Debes parar de dar hachazos a tu salud

• Si fueras un árbol, ¿qué salud tendría tu tronco?
• ¿Prefieres tener un álamo o un pino?

Un álamo vive entre 20 y 200 años mientras que un pino puede vivir miles de años. RTVE.es/Unsplash

¿Tenemos unos hábitos de vida saludables? ¿Es más ventajoso tener buenos hábitos que no tener malos hábitos? Julio Basulto nos responde a estas preguntas en Vida sana para saber cómo podemos evitar enfermedades y cómo debemos tratar a nuestros hábitos. Spoiler: A partir de aquí, eres un árbol.

Para entender bien todo lo que nos cuenta nuestro querido Julio, vamos a imaginarnos todos que somos un árbol. Pero antes debemos entender cómo reacciona nuestra salud a nuestros hábitos. "Esperamos que el hecho de que yo siga unos buenos hábitos se va a traducir en que de repente tengo una salud de hierro y no somos conscientes de que seguir malos hábitos tampoco hace que tengas muy mala salud de golpe. La progresión raramente es lineal y además las consecuencias de los malos hábitos son de una orden de magnitud muy superior a las consecuencias de los buenos hábitos", explica Julio sobre las diferentes consecuencias de los buenos y los malos hábitos.

La vida si fuéramos árboles

¿Qué pasa si le das un hachazo a un árbol? ¿Lo tirarás? A menos que tengas un hacha muy afilado, muchísima fuerza y el tronco sea muy delgado o esté ya debilitado, la respuesta es no. Ese árbol no caerá pero sí que lo vas a herir. Harás un corte en ese tronco pero, ¿y si le das otra vez? ¿Caerá? Depende de muchos factores como la fuerza o el viento, pero lo más seguro es que no. Eso sí, lo volverás a herir. ¿Cuándo caerá el árbol? No lo puedes saber.

El hachazo es cada uno de tus malos hábitos y el tronco es tu cuota de salud. Pero no sabemos cual es esa cuota, no sabemos que riesgo tenemos de padecer cáncer de pulmón. "Hay alguien que ha fumado 90 años y no ha muerto de cáncer de pulmón. Ya pero, ¿qué salud tenía? ¿Podía subir escaleras? Porque el hachazo le ha dado seguro. Quizá no lo ha derribado, pero a lo mejor sí que tenía riesgo de otra patología relacionada con el tabaco", cuenta Basulto.

Tenemos que ver los hachazos, o los malos hábitos, como algo que deteriora nuestra salud. No sabemos cuándo caerá el árbol pero sí que sé que cuantos menos hachazos le de, menos posibilidades tendré de que se caiga mi árbol.

Y si el árbol se cae, ¿lo hará poco a poco? La verdad es que no, lo hará de golpe. Cuando te llega la mala salud parece que todos decimos eso de "¡qué mala suerte!, justo ahora que empezaba a cuidarme". Que absurdo, ¿verdad? Toda la vida dándole hachazos a un árbol y cuando se cae, solo hablamos de suerte...

"Cuando riegas un árbol no compensas el hachazo. Por más limpia, transparente, nutritiva, fresca que sea, resulta que no lo compensas. Desde luego es bueno regarlo, seguro. Y quizá ayuda un poco a que esa herida no sea tan gruesa pero seguro que no va a evitar la caída por más que riegues el árbol", comenta Julio usando una metáfora muy clarividente.

Te contamos cómo incorporar hábitos saludables a tu vida

Un estudio de Merche Sotos Prieto, y colaboradores, dictaminó que con unos buenos hábitos disminuye la probabilidad de roturas de cadera pero también, que se incrementa con malos hábitos. Esto nos lleva al ejemplo anterior y es que los hachazos o malos hábitos van creando un daño tan grande que "cuidarse" o tener algún hábito saludable no va a servir para reparar todo el daño causado.

Laura Caorsi es una periodista que ha revisado los libros de Julio Basulto y que nos deja una cita casi perfecta para explica esto: "El hacha no solo destruye el árbol, condena al agua a la irrelevancia". Es decir, tus malos hábitos condenan a tu salud pero también hacen que los buenos hábitos que tengas sean prácticamente inútiles.

Imagina que te fumas un cigarro y comienzas a escupir sangre o que te bebes un cubata y tienes sangrado rectal. Esto no pasa, pero si pasara no lo volverías a hacer. Sin embargo, el consumo de tabaco aumenta el riesgo de cáncer de pulmón y el consumo de alcohol puede desarrollar cáncer colorrectal. "Por eso está bien poner una analogía para entender que sencillamente has dado un hachazo y que depende de un factor de riesgo que no conoces, que ese hachazo sea muy destructivo o no para ti", comenta el nutricionista.

Por lo tanto debemos tratar de dar los menos hachazos posibles y así, sea cual sea nuestra cuota de salud, estaremos lo más sanos posibles. Los consejos que lanzamos no son ninguna novedad: priorice el buen descanso, haga ejercicio, coma sano, intente dejar vicios como el tabaco o el alcohol y el árbol no caerá. Bueno, caerse se caerá como el de todos pero ahora debe elegir entre tener un álamo o un pino. Imagino que ya sabes a qué me refiero.