¿Mi acné es producido por lo que como?
- ¿Es el chocolate el gran enemigo de este problema?
- ¿Qué tipo de hidratos pueden ayudar a mi salud cutánea?
¿Has tenido o tienes acné? ¿Has probado mil soluciones? ¿Conoces la relación de tu dieta con la salud de tu piel? No es que tengamos la verdad absoluta pero venimos a aportar nuestro granito de arena en El gallo que no cesa y "Las penas se van yantando", la sección de Aitor Sánchez.
El acné es una patología cutánea muy extendida que se produce cuando el sebo, producido en las glándulas sebáceas, se queda atrapado en el folículo de los poros. Este problema no se reduce solo al rostro sino que puede aparecer en muchas partes del cuerpo y cuando lo hace, aparecen "esas pápulas, pústulas, puntos blancos y negros". El acné toma una importancia especial durante la llegada de la adolescencia ya que todos los cambios fisiológicos que se producen en el cuerpo alteran el sistema endocrino. Por tanto, las hormonas, que se producen en el sistema endocrino, tienen una influencia muy importante en el acné, así como la importancia de la dieta durante este proceso.
Ahora que sabemos que las hormonas son un elemento clave en esta patología, no nos puede extrañar que otros procesos con alteraciones hormonales como el embarazo traigan consigo también la posibilidad de sufrir acné. Pero lo que hoy nos ocupa es la relación entre la dieta y el acné.
Desde los años 50 ya se incluía el consejo dietético para el tratamiento del acné. "Se hablaba de evitar los hidratos, las grasas, aquellas comidas ricas en azúcar y también se desalentaba el consumo de dulces, bebidas azucaradas y chocolate como parte de la prevención", explica Aitor sobre qué alimentos se desaconsejaban a mediados del siglo XX.
¿Qué alimentos debemos evitar para prevenir el acné?
Todos los que hemos sufrido acné nos hemos hecho esta pregunta alguna vez. "Si existe un protagonista por delante del resto de grupos es, sin duda, el mundo de los lácteos", cuenta Aitor. Se baraja la hipótesis de que los lácteos contienen precursores de la testosterona, las sustancias que usa nuestro cuerpo para sintetizar la hormona y eso facilita la producción de sebo, causante del acné. Esto no se reduce solo a la leche, hablamos del consumo de lácteos en general e incluso durante la fermentación de algunos quesos se incrementa también la presencia de estos precursores.
La dieta occidental es la gran culpable de que el acné esté mucho más presente que en otras zonas del mundo. Nuestra dieta tiene una alta carga glucémica, es decir, consumimos demasiados azúcares. Esto se debe a dulces o cereales refinados que provocan una gran producción de sebo en la piel. ¿Cómo podemos cambiarlo? Es simple. Para minimizar el acné tenemos que consumir más proteína y que los hidratos que consumamos sean lo más integrales posible.
Debemos tener en cuenta que hace años que se descubrió que los pacientes que sufrían acné tenían intolerancia parcial a la glucosa. Además, hay otras variables que son importantes como la pérdida de peso o grasa. "Se sabe que los jóvenes que tienen obesidad sufren de un acné con el doble de posibilidades. Y se sabe también que hay un trastorno de las glándulas sudoríparas y sebáceas", explica Aitor sobre la relación que hay entre la grasa corporal y las posibilidades de sufrir acné.
¿Es el chocolate el enemigo del acné?
Todos hemos oído eso de "el chocolate es malísimo para el acné" y lo cierto es que todo viene precedido de un estudio de los años 60. En él se administró 10 veces más de chocolate al grupo de intervención que al grupo de control pero un mes después no había ninguna diferencia que podría ser significativa.
También hemos de tener en cuenta el tipo de chocolate. No es el mismo el que consumimos hoy que el de hace 60 años. "El chocolate con leche que hoy tenemos sí tiene una relación con el acné. El cacao sí que no predispone la aparición de granos, sino más bien estos otros ingredientes que podemos encontrar en el mundo de las chocolatinas como la mantequilla, la leche en polvo, el suero lácteo y por supuesto, el azúcar del que hemos hablado. Pero esto no nos debe hacer descartar un chocolate con un alto porcentaje de cacao", comenta el nutricionista sobre el chocolate de la actualidad.
Otras recomendaciones a tener en cuenta
Hay otras cosas a tener en cuenta cuando hablamos de acné. Por ejemplo, el tipo de granos. La dieta hace que varíe la forma, lugar y composición de los granos pese a que hay otros muchos factores que influyen en ello, mejorar nuestra dieta será beneficioso para nuestra salud cutánea y corporal.
Una recomendación que hay que tomar en serio es acudir a un especialista. Si sufres acné es importante acudir a un dermatólogo para que nos puedan orientar y aconsejar.
Debemos reducir la cantidad de lácteos que consumimos por los efectos negativos que puede tener sobre nuestra piel. El problema es que los lácteos nos aportan calcio, que es un componente necesario, y tenemos que suplirlo con el que podemos encontrar en verduras de hoja verde, legumbres o incluso bebidas como la de soja.
Por último, recordar que el deporte es beneficioso ya que ayuda mediante el proceso de sudoración y que el alcohol "no es muy amigo de los granos", por lo que es preferible evitarlo.