'Los días que vendrán', anatomía de un embarazo: los 9 meses reales (o no) de David Verdaguer y María Rodríguez

• Carlos Marqués-Marcet dirigió a la pareja durante los nueve meses del embarazo real
• Los días que vendrán, ya disponible en RTVE Play
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María Rodríguez Soto y David Verdaguer, pareja en la realidad y en la ficción

Lluís y Vir están en la cocina, esperando nerviosos durante tres minutos para saber el resultado del predictor. "Sé que será que no", dice él. "Muy bien", dice ella. Es Lluís quien mira el test de embarazo y quien, con una gran carcajada, anuncia la noticia. "Qué quieres hacer", dice Lluís. "No lo sé, no podemos tener un hijo ahora, dice Vir. Es entonces cuando surgen las dudas y se toma, quizá demasiado rápido, una decisión. Desde ese instante hasta el final de la película transcurren nueve meses, que el espectador sigue día a día, asistiendo a los cambios que tiene la pareja, que pasan de la felicidad a la tristeza, de la alegría al dolor, de los gritos y las peleas a las risas y los abrazos. Pero qué estamos viendo, ¿realidad o ficción?

¿Es un documental o una película?

Sin duda, una película, la tercera que dirigió Carlos Marqués-Marcet y con la que cierra una trilogía emocional basada en la paternidad/maternidad. Tras 10.000 Km y Tierra firme, grabó la intimidad de David Verdaguer y María Rodríguez Soto, pareja en la vida real y en la ficción en el momento en el que se rodó Los días que vendrán. "Siempre tuvimos claro que estábamos actuando y Carlos siempre tuvo claro que era una película", contaba el actor a RTVE, consciente siempre de no querer pasar las líneas rojas. "Es un juego. La película juega con la ficción todo el rato, porque no todo lo que se ve es real".

'Los días que vendrán': Vir y Lluís ven como sus vidas pegan un giro radical

Una película 'casera'

Para todo el equipo, esta es una Home movie, pero en el sentido literal: se hizo en la casa del director, convertida en set de rodaje. Pero hay más. María guardaba en casa un vídeo VHS del día de su nacimiento, que vio cuando tenía cinco años. Un material sensible que no quiso utilizar para su personaje para distanciarse de su propia vida. "Pero cuando estaba de siete meses se lo enseñé a Carlos y se volvió loco", contaba en RTVE. "Para mí fue vital. Yo tenía el guion, pero no el espíritu de la película. Cuando vi el vídeo supe que lo tenía", decía Carlos.

Hay muchos momentos en los que realidad y ficción se entrelazan, y casi la mitad de la película se rodó después del parto. María tuvo a su bebé, Lupe, en 2017 y el parto de la película se rodó en mayo de 2018. Es un parto real, por Cesárea. Encontraron a una familia que les permitió grabar y contaron con la ayuda de la doctora que les contó cómo iba a ser. "El parto no es un plano secuencia, claro, hay dos cortes, y esto nos permite, de nuevo, pasar de la realidad a la ficción".

Un final que es un principio

Los días que vendrán termina con un precioso plano de ocho minutos, en los que Vir da el pecho a su hija, Zoe. "No fui consciente de la exposición hasta que vi la película, y no sentí pudor. Todo el rodaje fue un proceso precioso y muy emotivo. Al final tengo un recuerdo de mi cuerpo cambiando y que mi hija pueda verlo cuando sea mayor, como yo pude ver mi nacimiento", contaba María en el programa Versión Española, de RTVE, fue un programa muy especial, en el que los dos actores y el director hablan entre ellos sin la presencia de Cayetana Guillén Cuervo.

Un título descartado

Carlos Marqués-Marcet quiso que su película se titulara La gent es mor (La gente se muere), quizá influido por la muerte de una amiga de María. Pero tuvo miedo de que este título espantara a la gente y optó por Els dies que vindran (Los días que vendrán), extraido de la canción 'Em dius que el nostre amor', de Toti Soler. Este es uno de los temas que aparece en la película, que tiene una peculiar banda sonora: tan pronto escuchamos las rumbas de Tomasa del Real y El Noy, el rock fusión de La Kinky Beat y el electro chill de Laurent Thierry-Mieg.

Es preciso destacar la fotografía, firmada por Álex García, que lo tuvo complicado para trabajar entre las cuatro paredes de la casa. "Menudo curro. Parece que todo es improvisado, pero al contrario, no lo es. Era impresionante ver cómo bailaba Álex con nosotros", contaba María, una actriz forjada en el teatro que tuvo que cambiar su forma de expresarse para hacer cine, adoptando un lenguaje corporal diferente.

Carlos Marqués-Marcet rodó 'Los días que vendrán' en Barcelona

Una lluvia de premios

La cinta tuvo una excelente acogida, tanto en salas como en el Festival de Cine de Málaga, donde logró la Biznaga de Oro a mejor película y la Biznaga de Plata a la mejor dirección. En la XII gala de los Premios Gaudí se hizo con los premios a mejor película, mejor actriz principal y mejor montaje. Fuera, también tuvo un buen recorrido y una buena cosecha. Se estrenó en Róterdam y en el Festival Cinespaña que se celebra en Toulouse ganó en tres categorías, con premios para los dos protagonistas y el director. Carlos Marqués-Marcet recogió aplausos por su trabajo y por su sensibilidad a la hora de capturar todo el proceso de la maternidad. "Es el director más femenino de nuestro cine", dijo Juan Carlos Rivas, de Días de cine.