INJUVE 2024 ofrece conexiones inesperadas en ‘Se propagarán sin retorno ni distancia’
Noticia Metrópolis
- La exposición ‘Se propagarán sin retorno ni distancia’ reúne los proyectos ganadores de la última edición de la convocatoria de Ayudas INUVE a la Creación Joven
- ‘Metrópolis’ recorre esta exposición comisariada por Blanca del Río el lunes 9 de abril a partir de las 00.55h en La 2
‘Metrópolis’ presenta en su próxima emisión los nueve proyectos ganadores de la última convocatoria de Ayudas a la creación joven de INJUVE que conforman la exposición ‘Se propagarán sin retorno ni distancia’, en la Sala Amadís de Madrid hasta el 19 de abril.
Comprometidos con la sociedad que los rodea, los jóvenes creadores experimentan en la actualidad con diferentes disciplinas y materiales, desde la pintura tradicional y la fotografía, hasta las instalaciones multimedia. Los nueve trabajos seleccionados en la última convocatoria de Ayudas INJUVE exploran una amplia gama de formatos y fusionan lo analógico con lo digital, lo material con lo conceptual.
Con esta muestra comisariada por Blanca del Río, la Sala Amadís se transforma en un espacio intervenido en el que las piezas de estos nueve artistas se propagarán sin retorno ni distancia más allá de estas paredes, estableciendo conexiones inesperadas, nuevas propuestas narrativas que trascienden el lenguaje audiovisual. Cada columna supone un punto de encuentro entre líneas invisibles. Cada obra, una nueva posibilidad.
Expandiendo recorridos
El diseño arquitectónico de la exposición, ideado Blanca del Río en colaboración con Burr Studio, propone una vía de escape a los recorridos trazados, preestablecidos y, por extensión, a las directrices marcadas por el sistema. Añadiendo seis columnas a las ya existentes en la angosta Sala Amadís, se añaden elementos que perturban e interpelan al espectador para que se sumerja en un universo donde los límites se desdibujan y las conexiones inesperadas florecen. Esta reestructuración del espacio, comenta la comisaria, propicia “encuentros fortuitos, intercambios feraces y se intensifican vínculos ya existentes. ‘Se propagarán sin retorno ni distancia’ es a la vez cerramiento y apertura repentina”. Todo ello manifestado a través de una serie de obras que desafían nuestras percepciones y nos invitan a explorar el potencial de lo desconocido investigando temas que van desde la identidad y la memoria, hasta la tecnología y el medio ambiente.
El tiempo y la memoria
Más allá de la diversidad de temas y técnicas representadas en la exposición, lo que une a estos jóvenes artistas es su capacidad para desafiar las convenciones establecidas y abrir nuevas vías de expresión artística. Su trabajo refleja una sensibilidad contemporánea que busca trascender las limitaciones del presente y explorar los límites de lo posible. Algunas piezas reflexionan en torno al tiempo y la memoria. ‘Entre dos eternidades’, de Alsira Monforte Baz utiliza la estética del tiempo y la ruina como espacio poético, explorando la memoria colectiva a través de imágenes de casas abandonadas en Oporto y reflexionando sobre la naturaleza de los recuerdos y su construcción social. La ventana aparece aquí como elemento central para explorar la relación entre el interior y el exterior, lo público y lo privado, lo individual y lo colectivo.
Ahondando en la memoria visual, Berta Vicente Salas nos enfrenta, en ‘Salvar del incendio’ a una pregunta aparentemente sencilla: ¿qué dos fotografías salvarías de un incendio? Sin embargo, plantea una reflexión mucho más profunda que cuestiona la producción de imágenes y el valor de estas. Las fotografías indultadas no se muestran en la exposición, se describen en el reverso de una fotografía analógica escrita a mano por quienes las recuerdan, utilizando la escritura como medio para explorar la memoria colectiva y la relación entre fotografía y texto en un mundo saturado de imágenes visuales.
La propuesta de Cris Neira, ‘Saírse Do Tempo / Denboratik Kanpo / Sortir-se Del Temps / Salirse Del Tiempo’, busca procesar la ausencia a través del cine, explorando la imposibilidad del encuentro con una imagen inalcanzable y utilizando la poesía visual como medio para comunicarse con el pasado. En este caso no se puede hablar de un recuerdo, sino de una memoria construida a partir de fragmentos de realidad, o de realidades, de lo que pudo ser, o quizás fue, de un tiempo que es y que no es, de una imagen que no llegamos a ver nunca.
Explorando el sonido
A través de una variedad de disciplinas, que van desde la fotografía y la escultura hasta el cine y la performance, estos jóvenes creadores desafían las convenciones establecidas e invitan a cuestionar nuestra percepción del mundo, más allá de la imagen. Y esta es una exposición eminentemente sonora, que explora el sonido desde diferentes perspectivas y acercamientos estéticos y poéticos.
El ‘Tacolín’ de Élan d’Orphium, elaborado en colaboración con el luthier Alejandro de Antonio, enfrenta al espectador a un instrumento nuevo, estructurado en dos partes, una para cada pie, pero del que aún se desconocen su sonido o su contexto. Una provocación contra la codificación de los sentidos en una economía extractiva; activa una mutación que comienza separándose del suelo para unirse a él de un modo diferente, transmitiendo ondas precisas a través de un instrumento único.
Por su parte, con ‘A Distant Touch’, Laura Van Severen plantea un ejercicio especulativo que explora el impacto del sonido en nuestra experiencia del mundo. Desde el descubrimiento del instrumento más antiguo, la aparición del automóvil o la utilización de cañones sónicos en la agricultura moderna, Van Severen va tejiendo una red de narrativas en las que el sonido es el protagonista explorando las distintas formas en las que el sonido impacta en nuestros cuerpos, en el medio y en los seres vivos que lo habitan.
Irati Inoriza habla, a partir del sonido, en ‘Escondite para pájaros’, sobre la memoria y el recuerdo. En el laberinto que conforman las nuevas columnas de la Sala Amadís, se pueden encontrar pequeños refugios que actúan como cajas de resonancia y como escondites para pájaros. Su canto lleva al espectador a buscar en la sala, como busca en su memoria, aquellos recuerdos que quiere recuperar. “Recordar un recuerdo vivido, recordar un recuerdo contado, recordar por recuerdo de otro. Recordar con distorsión, porque no puede ser de otra manera. Recordar a la fuerza, por imposición, por deseo. Recordar por memoria involuntaria” (Irati Inoriza).
Tecnología al servicio del ser humano
En un mundo marcado por la incertidumbre y el cambio constante, el arte nos recuerda la importancia de la creatividad y la imaginación como herramientas para la transformación social y cultural. En este contexto, cada vez más tecnológico, algunas de las propuestas en esta muestra, invitan a cuestionar nuestro papel en el mundo y repensar nuestra relación con el entorno para construir futuros más sostenibles y deseables.
La obra ‘SHFT’, de Marta Galindo García ofrece una alternativa más sostenible e inclusiva al futuro catastrofista e individualista planteado por el movimiento de los preparacionistas. El búnker en medio de la Sala Amadís que supone la pieza ‘SHFT’ anuncia el fin del mundo tal y como lo conocemos, explorando estrategias de supervivencia ante el colapso. Frente a las narrativas apocalípticas, este proyecto apuesta por una respuesta comunitaria ante los desafíos globales.
Por su parte, Jorge Isla quiere que el espectador se mire al espejo de su propia conciencia. ‘Le Reflet’ aborda el impacto del progreso tecnológico en nuestro entorno, utilizando ensamblajes de desechos como símbolo de un extractivismo ambiental y explorando la relación entre la sociedad y sus residuos tecnológicos. Es el fin de las imágenes.
Finalmente, la obra ‘Reconstruir lo blando’ de Lucas Marcos Barquilla reflexiona sobre las condiciones materiales y simbólicas que moldean nuestros cuerpos dentro del sistema capitalista, utilizando una poética de los materiales para explorar las tensiones entre lo duro, lo blando y lo flexible. Su obra invita a reflexionar sobre la maleabilidad de nuestras identidades físicas y emocionales, explorando cómo las fuerzas externas modelan y transforman nuestras experiencias individuales y colectivas. En su investigación se entrecruzan osteología y geología, imágenes científicas y publicitarias, textos literarios y políticos.
En esencia, el conjunto de piezas en la exposición ‘Se propagarán sin retorno ni distancia’ es un recordatorio de que el arte contemporáneo es más que una expresión estética; es un medio para el diálogo, la reflexión y la transformación. En un mundo en constante cambio, estos jóvenes creadores nos desafían a mirar hacia adelante y a explorar nuevos horizontes, demostrando que el arte sigue siendo una fuerza vital y relevante que puede guiar el camino hacia un futuro más brillante y lleno de posibilidades.