Isabel la Católica: la Taylor Swift del siglo XV

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Isabel la Católica: la Taylor Swift del s. XV RTVE / The Pool

Si algo podemos asegurar a 20 de febrero de 2024 es que vivimos en el mundo de Taylor Swift. La cantante estadounidense, que empezó su andadura en la industria hace 18 años revolucionando la música country, lleva casi dos décadas demostrando que es uno de los nombres clave de nuestro tiempo.

Cantante, compositora, productora, actriz y personaje público, ha alcanzado el momento más dulce de su carrera tras casi dos décadas de recorrido: es la única artista (hombre o mujer) que ha conseguido alzarse con el Grammy a Mejor Álbum del Año hasta en 4 ocasiones, domina diariamente la lista de artistas más escuchados de Spotify y no hay premio, evento, concierto, viaje en jet privado o movimiento en redes que no genere una conversación social a su alrededor. Con 34 años, ha conseguido situarse en la cima de una industria que la ha visto nacer, tropezar, morir y resucitar de entre los muertos para reclamar un espacio que se ha ganado a pulso: el de ser la mejor.

Camaleónica, capaz de controlar su imagen y narrativa a su antojo, Taylor Swift tiene muchas cosas en común con uno de los rostros más importantes de la historia de España: el de Isabel I de Castilla, que este viernes 23 compite por el segundo hueco de finalista en 'El mejor de la historia'. A continuación, exploramos seis aspectos que nos hacen pensar en la monarca como la Taylor Swift del siglo XV.

Construyó un imperio

Giras, conciertos, ventas de disco, escuchas, bandas sonoras, películas, publicidades, royalties y propiedades repartidas entre Inglaterra y Estados Unidos forman parte del imperio que Taylor Swift ha logrado construir con los años, convirtiéndose en una de las mujeres más ricas del mundo (se calcula que en 2023 su patrimonio superó los 1100 millones de dólares).

Por su parte, hay tres acontecimientos en el reinado de Isabel la Católica que contribuyeron a cimentar lo que en los siglos venideros se conocería como el Imperio Español. El primero fue la unión matrimonial con Fernando de Aragón, con la que se convertiría en reina consorte del territorio (además de ser reina de Castilla). El segundo fue el descubrimiento de América tras la firma de las Capitulaciones de Santa Fe (los documentos donde quedan reflejadas las condiciones de la primera expedición de Colón a Las Indias) y la tercera, la toma del reino de Granada. La acumulación de poder durante su reinado fue tal que la han hecho merecedora de un puesto entre las 50 personas más importantes de nuestro país y, como comentamos, sentaron las bases del Imperio Español durante los s. XVI y XVII.

Mueve masas

Si únicamente atendemos a las cifras que está manejando la cantante con su última gira, The Eras Tour, Taylor Swift ha demostrado batir todo tipo de récords: hasta 14 millones de personas intentaron conseguir entradas el 17 de noviembre de 2022 para asistir a una de las paradas de la gira en Estados Unidos, paralizando los servidores y la página web de Ticketmaster y originando una polémica con la promotora que se zanjaría con una disculpa pública. Al final del día, 2,4 millones de personas consiguieron su entrada.

Es, además, la primera gira de la historia que supera los 1.000 millones de dólares de recaudación, suponiendo un ingreso no solo para los bolsillos de la cantante y su equipo sino una auténtica inyección de dinero en la economía de las ciudades por donde pasa (los expertos han calculado que un fan de Taylor Swift se gasta de media hasta 1000 dólares entre su asistencia al concierto, la compra de merchandising, las dietas y el alojamiento). No hay estadio que se le resista, ciudad que no le rinda homenaje o reto capaz de pararla.

Como Taylor Swift, Isabel la Católica fue responsable de grandes movimientos de masas durante su reinado. Primero porque se produjo la unión de dos grandes territorios en la península (el Reino de Castilla y el Reino de Aragón), pero también por todo el movimiento que supuso la evangelización de África y el Nuevo Mundo tras el descubrimiento del nuevo territorio (Isabel la Católica se preocupó, además, por prohibir la esclavitud de "los indios" tras presenciar el primer desembarco de dos de las naves procedentes de Las Indias en Sevilla, les consideraba sus vasallos). Su reinado tuvo, no obstante, un lado oscuro, albergando uno de los acontecimientos más lamentables de nuestra historia: la expulsión de los judíos que decidieron no convertirse.

Marcó tendencias

Tanto en las redes sociales como en los medios especializados, en los últimos años se ha hablado de Taylor Swift haciendo alusión a ella como la propia "industria musical", y es que la solista es imparable en cuanto a marcar tendencias se refiere. El ejemplo más claro: a la hora de hablar de "eras musicales" cada vez que se saca un nuevo disco. Es el pan de cada día ver cómo artistas hacen un archivado completo de sus publicaciones en redes sociales y se cambian la foto de perfil para anunciar un nuevo proyecto. Sin embargo, hace siete años ella fue pionera en este tipo de movimientos cuando empezó a promocionar Reputation, el álbum con el que volvió a la esfera pública después de un año completamente desaparecida.

Una marcadora de tendencias nata también fue Isabel la Católica, y es que fue durante el reinado de los Reyes Católicos cuando se instauró en todo el Reino de Castilla el negro como el color de luto oficial, que hasta el siglo XV estaba asociado al blanco. Una tradición y unas costumbres que se mantienen hasta nuestros días, y un luto que, por cierto, ella llevó a raja tabla durante sus últimos años de vida, tras asistir a la muerte de su madre Isabel, la muerte de único hijo varón, la muerte de su primogénita y su nieto Miguel.

No solo marcó tendencias en las costumbres y la moda de la época: también en el arte. Al periodo gótico durante el reinado de los Reyes Católicos se conoce como gótico isabelino, y marca un periodo en la Historia del Arte comprendido entre el final de este periodo y el inicio del Renacimiento en la península. La reina Isabel trasladó a la arquitectura y el arte la rectitud y austeridad que caracterizaron su reinado.

Traspasó fronteras

Si con su disco debut Taylor Swift ya conquistó los corazones de sus fans en Estados Unidos, con su segundo disco y el lanzamiento de Love Story en 2008 dio el salto al panorama internacional. Desde entonces, sus números no han dejado de crecer y no hay proyecto de la cantante que fracase. 1989 es uno de los discos mejor valorados y más vendidos de este siglo, y con la llegada de Midnights, su último álbum, batió todos los récords de escuchas y ventas durante su primera semana de lanzamiento.

Como con la de Tennessee, no existieron barreras para Isabel l: no había persona en la península que no conociese a los Reyes Católicos y, después de financiar la primera expedición de Colón con la que se terminaría descubriendo América, pronto se convirtió en uno de los nombres más reconocidos en la Historia Universal.

Más famosa que su pareja

Como figura pública, uno de los asuntos que más ha interesado a los tabloides norteamericanos ha sido la vida personal de Taylor Swift. Llegando a calificarla durante años como “monógama en serie” (por su aparente incapacidad de mantener a sus parejas durante más de tres meses), hay multitud de nombres que a lo largo de los años se han asociado con su figura. 

Harry Styles, Jake Gyllenhaal, Joe Jonas, Taylor Lautner, Joe Alwyn, Tom Hydelston y Travis Kelce han sido algunos de los hombres que han mantenido una relación sentimental con la cantante, pero si hay algo que todos ellos tienen en común es que siempre han tenido menor relevancia mediática que ella.

Seis siglos atrás, Isabel I de Castilla destacó como nadie dentro de la política del Reino de Castilla y como reina consorte del Reino de Aragón. Tanto ella como Fernando el Católico han pasado a la historia como grandes reyes, pero Isabel I de Castilla marcó un antes y después en cuanto al gobierno de su territorio se refiere. Antes de su llegada al trono, cuando una mujer heredaba la Corona era solo para que gobernase su marido. Ella, sin embargo, tomo las riendas de Castilla y se involucró por completo, destacando dentro del ámbito militar, político, social, económico y religioso.

Astucia, estrategia y control de la situación

Reina por excelencia del marketing, si hay una cosa que caracteriza a Taylor Swift es el control sobre su narrativa e imagen. La estadounidense ha sido capaz de reinventarse con cada era musical que ha presentado y cada cambio que ha atravesado la industria: desde el paso de la venta física a la venta digital hasta la llegada de la era del streaming, sabiendo adaptarse y destacar año tras año.

Una reinvención que también ha pasado por el cambio en su música: del country al pop y del pop a la música alternativa, no hay género que se le resista. Siempre pendiente de la imagen que proyecta, es consciente de lo que busca provocar y lo que quiere reflejar con cada trabajo que hace.

En el caso de Isabel de Castilla, nos encontramos con una mujer que siempre tuvo claro lo que quería, que peleó por el trono con uñas y dientes (hay toda una corriente de historiadores que hablan de su proclamación como reina como un auténtico golpe de Estado en Segovia frente a Juana "la Beltraneja", legitimándose en el Tratado de los Toros de Guisando - de hecho, al inicio de su reinado se inició la guerra de Sucesión castellana entre sus partidarios y los de su sobrina-) y logró poner de su lado a los poderes más importantes del momento: ganándose el favor de la Iglesia y supervisando todo tipo de campañas militares, como la ya mencionada toma del Reino de Granada.

¿Conseguirá Isabel I de Castilla convertirse en la ganadora del segundo programa de 'El mejor de la historia'? Descúbrelo el próximo viernes en directo. ¡Te esperamos!