'Hasta el último hombre': la historia real del soldado que fue a la guerra sin arma

• El presidente estadounidense Harry S. Truman le condecoró con la Medalla de Honor
• Mel Gibson dirigió a Andrew Garfield en esta película que ganó 2 Oscars
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Andrew Gardfield interpreta al soldado Desmond T. Doss

La película de Mel Gibson Hasta el último hombre (2016) es una de las favoritas para los entusiastas del cine bélico. Ambientada en la II Guerra Mundial, concretamente en la isla japonesa de Okinawa, cuenta la historia real de Desmond T. Doss, interpretado por Andrew Garfield, que participó en esta sangrienta batalla sin empuñar una sola arma, y que recibió la Medalla de Honor del congreso de manos del Presidente Harry S. Truman. Desmond T. Doss era un hombre contrario a la violencia, un objetor de conciencia, vegetariano, fiel a sus principios, que lleva el mandamiento “no matarás” grabado en su conciencia. Doss se alistó en el ejército de los Estados Unidos no como soldado, sino como médico, y su actividad en el frente de guerra encarna una historia heroica digna de Hollywood que Mel Gibson ha querido llevar al cine.

Su negativa a llevar armas le hizo enfrentarse a un Consejo de Guerra y al desprecio de sus compañeros, que lo consideraban un cobarde. Pero las heroicidades del protagonista son tan increíbles que sólo pudieron ser verdad. Así, demostró su valor, se adentró en el campo de batalla (desarmado) una y otra vez, para evacuar a sus compañeros logrando salvar la vida de 75 soldados heridos que hubieran muerto sin su ayuda.

Por su negativa a llevar armas, Desmond se enfrenta al desprecio de sus compañeros que lo consideran un cobarde

En octubre de 1945, el presidente estadounidense Harry S. Truman le condecoró con la Medalla de Honor por “su gran valentía y enorme determinación en condiciones dramáticas peligrosas”, y más de medio siglo después, Mel Gibson ha llevado esta increíble historia a la gran pantalla.

Mel Gibson en un momento del rodaje

Mel Gibson en un momento del rodaje

2 Premios Oscar y 6 nominaciones

Este espectacular drama bélico le ha valido los aplausos de la crítica, además de varias nominaciones a premios tan importantes como los Oscars: Premios a Mejor Montaje (John Gilbert) y mejor sonido (Robert Mackenzie, Kevin O’Connell y Peter Grace), con un total de 6 candidaturas. También en los Globos de Oro con 3 nominaciones o los Bafta con 5.

La pantalla explota, literalmente

La película de Gibson se divive en dos partes muy diferenciadas. En la primera, el director narra los problemas de Doss (Andrew Gardfield), con su tiránico padre (Hugo Weaving), su romance con su novia (Teresa Palmer) y su alistamiento en el ejército, donde su negativa a llevar armas le hizo enfrentarse a un Consejo de Guerra y al resto de militares. Una primera parte muy interesante porque plantea cuestiones morales y religiosas, aparte de mostrarnos la desigual lucha de Doss (David) contra el ejército de EE.UU. (Goliath).

Fotograma de la película 'hasta el último hombre' (2016) fotogramas.es

Pero lo mejor viene, sin duda, cuando Doss entra en combate. O mejor dicho, en el infierno. Su unidad tiene la orden de asaltar el acantilado de Maeda, en Okinawa (Japón), una escarpada colina de 122 metros en cuya cima les esperan nidos de metralletas, trampas y soldados japoneses escondidos en cada grieta. Desde que ponen un pie en esa colina la pantalla explota, literalmente, con algunas de las mejores secuencias de batalla que hemos visto en la historia del cine. Gibson describe a la perfección los horrores de la guerra metiéndonos en un infierno en el que la supervivencia parece imposible.

Parte de esa espectacularidad de la película se debe a que muchas de las explosiones son reales y transcurren a muy pocos metros de los especialistas, lo que han conseguido gracias a un nuevo dispositivo conocido como 'caja bomba',  que crea muchos escombros sin riesgo para los actores.

Andrew Garfield estudió durante años la vida de su personaje

El protagonista, Andrew Garfield, está perfecto en su papel de joven héroe. El actor logra dotar de humanidad a este personaje que es tan raro como humano, y cómicamente romántico. Garfield estudió durante años la vida de Doss, que falleció en 2006. Su nominación al Oscar a mejor actor está más que justificada.

Andrew Garfield, protagonista de 'Hasta el último hombre' (2016) GTRES / Ian West

Resumiendo, un estupendo drama bélico que, sorprendentemente, combina la espectacularidad de las batallas con un mensaje pacifista. En la presentación del título, Mel Gibson firmó estas palabras: “Desmond Doss aborrecía la violencia. Iba en contra de sus principios y sus convicciones religiosas, pero quería servir a su país como médico durante la Segunda Guerra Mundial. ¿Cómo se adentra una persona en el lugar más terrible de la tierra sin llevar un arma? Fue un cooperador en el sentido de que quería participar en la guerra, pero su objetivo nunca fue quitarle la vida a los enemigos, sino salvar la vida de los suyos. Me resultó todavía más apasionante por ser una historia real y pensé que podría llevarla al cine con mi lenguaje visual".