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Ana Gallardo, del arte relacional al activismo

Noticia  Metrópolis
  • La exposición ‘Tembló acá un delirio’, en el Museo CA2M hasta el 7 de julio, recoge una selección de obras de Ana Gallardo que dan voz a mujeres olvidadas
  • ‘Metrópolis’ recorre la obra de esta artista argentina residente en México el lunes 22 de abril a partir de las 00.55 h en La 2 

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Ana Gallardo, del arte relacional al activismo
La artista argentina Ana Gallardo es la protagonista de este capítulo de 'Metrópolis'

Del arte relacional al activismo: la práctica de Ana Gallardo traspasa las fronteras de lo convencional para explorar la experiencia humana.

Con una mirada fuertemente política y una gran sensibilidad, desafía las normas establecidas, construyendo un lenguaje que trasciende el ámbito artístico y se instala en lo social. Su obra es un testimonio de silencios rotos, historias olvidadas y situaciones de violencia dando voz a mujeres silenciadas por el peso de la opresión.

En su próxima emisión, ‘Metrópolis’ recorre la obra de Ana Gallardo a partir de la exposición ‘Tembló acá un delirio’ en el Museo CA2M (Centro de Arte Dos de Mayo de Móstoles), que muestra un conjunto de obras que nos confronta a la realidad a través del prisma del arte: un arte entendido como herramienta de reparación y transformación, tanto personal como colectiva.

Artista feminista y política

Ana Gallardo nace en Rosario, Argentina, en 1958, en una familia con fuertes vínculos con el arte. Su padre, poeta. Su madre, artista frustrada. Sin embargo, no tuvo una educación artística formal. Desde sus inicios en la década de 1980, ha cultivado una práctica artística que se distancia del arte complaciente y machista, abordando temas como la violencia de género, la vejez o la memoria a través de dibujos, vídeos, instalaciones, acciones y performances.

‘Estudio para la restauración de un perfil I y II’ (2020/2024)

‘Estudio para la restauración de un perfil I y II’ (2020/2024)

Se define a sí misma como una artista agorafóbica y terapéutica, feminista y política. Su práctica artística es una herramienta para procesar sus propias emociones y traumas, así como para dar voz a las experiencias silenciadas de otras mujeres. Sus obras son espacios de encuentro y reflexión, donde los espectadores pueden confrontar realidades dolorosas, pero también transformadoras, de la vida cotidiana.

A través de diferentes acciones sociales, se propone alcanzar lo que ella denomina “una venganza hermosa”. Sus proyectos más reconocidos, ‘Un lugar para vivir cuando seamos viejos’ y ‘Escuela de envejecer’, exploran el castigo a la vejez femenina, y marcan las pautas para comprender su práctica artística, más instalada en el ámbito de lo social que de lo artístico. Colabora con mujeres mayores para explorar sus deseos y frustraciones, desafiando los estereotipos de la vejez y promoviendo la autonomía y la creatividad en la tercera edad. Estas experiencias colectivas son fundamentales para su producción artística, que se nutre del diálogo y la colaboración con otras personas.

‘Escuela de envejecer’ (Ana Gallardo)

‘Escuela de envejecer’(Ana Gallardo)

Para Ana Gallardo, “hacer lo que deseamos es un deber, pero hacerlo como queremos es un derecho”. Esta afirmación resuena en cada una de sus obras, donde busca dar voz a mujeres silenciadas y visibilizar las injusticias. Su producción, cargada de una mirada afectiva y crítica, habla de violencia, y se nutre de sus experiencias personales y de la realidad de otras mujeres que han sufrido la opresión del sistema, como prostitutas, presas y jubiladas.

‘Boceto para un fracasado proyecto’ (2011/2024) la lleva a Xochiquetzal, un geriátrico para mujeres prostitutas que han vivido en la calle, en México, donde se encargará de cuidar a Estela (‘Estela’, 1946/2011) hasta su muerte. Este trabajo es un claro ejemplo del poder transformador del arte que Ana Gallardo defiende desde toda su práctica.

‘Boceto para un fracasado proyecto’ (Ana Gallardo, 2011/2024)

‘Boceto para un fracasado proyecto’ (Ana Gallardo, 2011/2024)

Reconstrucción de la artista que fue su madre

Desafía los límites del arte contemporáneo con una mirada política, feminista y autobiográfica. Su interés por la memoria y la recuperación de historias olvidadas la llevó a explorar la figura de su madre, Carmen Gómez Raba, una pintora frustrada que nunca tuvo la oportunidad de exhibir su obra. Siempre soñó con exponer en Madrid, nos cuenta. ‘Estudio para la restauración de un perfil I y II’ (2020/2024), en la exposición ‘Tembló acá un delirio’ (Museo CA2M, Madrid), cumple ese sueño.

‘Estudio para la restauración de un perfil I y II’ (2020/2024)

‘Estudio para la restauración de un perfil I y II’ (2020/2024)

Para este proyecto, Gallardo recupera y restaura con su propia saliva siete pinturas de su madre, una tarea terapéutica y un acto de reivindicación artística. De nuevo, aquí se produce una ‘venganza hermosa’. Carmen Gómez Raba murió muy joven, cuando Ana Gallardo era una niña. Por ese motivo, este proyecto se plantea como un rencuentro y reconciliación con la mujer y con la artista que fue su madre.

El carboncillo como herramienta y lenguaje

En obras como ‘(Te busco en otro nombre) Bitácora Guatemalteca’ 1987/2023 (2022/23), utiliza el carboncillo y el texto para denunciar la violencia ejercida sobre los cuerpos de las mujeres, desafiando los límites de lo que es posible contar y decir en el arte contemporáneo y dando testimonio de la historia de lo humano.

Ana Gallardo con María Us

Ana Gallardo con María Us

En los años 80, Ana Gallardo colabora con los grupos armados guatemaltecos. Años después se propone recuperar el contacto con aquellas mujeres encontrándose con la dificultad de desconocer sus nombres reales. Finalmente contacta con Maria Us, una mujer de origen quiché que sufrió la violencia de las milicias guatemaltecas en los años 80. A través de esta colaboración María puede por fin contar su historia y honrar la memoria de todas esas mujeres olvidadas.