Lo que no sabías de los Beefeaters de Londres

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Un guardia asiste a un saludo con armas de fuego en la Torre de Londres REUTERS/ SARAH MEYSSONNIER

En ‘Saber y ganar’ nos gusta viajar por el mundo y descubrir nuevos destinos que visitar. Una de las ciudades que más aparecen en nuestras preguntas es Londres, la capital del Reino Unido, y en esta ocasión queremos centrar la atención en los Beefeaters. Estos icónicos guardianes esconden diversas peculiaridades que los hacen ser muy atractivos para todo turista. A continuación os contamos algunas de ellas.

1.Un trabajo para unos pocos elegidos

Los Beefeater son los vigilantes que controlan la Torre de Londres, un edificio construido por Guillermo el Conquistador en el año 1066, para proteger a la ciudad, junto al río Támesis, y que hoy alberga las joyas de la Corona. Además de controlar lo que ocurre en el edifico, también realizan visitas guiadas y participan en desfiles.

En la actualidad, hay 25 puestos de trabajo que están ocupados por estos servidores que trabajan un total de 36 horas a la semana. Su remuneración es de 30.000 libras esterlinas anuales, unos 34.000 euros. ¿Quién puede optar a este puesto? Aquellas personas que hayan estado al menos 22 años de servicio en las Fuerzas Armadas Británicas y que ostenten la medalla al servicio prolongado y a la buena conducta.

Salva de cañón desde el Puente de la Torre de Londres EFE/TOLGA AKMEN

2.Un origen algo truculento

¿Sabías que el verdadero nombre de los Beefeater es Yeomen? No obstante, el primero es el usado más comúnmente y la explicación es la siguiente: en el pasado, hace cientos de años, estos guardianes eran los encargados de probar la comida que iba destinada a los Reyes. Esta era la forma de asegurarse que los platos no habían sido envenenados. La palabra ‘beef’ significa ‘carne’ y ‘eater’ es ‘comedor’, es decir, los ‘comedores de carne’. De ahí su nomenclatura.

3.Siempre con fantasmas

Hay que recordar que las utilidades que ha tenido la Torre de Londres a lo largo de la historia son muchas. Comenzó como fortaleza para luego pasar a ser un palacio real. Luego se convirtió en un almacén donde guardar las provisiones y el arsenal en las épocas de crisis.

En los últimos años fue una prisión y un lugar donde ejecutar a los prisioneros. De esta última etapa nacen las leyendas urbanas acerca de los fantasmas que rondan la edificación. Se dice que Ana Bolena, que fue decapitada allí, se pasea por los pasillos de la torre, al igual que Thomas Beckett o la condesa de Salisbury. ¿Os atreveríais a pasar una noche rondando por la Torre de Londres?

Grabado que representa a Ana Bolena justo antes de su ejecución en la Torre de Londres por orden de su marido, el rey, en el siglo XVI Getty