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MasterChef 11: Expulsada una favorita, ¡ya tenemos semifinalistas!

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Ana se despide de las cocinas de MasterChef 11

La undécima edición de MasterChef está llegando a su fin y... ¡ya tenemos a los semifinalistas que lucharán por llegar a la gran final y el duelo decisivo! Ellos son Eneko, Pilu, Álex, Lluís y Jotha, que a punto estuvo de colgar el delantal y quedarse a las puertas en el último programa. Sin embargo y contra todo pronóstico, la expulsada fue Ana, que podría haber brillado, ya que el reto era repostería, el que se suponía que era el punto fuerte de la aspirante. Las ganas de innovar y destacar frente al resto de los delantales negros, le jugaron una mala pasada. Así fue la ultima prueba de la noche, que terminó con su expulsión.

Ana, expulsada en una prueba de repostería

Era a la aspirante que mejor se le daban los postres, en las pruebas por equipos los capitanes siempre confiaban en ella para hacer un buen trabajo. Quién se iba a imaginar que sería un terreno pantanoso para Ana, que terminó confiándose demasiado. El reto al que tuvieron que enfrentarse los delantales blancos consistía en preparar un plato con un endulzante que no fuera el azúcar, uno menos calórico y apto para todo el mundo, incluso diabéticos. Eneko, como el mejor de la prueba anterior, fue el encargado de repartir los ingredientes. Su intención fue favorecer a Álex, a quien le dio la stevia, el más popular de todos. Ana se quedó con la sucralosa, mientras que Jotha quiso arriesgar y él mismo pidó que le dieran el más complicado, la miraculina. "Si quieres guerra, ahí la tienes", accedió Eneko cumpliendo sus deseos.

Ana quiso innovar y, en lugar de hacer un buñuelo común relleno, quiso quitar la parte crujiente y presentar una especie de bizcocho mojado que no convenció en absoluto a los jueces. "Con los postres me meto a mí misma mucha presión, como soy la repostera de la edición", reconoció. "Se queda un postre plano", aseguró Pepe Rodríguez. El glaseado tampoco le gustó a Samantha: "A mí, la fritura mojada no me va". El concepto de Ana también decepcionó a Jordi Cruz: "Es como si coges un churro, lo mojas en un yogur de fresa y no te lo comes, lo dejas ahí, no quiero que esté crujiente".

Ni sus propios compañeros podían imaginarse ese desenlace, la mayoría se echó las manos a la cabeza. Ni siquiera ella misma parecía asimilar la noticia. Ana empezó confiada, dispuesta a presentar el mejor postre. No esperaba una mala valoración del jurado. Al escuchar sus críticas y comparándolas con las de Álex y Jotha, supo que tenía muchas posibilidades de irse y acertó. Su cara de decepción, un auténtico poema. A pesar de todo, Ana se fue orgullosa de haber llegado hasta aquí y de reencontrarse con su prometido. Le costó seis años entrar en el programa y no piensa abandonar su sueño tan fácilmente.

Mientras, en la galería, todos celebraban haber llegado a la semifinal. Jotha, que se vio con un pie fuera de MasterChef, el que más. Para Ana, Lluís es su ganador, aunque Eneko también cree que tiene muchas posibilidades.