"Dejé de sentir, dejé de ser persona". El testimonio sobre el Trastorno Límite de la Personalidad de Paula Collantes

• Paula Collantes habla sobre su Trastorno Límite de Personalidad. María Esclapez, psicóloga, da claves sobre el manejo de la ira
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La cámara de Gesell - Episodio 6: Trastorno Límite de la Personalidad

“Te sueltan: "Tienes Trastorno Límite de la Personalidad", pero nadie te explica lo que es”, cuenta la influencer y gimnasta Paula Collantes. Pero, ¿qué es el Trastorno Límite de la Personalidad? María Esclapez, psicóloga y divulgadora, nos lo cuenta en el sexto y último episodio de la primera temporada de La cámara de Gesell.

¿Qué es el Trastorno Límite de la Personalidad?

“El Trastorno Límite de la Personalidad (TLP) se define por un conjunto de síntomas entre los que se encuentran: la dificultad para establecer vínculos interpersonales, el miedo a un abandono real o imaginario, un sentimiento crónico de vacío, impulsividad, emociones arrolladoras y otros muchos síntomas”, explica María.

Como vemos, el Trastorno Límite de la Personalidad tiene un amplio espectro, pero en este programa nos vamos a centrar en el control de los impulsos y el manejo de las emociones. Para ello se sientan al otro lado del espejo, Paula Collantes, gimnasta a nivel federado e influencer. Para compartir su testimonio con ella, se sienta en frente, el invitado anónimo de este programa, Kirian Valdenebro, profesor de batería y streamer musical en Twitch.

Paula Collantes nos cuenta su experiencia con el TLP. RTVE

Los testimonios

Paula cuenta como se sintió la primera vez que le dijeron que padecía Trastorno Límite de la Personalidad: “Me diagnosticaron TLP con diecinueve años, me he sentido incomprendida y un bicho raro, pero sobre todo autodestructiva para mí y para las personas que me rodeaban”, recuerda Paula.

Ambos recuerdan como el Trastorno Límite de Personalidad se intensificó tras sufrir graves periodos de estrés. En el caso de Paula fue tras romperse una pierna a punto de tener un campeonato y en el caso de Kirian tras fallecer su pareja en un accidente. Pero, antes de todo ello ya habían sido diagnosticados con ansiedad y depresión, y tardaron en decirles que lo que padecían era TLP y no solo eso, si no que nadie les explicó qué era aquello.

En jóvenes, sobre todo, el TLP es un trastorno complicado de diagnosticar ya que está directamente relacionado con la personalidad, por eso hasta que la personalidad no está bien desarrollada y consolidada es imposible establecer un diagnóstico claro.

Paula recuerda cómo empezó a darse cuenta que lo que sufría era algo más que ansiedad o depresión. Comenzó con problemas de sueño, estableció una conducta desafiante y empezó a tener ataques de ira.  “No entiendes porque te dan esos ataques con las personas que más quieres”, recuerda Paula. Kirian resume lo que les ocurría brevemente: “No controlamos bien las emociones ni la impulsividad”.

La despersonalización

“No era capaz de ubicar el tiempo y el espacio, me veía muerta en el espejo, fue muy duro. En varias ocasiones tuve que preguntarle a mi madre si no me había muerto en un accidente de coche. Dejé de sentir, dejé de ser persona. Respiraba”, relata Paula recordando uno de sus momentos más duros con TLP. A todo ello hay que sumarle, que esos ataques de rabia muchas veces suelen ser contra ellos mismos, llegando a desarrollar así tendencias suicidas y terminando en autolesiones.  En esos momentos Kirian necesitaba aislarse y estar completamente solo.

La sensación de estar perdido y no relacionar el espacio y el tiempo se conoce como despersonalización. Suele tener síntomas duraderos y cuesta bastante tiempo volver a encontrase. “La persona siente que se desplaza hacia atrás de su cuerpo, como que su cuerpo de repente no le pertenece y empieza a observar el entorno como si fuera un lugar extraño, como si fuera un mero espectador”, explica la psicóloga.

Las claves de María Esclapez

Tanto Paula como Kirian a lo largo de todo el episodio han hablado sobre la emoción de la ira y María Esclapez nos da las claves para intentarla gestionar y que las consecuencias no sean contra nosotros mismos: “Primero identifico lo que está pasando en mi cuerpo", nos pauta la psicóloga. 

María Esclapez nos recomienda respirar, ya que cuando hacemos respiraciones profundas todo el sistema nervioso se calma y se relaja. Tendremos que pensar también un motivo por el que contener dicha ira y no desencadenarla en conductas que pueden ser tanto destructivas como autodestructivas como hemos visto. "Porque una cosa es lo que tú sientes y otra cosa es lo que haces. Son dos respuestas totalmente diferentes”, concluye María Esclapez.

“Si no me puede definir mi conducta, por qué cambia, ni mi emoción por qué cambia, ni mis pensamientos, por qué van y vienen, ¿qué es lo que siempre va a permanecer? Mis valores", concluye la divulgadora. María nos aconseja hacer una lista con los valores personales que tenemos y a partir de ellos actuar y sentir acorde con dichos valores. Con esta recomendación para la gestión de la ira termina esta primera temporada de La cámara de Gesell.