Nos adentramos en la novela de Pilar Adón, 'De bestias y aves'
- ¿Dónde está Betania?
- La gran mayoría de los personajes de sus novelas son mujeres, ¿por qué?
Pilar Adón visita Mañana más en lo que promete ser una amistosa charla sobre su libro De bestias y aves, con el que ha conseguido el Premio Nacional de Narrativa. Pero finalmente se convierte en un intento más para que desvele donde está Betania en el mundo real. Sonsaquémosla.
Todos hemos soñado con irnos, desaparecer, dejar todo atrás y vivir alejados de estrés, prisas y agobios. Pilar Adón también lo ha hecho pero ella tiene la ventaja de que puede escribirlo, bueno, todos podemos hacerlo pero no como ella.
Su último libro, De bestias a aves, cuenta la historia de una mujer que tras el verano decide escapar de la civilización y conduce durante horas pero al quedarse sin gasolina y no tener móvil, llega a Betania. Este lugar es una casa completamente aislada donde sólo viven mujeres. Coro, la protagonista de la historia, no quiere permanecer en ese sitio pero se da cuenta de lo que significa sentirse parte de algo.
Pero si no está a gusto, ¿por qué no se va de allí?
"Lo que le ocurre es que sin que ella lo sepa, necesita un lugar en el que sentirse reconocida, yo creo que es algo que nos pasa a todos. Necesita saber que pertenece a un lugar y no lo sabe, no lo controla. Y finalmente, llegando a Betania, de alguna manera, va a descubrirlo. Lo que pasa es que ella no es consciente. Son las mujeres que viven en esta casa las que más o menos son conscientes de eso", explica la autora sobre la protagonista de su libro.
Betania, ¿existe de verdad?
"Betania existe, claro. No es el lugar al que yo me retiro normalmente, pero sí que existe y lo conozco bien", y la propia autora añade: "Betania es el lugar bíblico, como bien dices, donde Jesús resucitó a Lázaro. Entonces esto tiene un valor simbólico muy importante en la novela porque también, sin desvelar absolutamente nada, hay una especie de resurrección simbólica muy evidente y que está muy relacionada con esto que hablábamos de la pertenencia", comenta Pilar confirmando que hay una Betania real aunque no sea ese su verdadero nombre.
¿Por qué todos tus personajes son mujeres?
"El hecho de que sean todas mujeres, Coro como protagonista, las mujeres que viven en Betania y que en cierto modo estaban esperándola aunque Coro no lo supiera, es algo que a mí me sale de manera natural. Pero tan natural que hace muchos años estaba promocionando un libro de relatos que se titulaba Viajes inocentes y en una entrevista una periodista me preguntó que por qué todos los personajes eran mujeres y ¡caramba! Una siempre intenta llevar las respuestas más o menos preparadas o una especie de argumentario un poco a priori. Bueno, me pilló totalmente porque no me había dado cuenta", narra Adón sobre sus personajes y la razón de que sean mujeres.
¿Qué buscabas con el personaje de Coro?
Pilar nos cuenta que lo que ella quería era que el lector empatizara con Coro. "Yo creo que se van generando ciertos vínculos emocionales con ella. Cada uno se lo va llevando, insisto, por su terreno, pero hay muchos factores y cada lector se va a ir agarrando a uno y por eso va empatizando con ella. Y entonces, claro, estar de repente perdida, sin gasolina y sin móvil, en un lugar absolutamente dominado por la naturaleza y en una casa de la que en principio te puedes ir porque no hay violencia. En ningún momento hay violencia ni verbal ni física. Pero hay algo que ciertamente se lo impide. Insisto en que genera muchos motivos para poder empatizar y que nos veamos muy ligadas a Coro", comenta la escritora madrileña sobre la empatía que genera su protagonista.
¿Por qué la escapada de Coro es al campo?
"Me gustan mucho las comunidades utópicas. Ya en varias novelas y relatos antes de esta, yo ya hablaba de comunidades utópicas y la utopía siempre está vinculada a la naturaleza. La distopía siempre está más vinculada a la ciudad, a regímenes dictatoriales de los que la gente quiere huir. Pero la utopía, por definición, es un lugar al que queremos ir, aunque luego fracasen prácticamente todas, por no decir todas", explica la autora y añade que tiene una fuerte vinculación a este entorno por su padre, a quien considera un "hombre de campo" y a quien dedica esta novela.
La mujer de la portada, ¿eres tú?
"Ese rostro me acompañó muy breve durante la escritura de la novela. Pero no tiene nada que ver, no es ninguna protagonista. Tampoco soy yo, que hay quien me lo ha preguntado. Es simplemente un rostro que yo creo que genera ya desde el principio cierta inquietud y sensación de estar perdida", comenta la ganadora del Premio Ojo Crítico 2005.
De bestias y aves es una novela llena de dualidades, empezando por el título. Otra división la vemos entre lo que hay dentro de Betania y lo que queda fuera. Un enfrentamiento entre un individuo, Coro, y un grupo que en este caso serían las mujeres de la casa. Otra dualidad la vemos en la forma involuntaria de llegar allí y la voluntad de no irse. Muchos de estos enfrentamientos nos llevan, en cierta manera, a un punto común que es el sentimiento de pertenencia, el cual Pilar añoró en su juventud.
Pilar cuenta que ella escribe para que el lector tenga una experiencia desde cero, que se adentre en la historia a la vez que los personajes. La lectura es una actividad subjetiva y que cada uno debe interpretar a su manera o al menos eso piensa la autora que ante todo, se considera lectora.
Quizá no hayamos conseguido saber dónde está la verdadera Betania o quizá Pilar haya jugado con nosotros. ¿Seremos el comienzo de su próximo libro?