El tabú del suelo pélvico: "Tengo pacientes que llevan años con pérdidas y dolor"

• El 11,8 % de mujeres serán intervenidas por un deterioro de suelo pélvico o prolapso
• Las pérdidas de orina o el dolor son los síntomas más frecuentes
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El fisioterapeuta Rafael Vicetto ayuda a Rocío, su paciente, a ejercitar su suelo pélvico.

Muchas mujeres padecen problemas de suelo pélvico con la edad, tras un embarazo y la menopausia. Datos del Hospital 12 de Octubre señalan que el 11,8 % de mujeres serán intervenidas por un deterioro de suelo pélvico o prolapso, que consiste en el descenso de uno o más órganos pélvicos hacia el exterior, por la cavidad vaginal. Es una de las consecuencias de la disfunción de suelo pélvico, aunque no es la única, la incontinencia o el dolor en las relaciones y al hacer ejercicio son otras de las más comunes.

Embarazos

Rocío es una paciente habitual de la clínica de fisioterapia Vicetto. Desde que dio a luz hace 4 años a sus gemelas ha tenido problemas de suelo pélvico. En su caso, el dolor era persistente y, además, desarrolló problemas digestivos.

Reconoce que le costó dar con un especialista que le ayudara a mejorar. El primer fisioterapeuta que le atendió le hizo un mal diagnóstico y le pautó unos ejercicios que le empeoraron. En las consultas médicas tampoco lograba solventar su problema: "En el ginecólogo iba al síntoma. Si me dolían las relaciones me mandaba algo para lubricar. Realmente la raíz era más profunda", nos señala.

Rafael Vicetto, dueño de esta clínica madrileña nos explica que el bebé aumenta la presión en la zona del útero: “Si a esto le añadimos también que podemos encontrarnos con debilidad de la musculatura, es muy normal que aparezcan pérdidas de orina o dolor".

Las posibilidades de tener lesiones de suelo pélvico aumentan en función de lo intrusivo que sea el parto. Aunque incluso con cesárea pueden aparecer estos problemas. “Hay hormonas que hacen que los huesos se puedan modificar”, nos cuenta el doctor Daniel Martínez, ginecólogo en el Hospital Universitario de Torrejón.

Incontinencia y campañas

"Los síntomas por los que normalmente nuestros pacientes nos piden ayuda es porque se ríen, tosen y tienen pérdidas de orina. Y eso no es normal", nos explica Vicetto.

“"Nos piden ayuda es porque se ríen, tosen y tienen pérdidas de orina"“

La incontinencia es uno de los síntomas más habituales. Estudios de Estados Unidos señalan que, en 2050, el 50% de las mujeres mayores de 65 la sufrirán. Estas pérdidas suelen provocar problemas psicológicos y de autoestima.

La diabetes o la hipertensión agravan este problema y la menopausia, con la asociada atrofia fisiológica de los tejidos, también. Además, existe una relativa normalización social a la que contribuyen algunas campañas publicitarias. “Los anuncios de compresas para las pérdidas de orina han hecho que se normalice, con un poder de difusión muy grande", asegura el doctor Martínez.

Una realidad silenciada para los hombres

“En los hombres es un tabú”, sentencia Vicetto. No es infrecuente que también sufran problemas de suelo pélvico pero, al ser una dolencia asociada a mujeres, muchos no se atreven a hablarlo.

““En los hombres es un tabú”“

“A no ser que tenga una cirugía o síntomas muy importantes va a ser muy difícil que acuda", declara el fisioterapeuta, Se manifiesta, en muchas ocasiones con incontinencia, aunque también puede aparecer en forma de dificultad para orinar o para la erección.

Las cirugías de próstata suelen desembocar en problemas de suelo pélvico pero también la práctica de deportes de impacto y de compresión de la zona perianal.

Tratamientos

Existen tratamientos farmacológicos y quirúrgicos que solo se recomienda usar como último recurso. Vicetto asegura que con las primeras sesiones de fisioterapia, los pacientes comienzan a mejorar.

"En consulta ponemos a pacientes a saltar para ver cómo responden, también le podemos mandar vibradores y le recomendamos hacer los ejercicios de Kegel, que consiste en contraer la zona como si estuviéramos conteniendo la micción", son algunas de las recomendaciones que hace.

“"Si se ataja antes se puede solucionar y mejorar tu calidad de vida"“

Para Rocío este tratamiento fue fundamental para una vida sin dolores. Lamenta no haber comenzado antes a tratarse. Considera que las madres suelen centrarse en el cuidado de los hijos una vez dan a luz. Olvidándose de ellas mismas y su bienestar. Algo que ahora considera un error: "Si se ataja antes se puede solucionar y mejorar tu calidad de vida y la de la familia".