¿Por qué Peret no quería ir a Eurovisión y acabó llevando escolta?
- Participó en 1974 con "Canta y sé feliz", el año siguiente a Mocedades
- Lazos de sangre rinde homenaje a Peret, rey de la rumba
Brighton, 6 de abril de 1974. Agnetha Fältskog, Björn Ulvaeus, Benny Andersson y Anni-Frid Lyngstad conquistaron Eurovisión con "Waterloo". ABBA dio a Suecia su victoria más recordada en el festival, la primera de muchas: hoy en día el país suma siete, la última en 2023 con Loreen, que llevó la última edición hasta tierras escandinavas coincidiendo con el 50º aniversario del triunfo de ABBA.
El grupo se impuso en 1974 a la italiana Gigliola Cinquetti y a los neerlandeses Mouth and MacNeal, que completaron el podio, así como a Olivia Newton-John, que ejercía de anfitriona y que tuvo que contentarse con una cuarta posición a compartir con otros dos países. Varios puestos después, en una novena posición también con empate, se encontraba Peret. Interpretaba "Canta y sé feliz", aunque lo cierto es que feliz, lo que se dice feliz, no fue. "Me llevaron a la fuerza", llegó a confesar años más tarde, asegurando que el festival no le interesaba. ¿Qué ocurrió?
Amenazado por participar
Peret fue elegido como representante de España en Eurovisión de forma interna, igual que había ocurrido el año anterior con Mocedades. El grupo había quedado en segunda posición y por poco no había ganado: "Eres tú" había conseguido un total de 125 puntos, frente a los 129 de Luxemburgo. El listón estaba muy alto, pero para entonces Peret ya era una estrella tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, con canciones como "Borriquito".
Con tal éxito a sus espaldas, no veía necesario participar en Eurovisión. "Me llevaron a la fuerza. Yo era famosísimo en Europa, vendía millones de discos en Europa. ¿Qué iba a hacer yo allí, a participar? No me interesaba. 'No ha hecho el servicio militar, por lo menos haga esto'", recordó en una ocasión sobre su experiencia. Aquel año, además, coincidió con la condena a muerte del anarquista Salvador Puig Antich. El 2 de marzo de 1974, un mes antes de la celebración del festival, Puig Antich fue ejecutado por garrote vil, el mismo día que también se ejecutó al polaco Heinz Chez.
"Le amenazaban los del régimen para que fuera y le amenazaba la oposición por ir. De hecho, Peret hubo unos años que llevaba un revólver encima", cuenta en el documental Peret, yo soy la rumba el periodista y mánager Ragna, amigo del cantante. "Me amenazaron de muerte y tuve que viajar con escolta", llegó a decir el propio artista a un periódico.
Peret culpó al clima político
Y así llegó el gran día, el 6 de abril de 1974. Guitarra en mano y acompañado por cinco coristas, Peret se subió al escenario e interpretó "Canta y sé feliz". Los jurados de los otros 16 países participantes (Francia también iba a participar, pero acabó retirándose por la muerte del presidente Georges Pompidou solo unos días antes) otorgaron a "Canta y sé feliz" un total de 10 puntos. El belga Jacques Hustin recibió el mismo número de puntos, por lo que ambos quedaron empatados en la novena posición.
Décadas más tarde, en 2009, Peret contó a EFE que creía que la ejecución de Puig Antich había influido en que muchas delegaciones "boicotearan" a España. "No quiero decir que ABBA no ganara justamente, que lo hizo. Llevaban un estilo muy nuevo y un look muy moderno, pero a mí me perjudicó el clima político del momento. En aquel entonces a mí ni siquiera me apetecía ya participar en aquello", opinaba el cantante.