Helena Ezquerro, Matilde en 'La Moderna': "He tenido muy presente a mis abuelas para este papel"
- Helena Ezquerro es Matilde en la nueva ficción de RTVE
- Conoce más detalles sobre su personaje
Helena Ezquerro interpreta a Matilde en La Moderna. Tras triunfar en la gran pantalla con Las chicas están bien de Itxaso Arana, esta logroñesa de 26 años protagoniza la nueva ficción de RTVE que puedes disfrutar de lunes a viernes a las 16:30 en La 1, y también posteriormente en RTVE Play.
Matilde es la hija mayor de los Garcés. Tras la muerte de su padre, la joven se ve obligada a hacerse cargo de toda la familia. Debido a sus problemas económicos, se convierte en la única esperanza del clan consiguiendo un puesto como dependienta en uno de los salones de té más distinguidos de la ciudad, La Moderna.
“Soy consciente de que soy una privilegiada por estar trabajando como actriz, y más de ser la protagonista de un proyecto como este. Me siento muy afortunada de poder defender un personaje durante muchos meses y es en eso en lo que quiero centrarme. En el momento presente”, nos cuenta Helena, quien lleva dedicándose a la interpretación desde que tenía 9 años.
“Matilde me hace aprender mucho cada día”
Helena confiesa que el papel de Matilde le hace aprender cada día y que, aunque se parecen mucho, la dependienta de La Moderna tiene el sentido de la dignidad “mucho más desarrollado” que ella.
“Matilde es una mujer con mucha y valentía, además de un sentido de la justicia admirable. Eso es lo que más me cautivó del personaje. También su fuerza arrolladora y su amor por la familia. A lo mejor, esto último es lo que más diferencia a Matilde de otros personajes que he hecho, su amor incondicional por su familia y su lealtad”, explica.
Además, su papel en ‘La Moderna’, está sirviendo a Helena para experimentar como actriz: “Creo que es la primera vez que dedico tanto espacio a investigar actoralmente las relaciones entre hermanos, por ejemplo. También creo que es la primera vez que interpreto a un personaje que siente un amor tan puro e incondicional como el que Matilde siente por Íñigo”, cuenta.
Su fuente de inspiración y su rutina para grabar La Moderna
A pesar de su corta edad, a la intérprete no le ha costado viajar al Madrid de 1930 para meterse en el papel. Para ello, Helena ha tenido “muy presente a sus abuelas”. Ellas han sido su fuente de inspiración. "A la vez siento que no me ha resultado difícil comprenderlas porque creo que tenemos una memoria en el cuerpo que nos transporta a las mujeres del pasado, a todas esas mujeres que nos han precedido… y ese recuerdo corporal o sensorial hace que se me despierte antes la imaginación”, asegura.
Para asistir al rodaje, Helena se despierta a las 6:30, desayuna, estira un poco y se va directamente al coche de producción. “Los días en el rodaje son muy intensos porque rodamos muchas horas y un montón de secuencias seguidas. Pero siempre hay momentos para bromas, risas entre compis, cafés y conversaciones. Es un ambiente amable con ganas de trabajar y sacar este proyecto adelante”, deja claro la actriz. “Estudio sobre todo los fines de semana. Entre semana intento, después de rodar, tomarme un tiempo para descansar y desconectar”.
El otro personaje que le habría gustado interpretar
En caso de no haber dado vida a Matilde, a Helena no le hubiese importado meterse en la piel de la villana de La Moderna. “Me gustan mucho todos los personajes, pero a lo mejor me hubiera encantado ser Doña Carla… puede parecer una broma, pero ser la antagonista tiene su punto”, confiesa.
En cuanto al cine y el teatro, la riojana no puede decidirse: “Ambos tienen algo que me atrapa. No puedo elegir. He disfrutado mucho haciendo teatro y he hecho menos tele, pero ahora que estoy haciendo esta serie, siento que estoy enamorada de los dos”, nos explica. Sobre sus referentes, Helena se apoya en Meryl Street, Jodie Comer, Natalie Portman o Michelle Williams.
El día perfecto de Helena Ezquerro
A Helena Ezquerro le gusta leer, ir al cine y al teatro. Para ella un día libre perfecto es aquel en el que puede pasar un rato con sus amigos o divertirse con sus gatos. A pesar del poco tiempo que este trabajo le deja libre, siempre busca un momento para disfrutar de estos pequeños placeres de la vida que tanto la llenan.
La actriz también ha reconocido que otra de sus aficiones son los idiomas, y asegura que, de no haber sido actriz, le hubiera gustado ser traductora. Por ahora podremos seguir disfrutando de su interpretación en La Moderna.