¿Por qué los gatos son capaces de sobrevivir a caídas de grandes alturas?

• Que los gatos tienen 7 vidas, no es cierto, pero casi, ya que sobreviven a caídas de grandes alturas. ¿Cómo es posible?
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¿Por qué se dice que los gatos tienen 7 vidas?

¿Cuántas veces has escuchado que “los gatos tienen 7 vidas”? Este es, probablemente, uno de los mitos más extendidos que circulan entorno a este animal. Sin embargo, no se aleja mucho de ser “cierto”, ya que, la verdad es que los gatos sí que logran sobrevivir a caídas de grandes alturas. Además, siempre caen sobre sus cuatro patas. ¿A qué se debe? Lo explican todo en el espacio de La 1, el programa presentado por Mónica López.

Uno de los aspectos que más llaman la atención de los gatos es que siempre caen de cuatro patas y pueden salvarse, aunque caigan de grandes alturas. ¿Cómo es posible? Para responder esas cuestiones, primero hay que saber que, en esencia, la naturaleza de los gatos es arborícola (que viven en los árboles). Así, aunque los tengamos como animales domésticos, estos siempre van a querer trepar e incluso subirse a los sitios más altos de la casa.

¿Por qué caen de pie?

Partiendo de esa base, a través de la selección natural, los gatos han desarrollado un agudo instinto para saber dónde es abajo y mantener la posición recta, llamado reflejo de enderezamiento aéreo, el mismo mecanismo que el ser humano utiliza para el mantener equilibrio.

Además, los músculos de las piernas de los gatos les hace tener mucha fuerza para el salto y también para el aterrizaje, los mismos que invierten energía en la desaceleración en lugar de romper huesos, aparte de que sus patas están anguladas debajo del cuerpo, en vez de estar extendidas hacia abajo.

Son capaces de sobrevivir a una caída de 32 pisos

En 1987 un estudio demostró que, de 132 gatos llevados de urgencia a una clínica veterinaria neoyorquina por caídas de edificios altos, el 90% sobrevivieron y apenas el 37% necesitaron tratamiento para sobrevivir.

Incluso, hay uno gato que cayó de 32 pisos sufriendo únicamente la rotura de un diente y un colapso pulmonar y fue dado de alta en tan solo 48 horas. ¿Cómo es posible? Gracias a la velocidad terminal, que es la velocidad máxima que puede alcanzar un objeto que se mueve a través de un medio que se opone a su movimiento. En el caso de los gatos, es una velocidad lenta, en comparación con animales más grandes, como los caballos o los seres humanos: “Mientras un humano promedio caería a una velocidad en torno los 193 km/h un gato lo haría a 97 km/h”, explica Mónica López.

De esta forma, la reducción de la velocidad, combinada con las leyes de la aerodinámica, dotan a estos pequeños felinos de este “poder de supervivencia”, pero no es el único factor que entra en juego, ya que también depende de las propiedades de resorte de sus patas, su peso y el diámetro de sus huesos.