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¿Sabías que la Inquisición prohibió 'El Lazarillo de Tormes'?

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Grandes novelas de aprendizaje con Isabel Cadenas Cañón

Hacerse mayor no es fácil. La narrativa nos lo ha contado muchas veces. Un niño, una niña, abandonan su casa para enfrentarse al mundo hostil. Viven aventuras y conocen a muchas personas, algunas buenas y otras malas, la mayoría… Pero los niños consiguen superar todos esos obstáculos. Y, al final del viaje, sin que sepamos muy bien cómo, han dejado de ser niños.

En literatura esto tiene un nombre: bildungsroman o novela de aprendizaje. En cine lo llamamos coming of age, que podríamos traducir como “hacerse mayor”.

Isabel Cadenas Cañón explica en Ovejas Eléctricas -programa disponible en RTVE Play- las curiosidades y entresijos de algunas de las más conocidas novelas de aprendizaje.

Recreación de escenas del Lazarillo de Tormes

Recreación de escenas del Lazarillo de Tormes

El Lazarillo de Tormes

Una de las más conocidas novelas de aprendizaje de nuestra narrativa es el Lazarillo de Tormes (1554), obra anónima que, en realidad, ni es una novela ni se llama así.

La vida de El lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades, empezó a circular como una carta y por eso está escrita en primera persona. En ella, Lázaro escribía a VM para contar su vida: sus fortunas y sus adversidades. Como sabemos, fueron muchas más las segundas que las primeras.

Lázaro empieza siendo ingenuo pero con cada uno de sus nueve amos (el Ciego, el clérigo, el escudero, el fraile de la Merced, el buldero, el pintor, el capellán y el alguacil), se le va quitando la ingenuidad.

Se acaba convirtiendo en un pícaro: en alguien que tiene que aprender a sobrevivir. El pícaro es alguien que devuelve el mal que recibe de la sociedad: no es malo por sí, es que es la única manera en la que puede salir adelante.

La novela picaresca

La novela picaresca

La novela picaresca

El Lazarillo va contando sus peripecias y sus aprendizajes con esos amos, pero también va haciendo una crítica de la sociedad de entonces, y es especialmente duro con el clero. Quizá por eso fue prohibido por la Inquisición en cuanto se publicó.

Aún así, fue muy popular e inaugura un nuevo género literario, el de la novela picaresca. Hasta entonces, en España había habido principalmente novelas de caballerías y novelas pastoriles, que mostraban la sociedad de una manera bastante idealizada. El Lazarillo hace lo contrario: el personaje viene de las clases más bajas de la sociedad, y además sirve para criticar precisamente a esa sociedad donde tan difícil es salir de la miseria

Después, todas las novelas picarescas básicamente copiarán al Lazarillo, serán narraciones en primera persona que tratan de justificar la vida complicada del protagonista y de lo que tiene que hacer para sobrevivir en una sociedad injusta. 

Goethe y la novela de aprendizaje

Goethe y la novela de aprendizaje

`Los años de aprendizaje de Wilhelm Meister´

El Lazarillo de Tormes fue todo un éxito pero la novela que inaugura el género del Bildungsroman o novela de aprendizaje la escribió Goethe a finales del s. XVIII: Los años de aprendizaje de Wilhelm Meister.

De la misma manera que el Lazarillo, esta obra es un reflejo de su época, del final del feudalismo y del nacimiento de la burguesía: una parte del pueblo que se separa del pueblo, pero no tiene el linaje de la nobleza.

Wilhem Meister es hijo de comerciantes (burgueses) y su vida está encaminada a seguir con el negocio familiar, pero a él lo que le gusta es escribir teatro. Va recorriendo diferentes mundos en un claro camino de aprendizaje que muestra los temas que luego serán típicos en las Bildungsroman: la oposición individuo-sociedad, la importancia del arte en la formación, el viaje, y hasta la religión.

Mujercitas. Las novelas de aprendizaje

Mujercitas. Las novelas de aprendizaje

Mujercitas

Una de las personas a las que más influyó la obra de Goethe no es otra que Louisa May Alcott, la autora de Mujercitas, en la que podemos encontrar muchos guiños a Los años de aprendizaje de Wilhelm Meister.

Las `mujercitas´ aprenden mucho a lo largo de los dos libros. De hecho, empiezan como niñas y acaban como “mujeres”. Hay una tendencia a pensar que las novelas de aprendizaje de chicas son más interiores que las de chicos, que salen menos de casa, pero Mujercitas prueba lo contrario.

Tom Sawyer y las novelas de aprendizaje

Tom Sawyer y las novelas de aprendizaje

Tom Sawyer

¿Es Tom Sawyer un bildungsroman? Tom es huérfano, vive con su tía y es bastante travieso. Vive un sinfín de aventuras junto a su amigo Huckelberry Finn pero, en el fondo, ¿Aprende algo Tom? Sí, aunque casi no le da tiempo. Es una novela que pasa en un verano, una estación muy simbólica en la narrativa de aprendizaje.

Pippi calzaslargas, Harry Potter, Pinocho, Lady Bird, Matilda… La narrativa está repleta de historias de crecimiento como éstas que todos conocemos. De todas ellas y de algunas más hablan en Ovejas Eléctricas en su programa `El arte de crecer´. Ovejas Eléctricas, los martes, a las 23:00 horas, en La 2 (y siempre disponible en RTVE Play).