La desaparición de El Nani, 40 años después: ¿Dónde está el cuerpo de Santiago Corella?
- Este año, se cumplen cuatro décadas de la desaparición de Santiago Corella, alias el Nani
- Un delincuente común del que se perdió el rastró cuando estaba bajo arresto policial
- La nueva serie de RTVE Play, Pacto de Silencio, se adentra en este caso sin resolver
El rastro de Santiago Corella, alias El Nani, se perdió el 13 de noviembre de 1983. Ese día, su mujer le escuchó por última vez, gritando de dolor, desde el calabozo de las dependencias policiales de Puerta del Sol en las que permanecía detenido. Tras aquel suceso, jamás volvió a verlo. La información oficial facilitada entonces por los agentes aseguraba que El Nani, tras librarse de las esposas, se fugó en un descampado de Vicálvaro, un barrio a las afueras de Madrid. Los agentes le habrían acompañado hasta allí para localizar el botín del robo por el que se le acusaba.
Un año después de lo sucedido, el periodista de Diario 16, Gregorio Roldán, publicó una serie de informaciones que cuestionaban la versión oficial de los hechos. Tras esto, los familiares del Nani no tardaron en denunciaron su desaparición, dando comienzo a un largo proceso judicial, cuatro años de instrucción del sumario, que impactó en la sociedad española. El caso destapó una oscura trama de corrupción policial. En septiembre de 1988, la sentencia dictaminó que Corella fue torturado hasta la muerte a manos de varios agentes de policías. Las penas recayeron sobre el comisario Francisco Javier Fernández Álvarez y los inspectores Victoriano Gutiérrez Lobo y Francisco Aguilar González, considerados los autores materiales. Se les condenó a más de 29 años de cárcel por detención ilegal con desaparición forzada, falsedad documental y torturas. Una pena que no fue mayor, porque el cuerpo sin vida de Corella jamás apareció.
Cinco versiones sobre el paradero de El Nani
Coincidiendo con el estreno en RTVE Play de Pacto de Silencio, la serie documental que aborda el suceso 40 años después de su desaparición, las preguntas sobre dónde está Santiago Corella y qué pudo ocurrir con su cuerpo vuelven a resurgir en la mente de muchos. Una historia que también fue recreada en la película Matar al Nani (1988), también disponible en RTVE Play. Durante el tiempo de investigación, se dieron muchas versiones de lo que pudo haber pasado. Entre las hipótesis que se barajaban, estaba la de que hubiese sido arrojado a un pantano (primero en Madrid y, después, en Córdoba); que estuviese enterrado en una finca o en la zona de Vicálvaro o que hubiese huido como refugiado a países como Francia o México. Las búsquedas de su cadáver se llevaron a cabo en Vicálvaro, El escorial y en una finca de Córdoba.
Sobre su huida a México o Francia
Acusación y defensa litigaron mucho sobre este aspecto. Los defensores de la familia, los letrados José Antonio Sanz Grasa y Jaime Sanz de Bremond, dos testimonios clave en Pacto de Silencio, consideraron siempre que las filtraciones sobre su huida al extranjero eran “maniobras de distracción”. Pero, la defensa de los agentes implicados, representada por Emilio Rodríguez Menéndez, insistía en que no había pruebas de lo contrario y, sobre todo, se apoyaba en la falta de pruebas de su muerte. La primera referencia a la posible huida a Francia de Santiago Corella fue lanzada por el comisario Francisco Javier Fernández Álvarez, uno de los acusados. Pero fue descartada.
Arrojado a un pantano, segunda hipótesis
Meses después de comenzar el proceso judicial, se apuntó a la posibilidad de que el cuerpo hubiese sido arrojado a un pantano o embalse de la región de Madrid. El lugar señalado fue la presa de Guadalén, cerca de El Escorial. Un pantano, lleno de fango del que, como cuenta un testimonio del documental, "todo sale a flote si no le ponen nada que pese". Sin embargo, los equipos de búsqueda no encontraron nada en la zona.
Más tarde, un testigo, en principio sin importancia, apuntó al pantano de Puente Nuevo, en Córdoba. Hasta allí acudieron submarinistas de la Guardia Civil a hacer complejas operaciones de rastreo que duraron días. Drenaron y miraron la parte más cerca a los puentes, que era desde dónde se podía haber arrojado el cuerpo.
Según el testimonio de Federico Venera
El joyero santanderino, Federico Venera, y ex confidente de la policía, fue una pieza clave en el caso (y en el entramado) y soltó información muy impactante sobre el posible paradero de Corella. Este hombre se había convertido en un infiltrado de la policía, completamente mezclado en la mafia policial que se destapó con el caso El Nani. Los agentes planificaban los atracos para después quedarse con el botín. El papel de Venera era soplarles cuándo iban a tener lugar esos atracos y, después, encargarse de blanqueaba las joyas y los metales preciosos en el mercado negro.
En una entrevista ofrecida a los periodistas José Díaz Herrera, Rafael Cid y Miguel Ángel Liso en el llamado Dossier negro de la policía-una investigación sobre el caso por la que fueron reconocidos con el Ortega y Gasset de Periodismo- Venera habla abiertamente del asesinato de Corella. “Les oí el comentario de que durante los interrogatorios se les había quedado muerto y que no les había quedado más remedio que deshacerse del cuerpo”. También da detalles de que este habría sido enterrado en el madrileño barrio de Vicálvaro y que cubrieron sus restos con cal viva. “En estos momentos -afirmó que le dijo uno de los policías que participó en su detención- no se le reconoce ni por la dentadura”.
Las declaraciones de Messía Figueroa
La aristocracia también se vio inmersa en este caso, como ocurrió con Jaime Messía Figueroa. Este hombre, tenía varias causas pendientes con la justicia y durante años permaneció huido en Brasil. Su implicación en el caso El Nani fue a raíz de la hipotesis que planteaba que, tras dar muerte a Corella, los agentes de funcionario trasladaron su cuerpo sin vida hasta la finca de Messía Figueroa para enterrarlo allí.
Antes de conocerse la sentencia del juicio de El Nani, la revista Interviú publicó en 1988 una entrevista efectuada en Brasil con Messía. En la misma se reproducía como afirmaciones de Messía que los policías y sus superiores le llamaron "para que les ayudara. Eran amigos míos y era mi obligación ayudarles, el mal ya estaba hecho. También me lo rogaron sus superiones, y no solo digo uno, digo varios, y me ofrecieron toda clase de garantías". Según contó lo hizo en un lugar que no quiso revelarles.
¿Qué pasó tras esas declaraciones?
Finalmente, extraditado a España, el aristócrata Jaime Messía Figueroa fue llamado a declarar en el caso. Un testimonio en el que negó todo y dijo ignorar cuál era el destino o el fin de Santiago Corella. La juez mantuvo su prisión por su supuesta relación con el caso Nani y concretamente por los presuntos delitos de detención e inhumación ilegales, así como homicidio, asesinato o torturas con resultado de muerte. Pero más allá de eso, no se abrieron diligencias ni investigaciones al respecto en este caso.
¿Rastrearon la finca? Según cuentan los abogados defensores, Sanz Grasa y Sanz de Bredmon, "la finca de Figueroa, es donde se supone que está, si es que no se ha desenterrado, pero nunca se buscó allí al Nani. Es como si te dicen que está enterrado en la Cada de Campo", esto último en alusión a la enorme extensión de terreno de la que se trata.
¿Un pacto de silencio?
Los abogados defensores así lo creen. “Estoy convencido de que el verdadero paradero o lo que queda, si es que quedó algo, lo conocen muy pocas personas”, asegura Sanz de Bremond. “No lo han revelado nunca, lo que me parece lamentable, evidentemente, ha habido un pacto del silencio que se mantiene”, añade. Rafael Vera, secretario de Estado para la Seguridad durante los años y uno de los testimonios más importantes que aparecen en Pacto de Silencio lo calificaba directamente como una "ley del silencio de un cuerpo disciplinado, armado y jerarquizado”.
Santiago Corella fue declarado oficialmente muerto en 1996. En el proceso judicial se mostraron documentos en los que se mostraba como alguien escribió las siglas RIP junto al nombre de Santiago Corella en el libro de detenidos de la policía de aquel 13 de noviembre de 1983. Después fue tachado, según se vió en el juicio. A pesar de la declaración oficial de su muerte, el caso de El Nani nunca ha sido un caso cerrado para su familia.
Guía para no perder detalle de esta serie documental de dos capítulos: Claves de Pacto de silencio, Cronología de los hechos, Quién es quien.