Robot y humano: el mejor equipo de cirujanos

• Gafas de realidad aumentada o prototipos de órganos en 3D: elementos clave en la cirugía actual 
• En las cirugías robóticas, los humanos toman decisiones y las máquinas ejecutan a la perfección

robot quirúrgico para cirugía

Algunas cirugías para extirpar tumores hepáticos, biliares o pancreáticos, hace pocos años, eran tan complejas que prácticamente era imposible limpiar la zona completamente, con las consecuencias nefastas en la supervivencia que eso conllevaba. Hoy, afortunadamente, algunas unidades de cirugía especializadas cuentan con tecnología de última generación que logra facilitarles mucho la tarea, obteniendo resultados espectaculares y pronósticos muy favorables para los pacientes.

El resultado de la cirugía se vislumbra antes de empezar

“Nos ayudan mucho los modelos tridimensionales. Con las exploraciones que hacemos con TACs y escáneres, somos capaces de hacer una reconstrucción en tres dimensiones de los órganos y analizarla previamente a la intervención”, explica el Dr. Esteban Cugat, jefe de la Unidad de Cirugía Hepato-Bilio-Pancreática del Hospital Universitari Germans Trias i Pujol. “Disponemos también de gafas de realidad aumentada para analizar qué tipos de tumores pueden extraerse en su totalidad. Practicamos resecciones previas para saber si lo vamos a poder sacar todo”, añade. “Así, el cirujano puede hacer un análisis perfecto de la anatomía que va a tener que tratar”, asegura. 

Robots al servicio de los cirujanos

En el este hospital, como en otros más de 70 centros médicos españoles, cuentan con la ayuda del robot Da Vinci para la realización de las intervenciones más complejas. La cirugía robótica ya logra suplir las limitaciones de la cirugía laparoscópica convencional, haciendo más cómodas y más precisas las intervenciones quirúrgicas. “El cirujano tiene la sensación de estar dentro del cuerpo que está operando, tiene una visión totalmente inmersiva”, comenta el doctor. Cabe aclarar que no se trata de una cirugía autónoma, pues el robot transmite los movimientos del cirujano. Las decisiones de cómo intervenir las toma el ser humano, y el robot ejecuta sus órdenes a la perfección, consiguiendo, además, eliminar el temblor natural de la mano que opera.

Otra ventaja que ofrecen estas cirugías es que resultan mucho menos invasivas que las cirugías tradicionales, con posoperatorios más rápidos y sencillos. “La medicina ha avanzado mucho de la mano de la tecnología y es evidente que estos avances nos permiten hacer cosas que antes no éramos capaces de hacer. No solo eso sino que aquellas que ya hacíamos antes, ahora las hacemos con mayor precisión y mayor seguridad”, concluye Cugat.