes. En el cine quinqui el punto de partida es una trama de acción, pero aquí es el thriller. Además, las películas de ese genero busca la creción de un producto trepidante, con secuencias llenas de ritmo que aquí no se dan. Matar al Nani es una película claramente asociada al cine de denuncia social y está más cerca de Camada negra o El diputado que de Navajeros.
5. Fue el fin para Rober Bodegas en el mundo del cine
Matar al Nani fue la última película que Roberto Bodegas hizo en el cine. Pese a ser un director muy prometedor en sus inicios, acabó apagándose lentamente. Formado en París, con un gran bagaje técnico, a su regreso a España sentó las bases del llamado "cine de la tercera vía", películsa que se desmarcaban por su calidad con cintas como La vida conyugal, Españolas en París y que reflejaban el momento social de nuestro país. Pero, paradójicamente, con la llegada de la democracia, Bodegas no supo encajar bien los cambios y solo hizo dos películas, retirado al mundo de la televisión.