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'Te crío mucho': Julia Varela y Armando Bastida diseñan un manual de crianza moderna

  • ¿Estamos educando bien a nuestros hijos?
  • El videopodcast se puede ver y escuchar en RTVE Play y RTVE Audio

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La presencia en la educación de nuestros hijos, los límites que ponemos o la forma de hablar pueden ser claves.
La presencia en la educación de nuestros hijos, los límites que ponemos o la forma de hablar pueden ser claves.

¿Estamos educando bien a nuestros hijos? ¿Qué consejos podemos seguir? Si te haces a menudo estas preguntas no te preocupes, ya que Te crío mucho es el videopodcast en el que Julia Varela reflexiona sobre la forma de criar y nos da consejos con la ayuda de colaboradores expertos.

Mañana más - Julia Varela y Armando Bastida nos presentan 'Te crío mucho' - escuchar ahora

Mañana Más ha recibido a Julia Varela y Armando Bastida, colaborador de su programa y enfermero en pediatría, para hablar del podcast que puedes ver y escuchar en RTVE Play y RTVE Audio. Te crío mucho es un producto transmedia que se puede consumir en distintos formatos pero con el mismo objetivo en cada uno de ellos, criar.

Nunca nadie nos ha enseñado a ser padres, a tratar a nuestros hijos ni a cómo educarlos. Aunque las preocupaciones de los padres se parecen mucho. ¿Quién no se ha desvelado por la noche para asegurarse simplemente de que su bebé respira? En el momento en que nace nuestro hijo, nacen muchas cosas con él, entre ellas las preocupaciones.

La crianza debe ser respetuosa, en un sentido bidireccional. Igual que no nos comportamos mal cuando alguien nos dice algo que no nos gusta o no gritamos a gente por estar en desacuerdo con ellos, debemos enseñar a los niños a cómo deben tratar a los demás para que así, entiendan también como deben ser tratados.

La educación requiere presencia

En esta entrevista nos queda claro lo mucho que han aprendido tanto Julia como Armando con este programa. "Armando es el vecino que quisieras tener, si eres madre primeriza o padre primerizo, para consultarle cualquier cosa. Y en Te crío mucho has dicho muchas cosas muy interesantes pero hay una que con la que yo me quedé. Cuando resumíamos un poco el intentar ser padres o inculcar hábitos saludables y es el tema de la crianza consciente, de estar de forma consciente, de estar ahí cuando educas a tus hijos, porque muchas veces estamos y no estamos", explica Julia sobre un aprendizaje que se lleva del programa.

Una cosa en la que se enfoca Armando es en hacer entender a los padres que para educar hace falta estar, pero estar de verdad. Hay que prestar toda nuestra atención y no estar pendientes del móvil u otras cosas que desvíen nuestro foco. Los hijos no te van a decir "jo, es que no estás por mí", porque ellos no tienen con qué comparar ni entienden qué es aquello que echan en falta. Pero sí que sienten esa carencia. Y todo esto desemboca en un mal comportamiento, en peleas con otros niños y demás. Una frase que nos deja Armando y es muy clarificadora es la siguiente: "un niño que da problemas es un niño que tiene problemas".

Cambios en la forma de dialogar con nuestros hijos

No es igual la forma que tenemos de educar ahora a la que tuvieron nuestros padres con nosotros. Es algo normal, simple y es que las épocas son distintas y este mundo avanza a pasos agigantados. Nuestros padres nos hablaban de una forma y ahora hablamos de otra a nuestros hijos, ni mejor ni peor, solo diferente. "La crianza no nos la hemos inventado los padres millenial, ni mucho menos. Nuestros padres nos criaban también para ser los mejores hijos y felices. Pero es verdad que ha cambiado ese diálogo con los hijos. Estamos ya en un mundo de pantallas, entonces también necesitamos más información y más orientación", explica Julia sobre el sentimiento de los padres en los tiempos actuales.

Las palabras tienen unos usos y debemos aprender a identificar cuando la hemos usado mucho y debemos cambiar la palabra para así cambiar también el resultado. Esto se ve de forma clara con la palabra "no", todos hemos visto a padres decirle a los hijos "No hagas esto" y que no genere ninguna reacción en el niño. Hemos gastado esa palabra tanto que el niño no recibe ningún estímulo al escucharla. Un cambio que propone Armando es no decirle tanto lo que no puede hacer y probar con lo que sí puede hacer. "En esta tienda no podemos tocar las cosas, pero podemos jugar a que somos espías y que no nos ven los demás", ejemplifica el enfermero. Cuando alguien nos dice "no pienses en un elefante rosa", pensamos en un elefante rosa. ¿O es que tú, que estás leyendo esto, no lo estás haciendo ahora?

Otra práctica que se suele llevar a cabo es quitar la atención del niño cuando llora o se porta mal porque pensamos que si no le damos la atención que busca, se le pasará la "rabieta". Pero no debemos hacerlo. Cuando los niños se comportan mal o buscan atención de una manera negativa es porque previamente lo han intentado de una manera positiva y no han obtenido el resultado que querían. Por tanto, los niño "piensan que es mejor tener a un padre gritándote que tener un padre que no te hace caso". Otra frase con la que Armando nos refleja ello es: "quiéreme cuando menos lo merezca porque será cuando más lo necesite".

Saber poner límites en la educación de los hijos

En la crianza, como en la vida, es importante saber poner límites sobre qué hacer, cómo hacerlo, cuándo hacerlo...

No vale eso de "cuando venga mamá" o "cuando venga papá" porque lo único que se consigue es delegar los límites en otra persona y no enseñarte a reaccionar ante ello cuando estés solo. Y si estás jugando a algo con tu hijo es importante saber decir basta, "no quiero jugar más", "es hora de parar", en definitiva, saber poner límites.

Algo que cada vez es más usual entre padres es sustituir estos límites por otro estímulo. Imaginemos que estás en una cafetería con tus hijos y ya has llegado a ese punto de "clímax de tensión" y en vez de limitar a tu hijo, le das una pantalla para que se distraiga. Esto hace que el niño no entienda con claridad qué uso se le deben dar a las pantallas y los dispositivos. ¿Esto se puede evitar? Se puede y se debe. Julia nos da un truco: "lo que yo haría es salir de casa con el bolso lleno de juguetes, libretas, colores, etc...". Es decir, generar un estímulo en ellos que no tenga que ver con pantallas ni "maquinitas" y para eso, Julia nos aconseja tener también en casa un espacio que sea completamente libre de dispositivos.

Otro factor importante a tener en cuenta con la pantallas es el uso que le damos al móvil delante de nuestros hijos. Un uso excesivo delante de ellos nos puede hacer parecer "ausentes" y ya hemos explicado lo peligroso que es eso para la educación de nuestros pequeños.

Julia nos define lo que es su programa: "Te crío mucho es un manual de crianza moderna pero sin despreciar todo lo que nuestros padres y madres nos han enseñado. Es verdad que venimos, sobre todo, de una crianza de autoridad pero nuestros padres querían criarnos lo mejor posible".