Día Nacional de la Patagonia: ¡Debes saber esto si la visitas!

• El 11 de octubre es el día Nacional de la Patagonia, un tesoro de la naturaleza. ¡Cuidado con el viento si la visitas!
• ¿Sabías que muchos municipios han cambiado de nombre a lo largo de la historia? Algunos por sucesos terribles…

¿Pensando en viajar a la Patagonia? ¡Antes debes saber esto!

El 11 de octubre se celebra el día Nacional de la Patagonia. La región más austral del continente sudamericano. Fecha elegida en honor a Francisco Moreno, el explorador que también da su nombre al mítico glaciar Perito Moreno. Sin duda, esta región comprendida entre los territorios de Argentina y Chile, esconde paisajes únicos e inspiradores, pero también adversidades temporales a los que hay que enfrentarse, como los vientos fuertes. ¿En qué zonas sopla menos? Los desvelan todo en Ahora o Nunca, el magacín de La 1 de RTVE.

La Patagonia también es la región del viento. Como ha explicado Mónica López, presentadora del espacio de La 1, allí podemos encontrar los furiosos vientos que llegan del Pacífico: los rugientes cuarentas, los aullantes cincuenta, y más al sur, los bramadores sesenta.

Son vientos planetarios o constantes que soplan del oeste al este. Y todos reciben su nombre dependiendo de la zona en la que soplan. Por ejemplo, los rugientes cuarenta soplan en la zona de los 40º sur.

Los marinos los llamaron así porque son muy intensos y veloces. Y lo son, entre otras cosas, porque el 80% del hemisferio sur es agua. Y es que, los rugientes apenas encuentran tierra firme que los detenga.

Los vientos rugientes soplan de Oeste a Este

En la edad dorada de la navegación a vela, se usaban en rutas comerciales como la Ruta de los Clippers, unos veleros que transportaban mercancías a toda velocidad, para vencer a la competencia. Se jugaban la vida, porque tenían que cruzar del Pacífico al Atlántico por el estrecho de Magallanes, o por el cabo de Hornos. Y allí se encontraban con los aullantes cincuenta, más peligrosos que los rugientes cuarenta.

De hecho, los viejos marinos decían que "debajo de los 40 grados sur no hay ley; debajo de los 50 grados sur no hay Dios". Porque, a medida que nos desplazamos al sur y nos acercamos a la Antártida “Los icebergs abundan. Las tormentas son constantes. Y las olas superan los 15 metros”, explica López. En esa zona encontramos los bramadores sesenta: “Para que os hagáis una idea, en la Bahía de la Commonwealth, que está en el paralelo 67, se han medido vientos de 320 kilómetros hora”, añade.