La poética y comprometida mirada de Miguel G. Morales, en Metrópolis

• El programa recorre la obra del cineasta y artista visual canario desde sus primeros pasos cinematográficos hasta sus recientes proyectos artísticos
• Temas recurrentes en su obra son la soledad, la memoria, el archivo fílmico y fotográfico y la historia no escrita de las Islas Canarias.
• Miguel G. Morales, se emite el martes 14 de noviembre, a las 00.55h en La 2

Retrato de Teresa Correa

Metrópolis dedica un programa monográfico al cineasta y artista visual Miguel G. Morales (Tenerife, 1978), fascinado por la arqueología de imágenes desde su infancia, coleccionista e investigador en el significado polisémico de la imagen.

Después de iniciarse con cortometrajes de ficción y a partir de su estancia en Cuba, donde estudió en la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños, su trabajo fue adquiriendo un carácter más documental, investigativo y ensayístico. Su ecléctica producción incluye obras relacionadas con el mundo del arte y los procesos artísticos, proyectos etnográficos, descontextualizaciones de material de archivo, y acciones de recuperación de la Memoria Histórica y de activismo medioambiental.

Miguel G Morales investigando un archivo fotográfico

En años recientes ha empezado a utilizar su archivo personal en reflexiones fotográficas y fílmicas en torno a la condición humana y la soledad, y ha trabajado con otros artistas en proyectos como Monumento a la oscuridad, realizado en colaboración con Eugenio Merino y dedicado a la memoria de las víctimas canarias de la represión franquista y expuesto, que se pudo ver, a lo largo del verano pasado, en el Espacio Cultural El Tanque de Tenerife.

El camino a la no-ficción

Es en Cuba donde Miguel G. Morales se encuentra con una historia real que le impulsa a realizar su primer cortometraje documental: El viejo y el lago (2001), retrato del último habitante de Siguanea, un pueblo inundado por la construcción, en 1957, de una presa hidroeléctrica en la sierra del Escambray, que aún vivía en solitario en una pequeña isla del embalse. En este proyecto trabaja por primera vez con material de archivo, componente fundamental de muchos de sus trabajos posteriores, como las realizadas como intervenciones audiovisuales en el ámbito museístico.

Taro, el eco de Manrique (Miguel G Morales)

En esta serie se inscriben, por ejemplo, las piezas Al silencio (2005) o Iter in semet ipsum (2009), que reflejan la personalidad y el proceso creativo de los artistas plásticos Cristino de Vera y José Dámaso, respectivamente. Su larga investigación en torno a la obra y el legado del artista y activista medioambiental César Manrique se inició con el documental Taro. EL Eco de Manrique (2012), coproducido por RTVE.

Mirando hacia dentro/observando desde fuera

Posteriormente, Miguel G. Morales empieza a utilizar su archivo personal en películas sumamente introspectivas y sentidas como retina (2014), que repasa su relación con la imagen en movimiento, y hombre que hace que duerme (2015), donde traslada a oníricas imágenes de Filipinas el duelo por la pérdida de una persona querida. En paralelo trabaja en una serie de carácter etnográfico en la isla de El Hierro, materializada, hasta el momento, en breves retratos fílmicos como Pozo negro (2017) o Juana (2016, en colaboración con Silvia Navarro Martín).

Hombre que hace que duerme (Miguel G Morales)

Reescribir la historia con material de archivo

Su documental experimental De los nombres de las cabras (2019, en colaboración con Silvia Navarro Martín) fue galardonado, en su estreno, con el Gran Premio Ciudad de Lisboa al Mejor Largometraje del Festival Indie Lisboa. A partir de entrevistas con viejos pastores recopiladas por el arqueólogo Luis Diego Cuscoy en sus recorridos por las últimas casas cueva de los habitantes originarios de las islas, la película explora los mitos y las construcciones ficcionadas de la historia oficial de Canarias, a la vez que reivindica la importancia de una mirada contemporánea crítica sobre el archivo.

Este cuchillo cogeré (Miguel G Morales)

También se nutren de material encontrado en archivos fílmicos y fotográficos trabajos como Este cuchillo cogeré (2019) pieza sobre el duelo en la mujer trabajadora de la Isla de Lanzarote; Huacal (2020), una videoinstalación sobre la clase trabajadora invisible del Siglo XIX y principios del Siglo XX que no entró en el relato oficial, que formó parte del proyecto multidisciplinar La mirada pasajera, una investigación sobre las primeras imágenes creadas sobre la isla de Gran Canaria y como éstas condicionaron la identidad de la isla, que se presentó, entre 2020 y 2021 en museos de Gran Canaria, Dakar y Madeira; o Ángel caído (2018) una pieza sobre los vestigios arquitectónicos de la dictadura española en Tenerife, incluida en la exposición colectiva de arte político En medio de su orgullo comisariada por Adonay Bermúdez.

Ángel caído (Miguel G Morales)

Proyectos recientes

En 2019, Miguel G. Morales rodó, en Cuba, el cortometraje de ficción Ekaterina (2021), con guion del escritor y poeta cubano Atilio Caballero y realizó Días deshojados (2019), un retrato intimista del artista José Herrera. En los últimos años ha colaborado también con artistas visuales de Canarias como Carmela García - Seres equívocos (2021), Teresa Correa - Rumor de jable (2021) o Acaymo S. Cuesta – El poder corrompe (2022), entre otras.

Monumento a la oscuridad (segunda fase) (Miguel G Morales)

En 2022 participó, junto a Eugenio Merino, en la XI Bienal de Lanzarote con el proyecto Monumento a la oscuridad (2022) sobre las personas asesinadas y hechas desaparecer en el mar durante el Golpe de Estado y Guerra Civil en Canarias, entre ellos el poeta Domingo López Torres. En 2023 este proyecto itineró al Espacio Cultural El Tanque de Tenerife, donde los artistas colaboraron con familiares de víctimas de la represión franquista en la creación de un políptico compuesto de sus retratos fotográficos.

Este mismo año también presentó, en el Centro de Arte de La Regenta, la pieza introspectiva Estemos solos juntos (2023), una “reflexión sobre su relación con la soledad a través de la mirada que busca archivos y la mirada que fotografía a gente solitaria”.

Estemos solos juntos (Miguel G Morales)