Así empezaron María Escoté y Lorenzo Caprile en el mundo de la moda
Por primera vez en la historia de Maestros de la Costura, María Escoté y Lorenzo Caprile han ejercido de jefes de taller en una prueba por equipos del talent. Además de liderar los talleres, los jueces han explicado a los aprendices cómo se produjo su primera incursión en el mundo de la moda y la costura.
“¡Qué pasada María, aquí metiéndonos caña. Me encanta verte así”, le ha dicho Yichan a María. Acto seguido, la aprendiz se ha interesado por conocer cómo fueron los comienzos de María. La diseñadora ha recordado que el arte ha estado siempre muy presente en su vida. Su padre era pintor y su madre era zurcidora. “Por mi casa han pasado las mejores prendas de sastres y modistas de todo Barcelona y desde muy pequeña yo quería ser pintora porque me padre era pintor. Yo dibujaba y ella cosía”, ha señalado María. Dado a que su madre trabajaba de lunes a sábado, decidieron establecer el lunes por la tarde como el rato que se dedicaban la una a la otra. Esos lunes por las tardes, confeccionaban entre las dos vestidos para las muñecas de María. Cuando María creció, a los 18 años, se adentró en el taller de su tía y, según ha explicado, allí se hizo “el mayor máster de la historia”.
Caprile, una carrera desde los 13 años que no ha estado exenta de crisis de vocación
Caprile, por su parte, se inició en la costura en una academia de barrio de corte y confección con una costurera que le enseñó las bases del oficio. “Se llamaba Conchita Lucas. Fue la que me enseñó el ABC de la costura”, ha explicado Lorenzo Caprile a Mima mientras cosían mano a mano. Tras años de formación y trabajo, Caprile llegó a hacer trajes emblemáticos como, por ejemplo, el traje de novia de la infanta Cristina de Borbón. Por el camino, por supuesto, tuvo crisis de vocación en las que quiso abandonar y dejarlo todo. Sin embargo, siguió persiguiendo su gran pasión: la costura. ¡Y menos mal que lo hizo, porque gracias a ello, hemos descubierto a uno de los mejores modistas del siglo XXI!