¡Aprende a gestionar tus ahorros y deja de comprar impulsivamente!
- En 'Para Todos La 2' la psicóloga Patricia Ramírez te da unas recomendaciones para ahorrar
Consumir en exceso, comer mal o beber alcohol son comportamientos que las personas utilizan para desahogarse
Son muchas las personas que se proponen ser más ahorradoras. Aprender a gestionar los ingresos para no pasar apuros, tener una pequeña reserva para los casos de urgencia o simplemente no ser un derrochador víctima de las modas es importante para llevar una vida tranquila y equilibrada.
En general, en España estamos poco formados en economía de estar por casa, no nos enseñan a ahorrar y en los colegios tampoco hay ninguna asignatura que eduque a los niños sobre estos temas. Aunque pensemos que tenemos más control del que nos imaginamos sobre nuestra conducta de compra, hoy sabemos que las emociones son un potente desestabilizador. "No compra tu cabeza, compra tu corazón" asegura la psicóloga de 'Para todos La 2', Patricia Ramírez.
Consumir en exceso, comer mal o beber alcohol son comportamientos que utilizamos como desahogo para olvidarnos de nuestra ansiedad, aburrimiento o tristeza. Si tu objetivo es revertir esta situación y ser más ahorrador, ¡atento a estos consejos!
1. Comprar pequeñas cosas
Las compras más impulsivas están mediadas por nuestras emociones. Si has tenido un mal día, no entres en la cocina sin pensar antes ni empieces a navegar por tiendas que te gusten. En su lugar: date una ducha o practica algún ejercicio de meditación. Escribir por qué te sientes así y qué deberías cambiar en tu vida para sentirte mejor, también ayuda. Ten muy claro que comprar no es la solución a tus problemas.
2. Días de reflexión
Date días de reflexión. Imagina que ves un vestido precioso y rebajado. No lo compres. Date tres días o una semana de tiempo y si dentro de unos días te sigue apeteciendo, cómpralo. Así sabrás si realmente quiero eso que estás comprando o se trata simplemente de un capricho pasajero.
3. No lleves más dinero del que puedes gastar
Si sabes que eres proclive a caer en compras de las que luego te arrepientes, no lleves encima más dinero del que deseas gastar y déjate las tarjetas de crédito en casa.
4. Mete en una hucha aquello que vas ahorrando
Plantéate cada semana meter en la hucha lo que no te has comprado. Refuerza mucho ver las consecuencias positivas de tu ahorro de forma inmediata.
5. La clave: Aprende a vivir con menos
Por último, no solo es importante no gastar, sino que también tenemos que desprendernos de aquello que ya no necesitamos. Para nuestra paz mental, acumular cosas no va bien. Aprender a vivir con menos y valorando lo que sí tenemos es una bonita filosofía de vida con la que podemos ser muy felices.