Aprende a decir "no" con estos 6 consejos
- Decir no también es una forma de quererte a ti mismo y valorar tu tiempo
- La psicóloga Patricia Ramírez te da 6 consejos para rechazar un plan sin sentirte culpable en 'Para Todos La 2'
¿Sabías que existen dos letras que te pueden transformar de sumiso y complaciente a ser libre y dueño de tu tiempo? Esas dos letras son la N y la O: NO. Si hay algo que cuesta a la mayoría de las personas es pronunciar esta palabra y la psicóloga Patricia Ramírez bien lo sabe. En el programa 'Para Todos La 2' te ofrece 6 consejos muy útiles para aprender a decir no y sentirte bien.
Los motivos por los que cuesta tanto decir "no" están intrínsecamente relacionados con la aceptación por parte de otros. Vives de la valoración de terceras personas y por desgracia, la imagen que tienes de ti mismo, tu seguridad y confianza dependen de la opinión que los demás desprenden de ti. Por lo tanto, piensas que cuanto mejor caigas y más dispuesto estés para todo el mundo, más positivamente te valorarán. Esta valoración es evidente que te hace sentir bien, pero retroalimenta tu conducta de estar disponible cada vez que alguien te requiera.
Las personas suelen interpretar que si te niegas a hacer favores te van a juzgar como egoísta, poco solidario y nada complaciente. Y está bien que seas servicial, pero no tienes que ser servil. Decir “no”, te permite darte valor a ti, a tu tiempo, tener control y saber que eres tú el que decide en qué proyectos te embarcas. Si quieres aprender como hacer sin sentirte culpable, sigue estos consejos:
1. Valora la petición
No tienes por qué dar una respuesta inmediata a nadie. Puedes decir que te lo pensarás, que consultarás la agenda o que lo hablarás con tu pareja. ¡Valora la petición y no respondas tan rápidamente!
2. Di "no" si no quieres hacer algo
Si de verdad tienes claro que algo no te apetece o que te impide priorizar lo que para ti es importante di “no” sin justificarte. No des explicaciones ni mientas, sé claro y directo. No tienes por qué sentirte mal por querer otra cosa distinta a los demás ni por ponerte como primera opción, muchas veces es necesario hacerlo.
3. No te dejes chantajear
Si la persona que recibe un no por respuesta insiste y no lo acepta, utiliza entonces la técnica del disco rayado. Se trata de repetir una y otra vez la misma frase: "Lo siento, esta vez no puede ser". No des pie a nada más ni tantas explicaciones.
4. No pierdas la calma
Por otra parte, no pierdas la calma ni te muestres dolido, avergonzado o apenado por no poder responder a una petición. Muestra seguridad y convencimiento de lo que quieres. Deja de ponerte siempre en último lugar y recuerda que tú eres la persona más importante de tu vida.
5. Como última opción: vete
Si la persona se pone muy pesada y no entra en razón, dile que tienes que colgar el teléfono o que tienes que irte y hazlo.
6. ¿Te sientes mal?
Si estás acostumbrado a decir que sí a todo es normal que te cueste imponerte al principio. Si te sientes mal contigo mismo al hacerlo piensa que es cuestión de aprendizaje. Poco a poco irás acostumbrándote a priorizar y disponer de tu tiempo. Habla contigo mismo y reflexiona. Puedes decirte algo como: “Tranquilo, es normal, te sientes mal porque estás cambiando un valor que hasta ahora era importante en tu vida” o “Tengo derecho a practicar deporte, a leer un libro y a no estar siempre para todo el mundo”.
Que aprendas a decir "no", no significa que ahora le digas "no" a todo el mundo. Recuerda que la solidaridad y la ayuda son básicas para que sobrevivamos en este mundo, pero siempre dentro de unos límites sanos.