¿Por qué estornudamos? Y, ¿por qué no lo hacemos cuando estamos dormidos?

• El estornudo es un acto reflejo que se da porque algún elemento extraño irrita las fosas nasales
• La mejor forma de combatir el frío: consejos y curiosidades. ¿Por qué tenemos más ganas de hacer pis?

Lo que deberías saber de tus estornudos. ¿Por qué se producen?

Cada vez que se acerca el invierno (por el frío) e incluso la primavera (por el polen), hay una acción que adquiere mucho protagonismo y que compartimos toda la población: estornudar. Pero, ¿por qué estornudamos? ¿Cómo funciona? Lo descubrimos en Ahora o Nunca, el magacín de La 1 presentado por Mónica López.

Según han explicado detenidamente en el espacio de La 1 de RTVE: “los estornudos son actos reflejos en los que expulsamos aire por la nariz o la boca. Una respuesta involuntaria que, normalmente, se da porque algún elemento extraño ha irritado nuestras fosas nasales”.

¿Por qué no estornudamos al dormir?

Es entonces cuando el cerebro envía una orden de contracción que va desde el esófago hasta el esfínter, incluidos los párpados, por eso no podemos estornudar con los ojos abiertos. Tampoco estornudamos dormidos, porque los nervios involucrados en el proceso están descansando.

En cuanto al estornudo por un resfriado, es un reflejo que puede ayudar al cuerpo a expulsar los virus antes de que infecten otros tejidos. En este caso el estornudo aparece por unas pequeñas gotitas que están en la nariz y contienen, normalmente, el virus que causó la infección, por eso se recomienda taparse al estornudar y así evitar expandir el virus.

Mueve la cabeza hacía delante cuando estornudes

Varias fuentes señalan que es beneficioso mover la cabeza hacia delante al estornudar. El motivo, según aseguran, es que ayuda a expulsar las sustancias que nos molestan de una forma más sencilla.

¿Por qué decimos 'salud' o 'Jesús' al estornudar?

Esto se debe a una superstición que se remonta a griegos y romanos. Estos creían que los estornudos eran un mal augurio de los dioses. Para pedirles protección, estornudaban y decían: "¡salve!". Con la expansión del cristianismo, se cambió la expresión por "Jesús".

En cuanto a “salud” se utiliza desde una gran epidemia de peste ocurrida durante la Edad Media. Estornudar era uno de los síntomas y este término se utilizaba para desear buena salud.

Como curiosidad, según el libro Guinness de los Récords, el episodio de estornudos más largo de la Historia ocurrió en Inglaterra, una mujer llamada Donna Griffiths estornudó durante 978 días.