¡Sorpresa en 'Bake Off'! Nadie esperaba este desenlace en la expulsión. ¡Programa 9 completo!

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Bake off: Famosos al horno - Programa 9

Una semana más, la carpa más dulce de la televisión de 'Bake Off: Famosos al horno', nos regaló momentos inolvidables. Con solo seis concursantes, el final del programa se acerca y la tensión y los nervios se sienten en el ambiente. Tan solo tres de ellos lograrán llegar a la gran final, donde uno será proclamado como el mejor pastelero o pastelera y recibirá un premio de 100.000 euros que donará a la ONG de su elección. Los famosos, más competitivos que nunca, comenzaron las elaboraciones de la noche. 

Primera prueba de la noche: tarta armada en equipo

El primer desafío de la noche llegó con la prueba de autor. De la misma manera que una receta necesita de ingredientes variados, este programa brilla gracias a la aportación única de cada concursante. Tal y como explicó Paco Roncero, unir fuerzas sería la única manera de conseguir algo tan especial como lo que tenían debajo de la campana: una tarta de seis porciones con el mismo tamaño y la misma altura. El jurado especificó que para poder formar esa tarta tenían que trabajar en dos equipos de tres personas cada uno. Cada miembro del equipo tenía que hacer una tarta de diferentes sabores y distintas decoraciones. Cuando estuviera terminada, debían cortar dos porciones, las cuales unirían como si se tratara de de un puzzle, con las del resto del equipo hasta formar la tarta. Para superar la prueba, tenían que coordinarse muy bien para decidir qué sabor iba a hacer cada uno y cómo la iban a formar. Además, les pidieron que hubiera contraste y un poquito de magia. A estas alturas del programa es muy importante arriesgar y sorprender en cada una de las creaciones. En esta ocasión sus postres iban a ser juzgados de forma individual y por el equipo y contaban con una hora para su elaboración.

Imagen de Ana Boyer en 'Bake Off: Famosos al horno'

Para hacer los equipos, la ganadora del delantal estrella del programa anterior, Alba Carrillo, lideró uno de ellos y eligió quién sería el capitán del otro, que en esta ocasión fue Patxi Salinas. El equipo de Alba, denominado como ‘Parchís’ estuvo formado por Ana Boyer y Blas Cantó. La cuadrilla de Patxi, con un tono de humor, adoptó el nombre de ‘Restos de famosos’ que contó con la participación de Pablo Puyol y Rocío Carrasco.

El colorido equipo ‘Parchís’ hizo una tarta llamada ‘Dream Team’ en la que Alba aportó dos porciones con relleno de puré de mango y curry. Blas otras dos con tomillo, nueces y miel. Ana completó el conjunto con las suyas rellenas de frambuesas, mermelada de frambuesas y un refrescante toque de menta. 

El equipo ‘Restos de famosos’, armó su tarta apodada como ‘La generosa’ con dos piezas de lulos frescos, mermelada de melocotón y café, aportadas por Rocío. Dos trozos con bizcocho de cacao, trufas y nubes, de la mano de Patxi. Las dos últimas partes las hizo Pablo con una mermelada de moras, arándanos, vainilla y ralladura de limón.

Después de una lucha muy competitiva, los famosos terminaron sus tartas ‘armadas’. En general, las creaciones de ambos equipos no lograron impresionar al jurado, que consideraron que no habían hecho bien los rellenos, los bizcochos y que habían vuelto a hacer algo tan básico como la nata montada. Además, Damián Betular expresó su decepción: ‘Si esto fuera una prueba única, están para irse los seis. Hay un empate, pero es un empate malo, malísimo.’ Los concursantes, que inicialmente lo tomaron con humor, se dieron cuenta de que no habían dado lo mejor de sí mismos y que necesitaban esforzarse más en las siguientes pruebas para poder remontar . 

Segunda prueba de la noche: viaje al pasado

Tras una primera prueba no muy exitosa, el jurado decidió aplicar una penalización en el segundo reto de la noche: los concursantes no podían utilizar los electrodomésticos de cocina. Esta sanción también guardaba relación con la época a la que pertenecía el desafío. 

Esta vez la prueba técnica fue propuesta por la querida jueza Eva Arguiñano, que invitó a los concursantes a hacer un viaje al pasado: ‘Porque muchas veces conviene mirar al pasado para saber lo que tenemos en el presente. Hay cosas que se han perdido, como aprendernos los números de teléfono de memoria o los nombres de nuestros vecinos. No hace tanto nuestras abuelas iban a los ríos a limpiar la ropa.’ Damián Betular añadió a estas palabras: ‘Tampoco podían calentar algo rápido en el microondas o usar la batidora eléctrica’. Por lo tanto, para superar esta prueba con éxito, los famosos tuvieron que hacer una receta que pertenecía al siglo XVIII con los materiales propios de esa época, es decir, no podían utilizar ninguno de los electrodomésticos a los que estaban acostumbrados, exceptuando el horno. 

Como es habitual en la prueba técnica, a los concursantes se les encomendó la tarea de preparar una réplica exacta de una tarta de castañas, elaborada con base de harina de almendras, pasta de castañas y azúcar. Además, tenían que hacer un merengue a mano que debía estar flambeado. 

El jurado, tras su cata a ciegas, determinó que en esta prueba los concursantes se habían superado, logrando crear una tarta como la propuesta inicialmente. Aunque esta vez no hubo ranking, quisieron destacar la tarta elaborada por Patxi Salinas, quien logró darle el punto perfecto al merengue.

Tercera prueba: pintores, ¡a sus pasteles!

En la tercera y última prueba de la noche, los famosos regresaron al presente para realizar la prueba fantasía, relacionada con la pintura y el arte. Como invitada de la noche, la carpa de ‘Bake Off’ dio la dulce bienvenida a Topacio Fresh, cantante, actriz y propietaria de una de las galerías de arte más afamadas de España.

Imagen de el jurado de 'Bake Off: Famosos al horno' junto a Topacio Fresh

Siguiendo las indicaciones del jurado, los concursantes tuvieron que crear en dos horas una tarta inspirada en su pintor o cuadro favorito. La elaboración debía incluir tres capas de bizcocho y dos tipos de relleno distintos. Aunque especificaron que la decoración era de libre elección, los jueces les animaron a que jugaran con los colores y texturas. 

Esta prueba desncadenó creaciones tan originales como la de Pablo Puyol, que se arriesgó con una tarta inspirada en el surrealismo propio del pintor Salvador Dalí y que apodó como ‘El tiempo en Bake Off se derrite’. Rocío Carrasco homenajeó al cuadro ‘Guernica’ de Picasso, con una tarta elaborada con un bizcocho de hierbas provenzales, ganache de queso blanco y topping de membrillo y nueces. 

Antes de comenzar la última cata, Topacio Fresh abandonó la carpa diciendo una emotivas palabras: ‘El arte nos hace más felices y más bellos así que, siempre vivid rodeados de arte.’ 

Ya terminada la degustación de las seis tartas en la galería de ‘Bake Off’, los miembros del jurado determinaron que la mejor había sido la de Blas Cantó. Con su tarta apodada ‘No seamos tan cuadriculados’ inspirada en el arte del pintor Piet Mondrian, el cantante consiguió por segunda vez el delantal estrella. Ana Boyer fue la segunda mejor valorada.

Imagen de Blas Cantó en 'Bake Off: Famosos al horno'

Para la sorpresa de todos, en esta ocasión no hubo expulsión, pero los miembros del jurado les aconsejaron que no se relajaran y que dieran el máximo de ellos mismos. Cada vez queda menos para conocer quién será el ganador o ganadora del título de mejor pastelero de España. 

¡No te pierdas el próximo episodio de 'Bake Off'!